13 abril, 2018

Las mejores bandas sonoras de 2018 (1ª Parte)

Como hemos realizado durante el año pasado, comenzamos aquí nuestro repaso a las mejores bandas sonoras publicadas durante 2018, enfocándonos en el primer trimestre que acaba de terminar. Esta es la música de cine que nos parece más interesante.

The strange ones - Brian McOmber
Wayfind Records  5 / 1/ 2018

Esta película independiente sorprende por ese minimalismo que adopta el director a la hora de mostrarnos las imágenes. Aventura solitaria de dos personajes que parecen huir de algún hecho misterioso, la cinta de Christopher Radcliff y Lauren Wolkstein consiguió finalmente estrenarse el pasado mes de enero ras pasar durante casi un año por diferentes festivales norteamericanos. El trabajo musical de Brian McOmber, compositor especialista en bandas sonoras con cierto aire desasosegante, como las excelentes It comes at night (2017, Milan Records) y Krisha (2016, Lakeshore Records), deambula también por este cierto sentido minimalista de las imágenes, describiendo con un espléndido tema principal, interpretado por una solitaria flauta, envolvernos en ese ambiente enigmático que acompaña a los dos personajes principales. Esa melodía solitaria se transforma en sonidos sintetizados cuando la banda sonora se separa de los protagonistas y se centra más en el entorno que les acompaña, adquiriendo un tono de mayor inquietud si cabe, cercano al cine de terror, que tiene cierto aire al trabajo de Angelo Badalamenti para Twin Peaks (ABC, 1990-1991) y adquiriendo también momentos de experimentación como en "The stand off". A pesar e su corta duración, solo 22 minutos, la banda sonora de The strange ones (Christopher Radcliff, Lauren Wolkstein, 2017), es un excelente trabajo que confirma a Brian McOmber como uno de los compositores más interesantes del momento.

Una mujer fantástica - Matthew Herbert
Milan Records  5 / 1 / 2018

La película chilena de Sebastián Lello ha sido uno de los títulos más destacados del año pasado, desde su presentación en el Festival de Berlín, ganadora del Premio Goya a la Mejor Película Latinoamericana y del Oscar a la Mejor Película de Habla no inglesa. Pero hasta este mes de enero no se ha publicado oficialmente su banda sonora, compuesta por el conocido músico inglés, experimentado en la creación de sonoridades electrónicas tanto como autor autónomo como en bandas sonoras para diversos géneros artísticos. Entre ellos, el cine, con escasas pero interesantes incursiones como la película española Vida y color (Santiago Tabernero, 2005). Para este film chileno, el compositor ha creado una propuesta menos electrónica de lo que suele ser habitual en él, aunque hay algunos elementos propios de su estilo, pero sobre todo destaca en esa apertura orquestal con la que se abre la banda sonora, excelente motivo musical que tiene también cierto aire de misterio, pero sobre todo de esa zozobra vital que iremos viendo cómo acompaña a la protagonista a lo largo de la historia. Es un tema hermoso, que se desarrolla en otras variantes no menos interesantes, como en "Fountain". La flauta, como en la banda sonora anterior, también tiene protagonismo en ésta, aquí como trasunto de la soledad que vive el personaje principal, especialmente en temas como "Hospital" o "Taxi".

Phantom Thread - Jonny Greenwood
Nonesuch Records  12 / 1 / 2018

El guitarrista de Radio Head, envuelto en la música de cine desde hace algunos años, especialmente con sus colaboraciones con el director Paul Thomas Anderson, consiguió su primera nominación al Oscar con este complejo trabajo musical. Aunque, a pesar de ser la banda sonora que posiblemente más mereciera el premio de la Academia de Hollywood, Jonny Greenwood ni siquiera promocionó su nominación ni acudió a la ceremonia. Esta incursión en la música romántica, con influencias de aquella excelsa grabación de Glenn Gould, Bach: The Golden Variations (1956, Columbia Records), se convierte en uno de los más elaborados y perfectos trabajos del compositor, aupado gracias a una historia repleta de contradicciones formales: aunque se trata de una historia de amor, no es una película romántica, ni lo son sus protagonistas. Es más, el propio tema principal "Phantom thread", sobre el que pilota buena parte de la banda sonora, tiene un cierto aire oscuro, que nos presenta una atmósfera casi vampírica, en esa fusión de romanticismo y obsesión que envuelve a toda la película. El piano es uno de los principales protagonistas, y es en esos temas reposados, como "Alma" o la variación "Phantom thread II", en los que encontramos una influencia más clara de Glenn Gould y su album de debut. Son precisamente estas cuatro variaciones del tema principal las que otorgan a la banda sonora de una prestancia sublime, envuelta en otros precisos momentos musicales en los que Greenwood juguetea con las sonoridades de barrocas, como en "Barbara Rose".

