La edición de 2021 del Festival Internacional de Documentales DOK.Fest Munich llega a su último día tras dos semanas de proyecciones que hemos estado comentando en nuestras crónicas. Uno de los últimos premios concedidos ha sido el Premio del Público, que ha recaído en el emocionante documental noruego He's my brother (Cille Hannibal, Christine Hanberg, 2021), que ya recibió una Mención Especial en la sección NORDIC:DOX Award del CPH:DOX, sobre la relación entre hermanos protagonizada por Christine y Peter, un joven nacido con una extraña enfermedad. Con este galardón se cierra la lista completa de Premios de DOK.fest:
VFF Documentary Film Production Award: The other side of the river (Antonia Kilian, 2021)
Premio Aldeas Infantiles: School of hope (Mohamed El Aboudi, 2021)
DOK.Series Award: Un pedazo de paz (Jacobo Albán, 2021)
Audience Award: He's my brother (Cille Hannibal, Christine Hanberg, 2021)
El objetivo del gobierno danés, que preside en minoría la socialdemócrata Mette Frederiksen desde 2019, es alcanzar la cifra de cero demandantes de asilo. El año pasado, de hecho, se concedió asilo a tan solo 600 personas, en parte motivado por la crisis del coronavirus. La justificación de estas posición más conservadora frente a la inmigración es que es necesario trabajar en la integración de los inmigrantes que actualmente existen en Dinamarca, un país que precisamente no ha elaborado leyes muy integradoras. Su antecesor en el gobierno, el conservador Lars Løkke Rasmussen implantó algunas de las leyes más restrictivas de Europa, como un Código Penal más duro para los barrios habitados mayoritariamente por inmigrantes, la prohibición del burka en los espacios públicos o la controvertida "ley de joyas" que permite a la policía requisar dinero y objetos a los refugiados para sufragar los gastos de su atención pública. Medidas que no parecen encaminadas a una integración mayor en la sociedad danesa.
En este contexto, el documental Min bror, mit hjem (Follow your home) (Kathrine Ravn Kruss, 2021), estrenado en la sección Nordic:Dox Award del CPH:DOX 2021, aborda directamente esta problemática a través de la historia de dos hermanos refugiados procedentes de Afganistán. Popal, de 21 años, fue el primero que llegó a Copenhague, huyendo de los talibanes y consiguiendo asilo debido al peligro que suponía para él regresar a su país. Él cumple los requisitos del "buen inmigrante", habla un danés fluido, que parece la característica principal por la que se considera estar integrado en la sociedad, y ha sido acogido por una familia cristiana. Años después de llegar a Dinamarca, consigue reunirse con su hermano menor, Darmal, de 18 años, que pudo salir de Afganistán, donde también corría el peligro de ser incorporado a las fuerzas militares de los talibanes. El documental comienza cuando Popal y Darmal ya se han reunido, y cuando a éste se le niega el asilo.
El largo proceso de apelación que tiene lugar para tratar de conseguir la condición de refugiado es el centro de la película, pero desde el punto de vista de esa situación de desequilibrio constante que supone esperar durante más de dos años una respuesta del Tribunal de Apelaciones, lo que no es precisamente una forma ideal de integrar a los refugiados en la sociedad danesa. La directora mantiene su mirada en los dos hermanos, especialmente en Popal, más extrovertido, pero también muestra el estado de ánimo cada vez más desesperanzado de Darmal, que comienza un proceso de distanciamiento emocional tanto de su hermano como de la familia que los acoge, como un instrumento para asumir con mayor facilidad la posible noticia de su separación. En este sentido, Follow your home es una apuesta sencilla que utiliza el retrato de personajes para plantear una reflexión más general sobre las políticas migratorias de Dinamarca, que hace unas semanas comenzó a revisar los permisos de residencia de refugiados sirios con la intención de devolverlos a su país, del que considera que ya no supone un peligro para ellos. Esta decisión se basa en un estudio de la Junta de Refugiados cuya veracidad ha sido puesto en duda por numerosas organizaciones internacionales.