Psi - Alexis Maingaud
Alexis Maingaud  12 / 1 / 2018

El director de este documental, Olivier Wright, propone un experimento entre la ficción y la realidad con él como principal protagonista, planteándose la posibilidad de cómo hubiera sido su vida si hubiera tomado cuatro caminos diferentes. Así, rodado durante cuatro años en ciudades como París, Londres, Jerusalén, Helsinki y Los Angeles, gracias a la colaboración de amigos y familiares, este documental nos traslada una mirada casi filosófica en torno a nuestra existencia. Para subrayar esta idea que deambula entre momentos de ficción y entrevistas a expertos en la psicología y la sociología, el compositor Alexis Maingaud, creador sobre todo de bandas sonoras para documentales y cortometrajes, consigue elaborar una partitura minimalista que contiene momentos de auténtica delicia, como ese hermoso "Regrets", en el que se dan la mano el piano y el violín como instrumentos solistas. Se trata en general de una melódica creación con sonoridades etéreas en las que el músico camina por ese complicado trayecto en torno a la psicología humana, aquí patente sobre todo gracias a la utilización de voces corales presentes en los momentos en los que la narración nos propone una lectura más filosófica, como "The ways of the Universe", pero sobre todo en esa épica conclusión, "Free", que sostiene precisamente la principal razón temática del documental: ese libre albedrío teórico que sin embargo no parece posible.  


Innocent Mara - Andreu Jacob
Norge Productions  1 / 2 / 2018

The real screenplay - Andreu Jacob
Norge Productions  18 / 3 / 2018

El compositor español Andreu Jacob, nacido en Barcelona pero residente en Noruega, ha venido desarrollando una amplia carrera musical en el terreno del audiovisual y el diseño. Este año nos ofrece dos interesantes trabajos para cortometrajes, que además ha tenido la fortuna de publicar en plataformas digitales: Innocent Mara (Willy Lukwago, 2018) es una producción sueca sobre una joven que se enfrenta a una dura vida cotidiana marcada por la epilepsia que sufre y por los episodios de bullying que vive en la escuela. Se trata de un drama para el que Andreu Jacob elabora una música elegante, utilizando escasa instrumentación, con el piano como protagonista, pero también dando predominio a la voz solista, con el propio Jacob interpretando la canción "Lys", mientras que utiliza sonoridades más electrónicas en los momentos en los que aparece el bullying o la epilepsia. Andreu Jacob desarrolla también temas de larga duración, como "Agression", en los que experimenta con sonoridades atonales que dan una sensación de desasosiego. Esta tendencia hacia la experimentación está más patente en The real screenplay (Sergey Znamensky, 2018), cuento fantástico de producción rusa en el que un guionista de éxito descubre que sus personajes son reales. Se trata de un trabajo más ambicioso, en el que utiliza una paleta más amplia de instrumentaciones, siempre desde la base electrónica. Hay también cierto minimalismo, como en "Yulia", uno de los temas principales, pero sobre todo resulta interesante la evolución psicológica, planteada musicalmente en el predominio de voces masculinas ("Redemption"), frente al uso de más voces femeninas en la primera parte ("Pregnancy"). Destaca especialmente la composición "Timer", que a lo largo de sus cinco minutos desarrolla una estructura discordante jugando coros, voz solista y orquesta. 

The mercy - Jóhann Jóhannsson
Deutsche Grammophon  2 / 2 / 2018

El repentino fallecimiento del compositor islandés Jóhann Jóhannsson se produjo a tan solo unos días de la publicación de una de sus últimas bandas sonoras, para este drama dirigido por James Marsh y protagonizado por Colin Firth y Rachel Weisz. Este mes de abril se ha editado su último trabajo, el inacabado Maria Magdalena (Garth Davis, 2018), pero resulta menos efectiva y en cierto sentido más impersonal que la que nos ocupa. En términos de estilo musical, The mercy (James Marsh, 2017) supone un (lamentablemente temprano) cierre certero a sus trabajos, también en el terreno autónomo. Porque contiene, al margen de ese aire de melancolía que esta presente en toda la banda sonora, algunos de los elementos habituales en otras composiciones del músico islandés. Aunque al principio no parece demasiado interesante, y no aporta grandes hallazgos, conforme avanza el álbum (y la narración), The mercy empieza a desgranar esa tonalidad apagada, pero brillantemente misteriosa, que se va apoderando de toda la composición, en temas como "A sparrow alighted upon our shoulder", y especialmente en la pieza de piano "Good morning, midnight". Pero decimos lo de cierre efectivo porque en The mercy Jóhann Jóhannsson se autoreferencia, reinterpretando temas de anteriores bandas sonoras, como los documentales Copenhagen Dreams (Max Kestner, 2010), un soberbio retrato de la ciudad en la que estuvo afincado durante mucho tiempo el compositor, o Free the mind (Phie Ambo, 2012). Y en cierta manera hay también elementos de su último disco de música autónoma, el magnífico Orphée (2017, Deutsche Grammophon), en esa utilización de la voz narrativa (en español) como instrumento solista en "The radiant city", que tiene evidentes reminiscencias de "A song for Europe", así como en la utilización de la Air Lyndhurst String Orchestra

L'ordine delle cose - Sergio Marchesini
Playaudio  12 / 2 / 2018

El director Andrea Segre se dio a conocer con la película La pequeña Venecia: Shun Li y el poeta (2011), que le valió varios premios en el Festival de Venecia. Centrada de nuevo en el drama de la inmigración, su última película también estuvo presente en la pasada edición de la Mostra de Venecia, y presenta a un veterano policía asignado a una misión de control de inmigrantes en Libia, cuyos valores se verán puestos en tela de juicio cuando decide ayudar a una mujer somalí a encontrar a su marido. Sergio Marchesini, joven compositor aunque ya con una interesante filmografía sus espaldas, firma una banda sonora que se mueve entre dos aguas: la creación de composiciones dramáticas para subrayar las escenas más destacadas desde el punto de vista emocional, y la elaboración de sonoridades de aire africano que subrayan el escenario principal de la historia. Pero sobre todo destaca esa especial ambientación sonora que le proporciona a la banda sonora la participación de New Landscapes Trio, formación de estilo barroco que está presente en casi todas las composiciones. El violín barroco de Silvia Rinaldi, el laúd de Luca Chiavinato y el clarinete bajo de Francesco Ganassin contribuyen a aportar profundidad a la música, incluso en aquellos fragmentos más experimentales, como "Finland", pero sobre todo en las aportaciones en solitario de Sofia Labropoulo, una experta intérprete del Qanun, instrumento de cuerda de Oriente Medio, como en ese hipnótico "Sii il nostro compagno lungo la strada".

Cargo - Liesa Van der Aa
De Wereldvrede  16 / 2 / 2018

La compositora Liesa Van der Aa es uno de los nombres más interesantes de la escena musical belga. Desde su debut con el álbum Troops (2012, Volvox Music) sentó las bases de un estilo personal que introducía instrumentos barrocos entre sonidos de rock, estilo que se desarrolló en el recomendable triple disco Woth (2014, Volvox Music), una historia basada en una ceremonia del antiguo Egipto presentada en 3 capítulos-discos: uno de música electrónica, otro de estilo barroco y un tercero más cercano al pop. Para la película Cargo (Gilles Coulier, 2017), que se proyectó en el pasado Festival de San Sebastián, Liesa Van der Aa construye una oscura banda sonora en la que predomina la ambientación claustrofóbica sobre la creación melódica. En este sentido resulta perfecta para esa atmósfera opresiva que envuelve a la disfuncional familia protagonista de este drama, resultando especialmente logrado ese tono casi de ensueño que encontramos en los temas interpretados por el cuarteto de cuerda Zerkalo Quartet, como "A truckers deal". Liesa Van der Aa cuenta con la colaboración de Matthias Hillegeer en la introducción de esas sonoridades electrónicas que acompañan en ese monotonía existencial que muestra la película, y es hipnótica en composiciones oscuras y etéreas como "Poor Robert".