DOK.focus Empowerment
Una de las películas vencedoras del pasado Festival de Sundance fue Writing with fire (Sushmit Ghosh, Rintu Thomas, 2021), que consiguió el Premio del Público en la sección World Cinema y un Premio Especial del Jurado en la sección Impact and Change, además de haber sido seleccionada para el F:ACT Award del CPH:DOX. El documental comienza con la descripción del sistema de clases de la India, que divide a la sociedad en cuatro grupos: brahmins (sacerdotes y profesores), kshatriyas (guerreros y gobernantes), vaishyas (granjeros y comerciantes) y shudras (obreros). Pero fuera de este sistema de castas, y por tanto por debajo de todos ellos, se encuentran los dalits o intocables, que son los parias, los que nunca pueden acceder a ser más de lo que son. Precisamente un grupo de mujeres dalits, que debido a su condición de excluidas del sistema de castas son las más vulnerables en cuanto a la violencia de género, cuyas denuncias ni siquiera reciben la atención de la policía, fundaron hace unos años el periódico Khabar Lahariya, que principalmente centraban en las problemáticas de los dalits, y cuya repercusión ha terminado siendo imprescindible para que muchos de estos problemas sean atendidos por las autoridades.
A pesar de que muchos vaticinaban el fracaso de esta iniciativa, especialmente tras la transformación de los medios de comunicación en formato digital, el periódico ha sabido reciclarse, consiguiendo incluso una repercusión mayor con millones de seguidores de su canal de YouTube. La película acompaña a cuatro de estas periodistas en su búsqueda de las noticias: Meera, Kavita, Suneeta y Shyamkali. Meera es la redactora jefe, con estudios universitarios y ferviente defensora de la libertad de prensa, aunque en su familia no se recibe con satisfacción su trabajo, como se muestra en una escena en la que discute con su padre, que no entiende por qué no tiene una vida como mujer casada. Ella es la encargada junto a Kavita de realizar la cobertura de las elecciones y entrevistar al Ministro Principal del estado de Uttar Pradesh, un populista de derechas que es refrendado en las urnas.
El trabajo de Suneeta se enfoca más hacia la minería ilegal, porque de hecho ella vivió en una aldea minera que fue cerrada pero que siguen explotando las mafias, como otras muchas minas en su zona. Pero también cubre el asesinato de una mujer que recibió un hachazo, y que muestra la vulnerabilidad que sufren en la sociedad india, principalmente conservadora y patriarcal. Shyamkali, por su parte, es una periodista novata que ha sufrido abusos de su marido, al que abandonó para incorporarse al periódico, y a la que en principio le resulta difícil adaptarse a la tecnología digital porque nunca se le ha permitido tener un móvil en sus manos.
Writing with fire es un documental que transmite la valentía de estas mujeres en una sociedad eminentemente hostil. Se muestra cierto paternalismo por parte de sus compañeros periodistas masculinos, que le dan "consejos" sobre su trabajo: "No deberías preguntar tan directamente, tienes que ser más amable". Pero ellas establecen los parámetros de un periodismo reivindicativo, que quiere ser un instrumento para dar visibilidad a los problemas de unos ciudadanos, especialmente las mujeres, que no son habitualmente protagonistas de historias en los medios de comunicación. Y aunque su final es de alguna manera poco esperanzador (una de las reporteras abandona su trabajo para cumplir su compromiso de casarse), el conjunto ofrece una mirada optimista hacia cómo es posible cambiar los tópicos establecidos para construir una sociedad más justa.
DOK.music
El director de Here we move here we groove (Sergej Kreso, 2021) define a la música en su documental como una especie de caballo de Troya, que le permite hablar de temas más generales. Y, efectivamente, el principal enfoque de la película es la transformación de Europa, representada en la escena musical de Berlín, y también en la propia familia de Robert Soko, DJ nacido en Bosnia que se trasladó a Alemania en 1993, donde creó la formación Balkan Beats Soundsystem, influida por las sonoridades musicales de la antigua yugoslavia, y especialmente la repercusión internacional de las bandas sonoras de Goran Bregovic para películas como Underground (Emir Kusturica, 1995). Cuando llegó a Berlín, Robert Soko comenzó a trabajar como taxista, y este antecedente profesional es utilizado de forma inteligente por el director Sergej Kreso, que tiene en común con Robert Soko su origen bosnio y su emigración en 1993, huyendo de la guerra, en este caso a Holanda, donde ha desarrollado su carrera como cineasta. La primera parte de la película se convierte así en una especie de road-movie en la que el DJ conduce por las calles de Berlín, recogiendo a miembros de su banda o familiares, en una especie de ensoñamiento en el que reflexiona sobre su vida.