Le jeune Karl Marx - Alexeï Aïgui
The Orchard  23 / 2 / 2018

Otro de los nombres que nos ha sorprendido en los últimos años es Alexeï Aïgui, violinista y compositor ruso que, aunque ha trabajado en varias producciones cinematográficas, destacó especialmente el año pasado con su trabajo para el documental nominado al Oscar I am not your Negro (Raoul Peck, 2016), director con el que vuelve a colaborar en esta crónica de ficción en torno a los años de estudiante de un joven Karl Marx en su exilio europeo entre París, Londres y Bruselas. Alexeï Aïgui nos propone una banda sonora ecléctica, con un certero manejo de una amplia base orquestal que le proporciona la Russian State Symphony Cinematic Orchestra, intérprete de la misma.  Y aunque se trata de un drama con una cierta mirada introspectiva, la composición musical tiene un cierto aire de épica que otorga al protagonista ese aire de futuro personaje transcendental, a pesar de contarnos sus años de formación y primeras incursiones en la política. Pasajes como "Naissence de Laura - Lettres" son de una gran belleza y de una consistencia melódica sobresaliente, mientras que otros de estructura más elaborada, como el espléndido "Critique De La Critique Critique", con ese ostinato creciente, nos acercan a una mirada más amplia del entorno social en el que se desarrolla la historia. Sin duda, Alexeï Aïgui se nos muestra como un perfecto creador de una narrativa musical construida en torno a complejas estructuras melódicas, especialmente destacable en temas ese épico "Le manifeste", con el que se cierra la banda sonora.

Annihilation - Geoff Barrow, Ben Salisbury
Lakeshore Records  23 / 2 / 2018

Tras su interesante incursión en el género de ciencia-ficción con Ex-machina (Alex Garland, 2014), el director ha regresado al género con esta nueva película que cuenta de nuevo con la colaboración del tándem formado por Geoff Barrow y Ben Salisbury. Se trata de los dos músicos que mejor saben en la actualidad crear atmósferas oscuras e inquietantes, gracias a la utilización de instrumentaciones que en ocasiones resultan sorprendentes. De nuevo, ambos compositores crean una ambientación musical que supone de hecho una especie de continuación sonora de su trabajo para Ex machina, porque de hecho la película podría considerarse también como tal. Y esta creación atmosférica, en la que los pasajes melódicos están ausentes casi por completo, se construye en base a elementos electrónicos manejados con precisión. Recomendamos especialmente disfrutar de la edición Deluxe que incluye dos discos publicada hace unos días, en la que encontramos una visión más clara del trabajo de ambos músicos, con la incorporación de nuevos temas que completan la banda sonora. No cabe duda que el soporte de esta inteligente creación lo encontramos en ese magnífico pasaje de doce minutos titulado "The Alien", oscuro y épico al mismo tiempo, pero no se pueden perder otros espléndidos hallazgos como el breve pero intenso "Shimmer reveal", o ese ligero apunte de humanidad en forma de guitarra que encontramos en "In all of us", una de las escasas concesiones a la narrativa melódica.

Red sparrow - James Newton Howard
Sony Classical  2 / 3 / 2018

Ciertamente es una pena que la gira de conciertos que James Newton Howard iba a protagonizar el año pasado tuviera que suspenderse, en buena parte por la insuficiente venta de entradas. Porque estamos ante uno de los grandes compositores de las últimas décadas con una carrera tan prolífica que, obviamente, incorpora trabajos decepcionantes, pero al mismo tiempo nos ofrece cada temporada al menos dos grandes bandas sonoras. Es el caso de Gorrión rojo (Francis Lawrence, 2018), una irregular película de espías protagonizada por Jennifer Lawrence, que nos ofrece la mejor versión de James Newton Howard, aquí elaborando una magnífica banda sonora de corte clásico, creada casi como si se tratara de una pieza de concierto, que comienza con una espléndida "Overture" de 12 minutos, perfecta en su estructura y ejecución, que en realidad no es estrictamente una obertura, sino que acompaña a la protagonista en vida cotidiana y sus ensayos como bailarina. Esta cobertura vital de la espía permite a James Newton Howard elaborar los pasajes más clásicos, mirándose en la excelencia melódica de compositores rusos como Prokofiev o Tchaikovsky, como en el excelso tema "Didn't I do well?", previo al magnifico "End Title". Precisamente, la excelencia en la ejecución está marcada también por la presencia del director de orquesta Esa-Pekka Salonen, dirigió tanto la "Overture" como este "End Title", otorgando si cabe una fuerza especial a las composiciones. Al margen de esta faceta "clásica", el resto de la banda sonora no desmerece en absoluto, siendo además James Newton Howard uno de los mejores músicos que mejor maneja los resortes del género de thriller, con espléndidos ejemplos tras sí. Y en algunos pasajes tiene un cierto aire a Bernard Herrmann, como en "Can I trust you?", que tiene un sonido muy "hitchcockiano", generando grandes momentos de suspense.

Max and me - Mark McKenzie
Sony Classical  9 / 3 / 2018

La productora mexicana Dos Corazones se ha especializado en producciones de animación de carácter apostólico, primero con El gran milagro (Bruce Morris, 2011) y ahora con Max and me (Bruce Morris, 2018), siempre con una visión internacional, dobladas directamente al inglés. En este último caso, el guión conecta una trama contemporánea con la historia real de San Maximiliano Kolbe, sacerdote polaco que murió en el campo de concentración de Auschwitz. Una de las facetas más destacables en ambas producciones es la banda sonora creada por el compositor norteamericano Mark McKenzie, colaborador de Danny Elfman o James Newton Howard. Podríamos considerar ambos trabajos como complementarios, y de hecho hay en algunos pasajes de la segunda claras referencias a la narrativa melódica de la primera, en especial en temas como "A mother's prayer". Pero sin duda encontramos un salto cualitativo en Max and me, no solo por la presencia del violinista Joshua Bell en algunos momentos, como en ese hermosísimo "I love you", que anteriormente encontramos desarrollado en forma orquestal y coral en el doloroso "Auschwitz cries", con el que directamente se nos hace un nudo en el estómago cada vez que lo escuchamos. Se trata de uno de los mejores trabajos musicales de este año, que consolida a Mark McKenzie como uno de los músicos más sobresalientes del momento, aunque lamentablemente relegado a producciones poco destacables. Esa capacidad de otorgar luminosidad y esperanza en un contexto violento y trágico es sin duda uno de sus principales aciertos, representado en el también soberbio "Triumph over fear".


Mathilde - Marco Beltrami
Quartet Records  16 / 3 / 2018

Esta producción rusa suscitó cierta polémica el año pasado puesto que daba por hecho la supuesta relación amorosa entre el Zar Nicolás II y la bailarina Matilda Kshesinskaya, y describía las intrigas en el seno de la propia familia Romanov. Para la película, el compositor Marco Beltrami desgrana una sólida banda sonora cuyos resortes encontramos en los tres primeros temas: "Twilight of the Empire", que comienza con un solo de violín para explotar posteriormente en una espectacular presencia de la orquesta, otorgando suntuosidad a la historia; "Mathilde and the balloon ride", el tema dedicado a la protagonista, bello y romántico, pero también algo misterioso, que introduce precisamente escena en la que Nicolás II ve por primera vez a la bailarina en el Teatro Imperial; y "Church chase and train crash", que nos presenta la música de acción, en una de las escenas más espectaculares de la película. A pesar del romanticismo de la historia, narrada con esa magnificencia de las producciones que giran en torno al antiguo Imperio zarista, aunque con resultados irregulares, hay un cierto aire de decadencia (el asesinato de la familia del zar supuso el final de la saga Romanov), y acordes de oscuridad en temas como "Tent attack". La aportación de Marco Beltrami a esta producción rusa es elegante y espectacular, y se nos presenta especialmente inspirado en la elaboración de composiciones solemnes y melodías de gran belleza. 

Isle of dogs - Alexandre Desplat
ABKCO  23 / 3 / 2018

Recién ganado su segundo Oscar por La forma del agua (Guillermo del Toro, 2017), el compositor francés nos presenta su nuevo trabajo para el director Wes Anderson, con el que viene formando un interesante tándem en los últimos años. Ciertamente, el universo de Anderson parece ser entendido a la perfección por Desplat, y aquél le proporciona a éste una singularidad temática que le permite abordar composiciones de gran inspiración. En este caso, la película stop-motion de Wes Anderson tiene la textura de la animación japonesa, y de hecho su protagonista es un estudiante japonés que acaba en una isla extraña adonde los perros han sido exiliados. Esta propuesta permite a Alexandre Desplat acercarse a las sonoridades orientales, apoyando sus composiciones principalmente en las percusiones, con especial mención a las breves pero contundentes aportaciones de Kaoru Watanabe, instrumentista japonés afincado en Nueva York y especializado en el tambor japonés Taiko. Pero, aunque Alexandre Desplat aborda sonoridades poco habituales, la estructura y el concepto de la banda sonora sigue las pautas marcadas por sus otras colaboraciones con Wes Anderson, subrayando de forma casi constante las imágenes de la película. El director aprovecha también para rendir homenaje a destacados realizadores japoneses, especialmente Akira Kurosawa, y de hecho se incluyen dos fragmentos de películas suyas, como El ángel ebrio (Akira Kurosawa, 1948) y Los siete samurais (Akira Kurosawa, 1951). Para la segunda, el compositor Fumio Hayasaka eliminar prácticamente toda la sección de cuerdas, excepto el cello y la guitarra eléctrica, y de esa textura musical encontramos también influencias en el trabajo de Alexandre Desplat, especialmente en temas como "Second crash-landing + Bath house + Beach attack".