Pero el documental, que tuvo su estreno mundial en la sección de Documentales Holandeses del IDFA 2020, se acerca a un momento de crisis creativa de Robert Soko, que se siente estancado en sus propuestas musicales. "Mi trabajo es casi mecánico, sé lo que ofrecer, lo que le gusta al público, pero no siento que aporto nada". Esta saturación creativa se resuelve sin embargo con un nuevo proyecto que se inspira en esa transformación de Europa en un espacio multicultural que han traído las constantes crisis migratorias. Y plantea una cierta hipocresía sobre cómo aceptamos esta multiculturalidad, que nos interesa, sin entender que estamos en una sociedad diversa, que se alimenta con la inmigración. Hay momentos en los que el director muestra el hogar de Robert Soko, que es una especie de microuniverso de esta nueva sociedad. Él mismo es de origen bosnio, habla alemán e inglés, mientras su esposa se crió en Francia pero es de origen árabe. Y entre ambos hay algunas discusiones sobre qué tipo de educación tienen que darle a su hija pequeña, en un hogar donde se hablan cinco idiomas diferentes.
Su último proyecto musical es, precisamente, un reflejo de esta multiculturalidad, a través del Balkan Beats Soundystem que incorpora a cantantes asentados en Berlín pero de origen palestino, afgano, iraquí, bosnio o latino, y que conformaron su álbum Arigato amigo (2017, BalkanBeats Records), pero también forman parte de la banda sonora de la película, Here we move here we groove (2020, BalkanBeats Records). Este documental musical es, por tanto, un acercamiento a una realidad que define a Europa como un espacio de convivencia cultural, una mirada a la complejidad de la convivencia, pero también una celebración de la creación artística más allá de las fronteras.
Seleccionada para la sección ACID de Cannes 2020, Loin de vous j'ai grandi (Marie Dumora, 2020) es una película que continúa un proyecto comenzado hace más de veinte años por su directora, que ha realizado varios documentales centrados en una misma familia. Avec ou sans toi (Marie Dumora, 2001) fue su primer documental, que se adentraba en un centro de acogida infantil en Alsacia, y tenía como protagonistas a Belinda y Sabrina, dos hermanas de 11 y 9 años. Posteriormente, su cámara se centró en algunos jóvenes, uno de ellos novio de Belinda, que se enfrentan a la mayoría de edad en Emmenez-moi (Marie Dumora, 2004). En Je voudrais aimer personne (Marie Dumora, 2010), vuelve a centrarse en Sabrina, que ahora es una madre adolescente, y en Belinda (Marie Dumora, 2016), realiza una retrospectiva del personaje, mostrando la niñez que reflejó en su primer documental, pero también su crecimiento hasta convertirse en una joven veinteañera. Esta fue su película que alcanzó mayor repercusión, siendo seleccionada en la Berlinale y en la sección ACID de Cannes.
Loin de vous j'ai grandi (Far from you I grew), regresa a este grupo de jóvenes, ahora enfocada en la figura del hijo de Sabrina, Nicolas, que fue separado de su madre por los servicios sociales y vive en un hogar de acogida, casi como cierre de un círculo vital que comenzó hace años con Sabrina viviendo también en un centro infantil. Su vida transcurre entre este hogar que pronto tendrá que abandonar y sus dudas sobre si regresar con su madre, a la que ha visitado solo de forma esporádica, y que ha iniciado una nueva relación. Las reflexiones sobre la identidad propia y sobre la definición de hogar están nuevamente en el centro de la propuesta de esta directora. El problema es si realmente esta nueva incursión, aunque tangencial en la vida de Sabrina aporta algo diferente a lo que ya hemos visto en los anteriores documentales de Marie Dumora. Nos parece que no, que se trata de un regreso a una temática ya agotada que incluso erra en la introducción de elementos más metafóricos, como la obsesión de Nicolas por las historias de Jack London, representada en escenas de cierta artificialidad. Esta nueva incursión en las vidas frustradas de sus personajes se siente como una especie de Boyhood (Richard Linklater, 2014) que no ha sabido detenerse a tiempo.
Belinda se puede ver en Filmin.
Boyhood (Momentos de una vida) se puede ver en Amazon Prime y HBO España.
No hay comentarios:
Publicar un comentario