Paul, Apostle of Christ - Jan A.P. Kaczmarek
Sony Classical  23 /3 / 2018

El compositor polaco vuelve a mostrar esa elegancia característica en la creación de una buena base melódica sobre la que construye un sólido trabajo musical. Desde el principio de la banda sonora se establece ese tono de sosiego que caracterizará al resto de las composiciones, marcado por un hermoso tema principal en el que establece un arrebatador diálogo entre el piano y el violonchelo para introducirnos la figura del protagonista, el apóstol Pablo. La película se centra en los últimos días de la vida del apóstol, y especialmente en sus conversaciones con Lucas, y por lo tanto se trata de un acercamiento intimista que permite a Jan A.P. Kaczmarek desarrollar los elementos que mejor domina, no sin ello adentrarse en sonoridades más dramáticas o étnicas, especialmente con el uso del címbalo húngaro y de percusiones en temas como "Nero's Rome". Pero lo que permite a la banda sonora encontrar un tono particular es ese aire reflexivo que encontramos en las composiciones dedicadas al apóstol, y funciona de forma especialmente acertada en esa dicotomía entre luz y oscuridad que se establece en algunos momentos. Especialmente en la última parte de la banda sonora, en temas como "Mauritius sacrifices for the Gods", en el que sobrevuela un coro celestial ("Agnus Dei"), que aporta luminosidad a las sombras, o en los siguientes, "Luke heals Celia" y "Exodus", que establecen definitivamente la hermosa base melódica en la que se mueve todo el trabajo. 


Croc-blanc, Bruno Coulais
Quartet Records,  27 / 3 / 2018

Bruno Coulais es un compositor siempre refinado que se maneja con soltura cualquier género, pero que viene dedicando buena parte de su filmografía a documentales en torno al mundo de la naturaleza. No sabemos si se trata de un deseo personal o un simple hecho circunstancial, pero casi cada producción documental dedicada a los animales en Francia acaba teniendo el sello musical de este compositor. También el género de animación es habitualmente visitado por el músico parisino. Y ambos elementos se unen en esta nueva adaptación de la novela White fang (Jack London, 1906), que ya tuviera una exitosa versión en imagen real en Colmillo blanco (Randal Kleiser, 1991), protagonizada por Ethan Hawke. La particularidad de esta adaptación es que cuenta la historia desde el punto del perro-lobo, en vez del protagonista humano. Desde el comienzo, Bruno Coulais nos sitúa en ese escenario de la búsqueda de oro a principios del siglo XX, utilizando elementos de música folk, con un hermoso tema principal ("Castor-Gris") que hace referencia también al sentido de la amistad. La banda sonora tiene esa elegancia característica de las composiciones de Coulais, con un excelente manejo de la orquestación, y un sonido francamente cuidado gracias a la utilización de una gran orquesta, la Filarmónica de Luxemburgo, que da grandeza a la historia. Destacan especialmente los temas que contienen elementos folk, con la flauta y el violín como instrumentos solistas, que en ocasiones logran una perfecta cohesión con otros instrumentos como la guitarra en "La bote majestueuse". Estamos ante uno de esos trabajos especialmente inspirados del compositor.


Pilgrimage, Stephen McKeon
Quartet Records,  30 / 3 / 2018

Ambientada en el siglo XIII, la historia de esta película se centra en un grupo de monjes que deben custodiar una reliquia hasta Roma por los peligrosos caminos de la Irlanda medieval. Esta temática religiosa e histórica está presente en la banda sonora compuesta por Stephen McKeon, quien nos presenta un sólido trabajo que se sostiene principalmente en los coros de aire monacal que sobrevuela buena parte de las escenas. Es un trabajo que potencia, y encuentra su principales virtudes, en un cierto tono misterioso y de desasosiego, que afianza esa ambientación sucia y tensa que propone el director. Es especialmente lograda la utilización de las voces corales en temas casi exclusivamente vocales, como "The clearing/In Timore Dei", y también el uso de una voz femenina (para una historia exclusivamente protagonizada por hombres), que supone el único aliento de esperanza. A pesar de que la película contiene algunas escenas de acción, el compositor mantiene en toda la banda sonora una tonalidad parecida, haciendo uso para estos momentos de las percusiones y los instrumentos de viento, usados inteligentemente en las dos partes de "Ua Mórdha attack". Solo en esa cruenta lucha sacrificial que vemos en la última parte de la película, Stephen McKeon acopla los principales elementos para construir un largo tema, "Battle on the beach", que contiene todas las grandes virtudes de esta banda sonora.


I kill giants, Laurent Perez Del Mar
Varèse Sarabande,  30 / 03 / 2018

Esta producción de género fantástico producida por Chris Columbus no ha tenido una buena recepción en taquilla, a pesar de sus críticas generalmente positivas. Quizás su carácter algo más adulto de lo habitual en historias juveniles ha podido jugar en su contra. Y este planteamiento también está presente en su banda sonora, firmada por el francés Laurent Pérez Del Mar, el autor de aquel excelente trabajo para la también película de animación La tortuga roja (Michael Dudok De Witt, 2016). La protagonista es una joven que escapa de la realidad viviendo en un mundo de fantasía, llena de magia y gigantes, pero en realidad se trata de una historia intimista, y ahí juega un papel importante el concepto musical. Apoyado en un hermoso tema dedicado a la protagonista, "Barbara", que escuchamos en diversas variaciones a lo largo de la banda sonora, Laurent Perez Del Mar desarrolla una narración musical que bucea principalmente en la mente de la protagonista, no sin dejar a un lado esos otros momentos de oscuridad que acompañan a los gigantes, en temas como "Giants". Pero la banda sonora funciona especialmente en aquellos pasajes más melódicos, con hermosísimas composiciones como "Under the water", con esa voz solista femenina que nos recuerda a la banda sonora de La tortuga roja, o "Another giant is coming", que comienza con cierto tono trágico para desembocar en un sonido más épico. Quizás podemos decir que la banda sonora de I kill giants (Andres Walter, 2018) flaquea en la utilización de una orquesta apoyada en elementos electrónicos (quizás por factores presupuestarios), pero en general estamos ante otro inspirado trabajo de un compositor siempre interesante. 


Ready Player One, Alan Silvestri
WaterTower Music,  30 / 3 / 2018

En los últimos años, la imposibilidad de cuadrar las agendas de John Williams y Steven Spielberg han dado a colaboraciones insólitas en el cine del director, como el trabajo de Thomas Newman para El puente de los espías (Steven Spielberg, 2015) o, ahora, la colaboración con Alan Silvestri. En este caso, quizás incluso mejor opción para una película que, como la novela, referencia el cine de los ochenta, cuyo sonido está estrechamente ligado a la música de este veterano compositor. Siendo, precisamente, Regreso al futuro (Robert Zemeckis, 1985), una de las películas más presentes en la historia, encontramos también autoreferencias del propio Alan Silvestri en temas como "Real world consequences". Estamos ante una de esas bandas sonoras que tienen el sello inconfundible de su autor, pero aquí mucho más enérgico e inspirado que en otros trabajos recientes. Composiciones corales como "The Oasis" o espléndidos temas de acción como "Looking for a truck" nos presentan a un Alan Silvestri que este año parece estar en estado de gracia, incluso haciendo un uso certero de los elementos electrónicos, no demasiado presentes en sus bandas sonoras, como al comienzo de "Sorrento makes an offer". En general, este último trabajo de Silvestri se disfruta especialmente por aquellos que hemos vivido una época singular en el cine fantástico, y la libertad que ha tenido el compositor para desempolvar algunos de sus sonidos más característicos le ha permitido elaborar una banda sonora que, lejos de navegar por lugares comunes, toma caminos ya conocidos para recuperar con estilo y talento el mejor sonido sinfónico del cine. 




El guardián de la reliquia (Pilgrimage) se estrenó el 6 de marzo en Movistar +
Isla de perros se estrena el 20 de abril
Un océano entre nosotros (The mercy) se estrena el 7 de septiembre