Que la producción de series ha aumentado en calidad y cantidad es indudable. La entrada en escena de nuevos productores en forma de televisiones de pago (Netflix) y portales de internet (Amazon) aporta una cantidad de producciones anuales que es difícil seguir en su complejidad. Más si queremos tener en cuenta también a otros países al margen de los Estados Unidos. Por eso hemos hecho una amplia selección de series que nos han parecido especialmente interesantes, entre las que se han estrenado en su país de origen durante 2015 (algunas están inéditas en España), aunque sin duda habrá títulos que algunos echarán en falta. Por eso os animamos a aportar vuestras propias listas en los comentarios.
The Americans (Temporada 3)
Joseph Weisberg para FX/Fox
Estamos ante una de esas series que sin llegar a tener grandes índices de audiencia, sí conserva cada temporada fieles seguidores que la mantienen en antena. Esta trama centrada en una pareja de espías rusos que vive en Estados Unidos en plena Guerra Fría contiene momentos de auténtico alarde narrativo, y sigue manteniendo en su tercera temporada el suspense y la madurez de una historia que se desarrolla de forma pausada, pero siempre con deslumbramientos excepcionales. Evitando spoilers, la ambivalencia que mantienen los protagonistas entre su vida profesional y su vida familiar (una oculta a la otra), ha alcanzado cotas de gran interés en 2015, y mantiene las expectativas de lo que ocurrirá el próximo año. Una cuidadísima puesta en escena y la selección de un buen plantel de directores (incluido este año uno de los actores de la serie, Noah Emmerich) aportan las dosis de calidad necesarias.
Mad men (Temporada 7 y Final)
Matthew Weisner para AMC
Este año se ha caracterizado por algunas despedidas notables con resultados también notables. Tras 7 temporadas, otra de las grandes creaciones de Matthew Weisner (que parecía haber alcanzado la cima con Los Soprano), Don Draper nos decía adiós. Aunque esta última no ha sido la mejor, lo cierto es que a lo largo de cada episodio había un aire a despedida que resultaba cautivador y tenía también un cierto aire de melancolía. Al mismo tiempo, el inteligente arco argumental creado por Matthew Weisner hace coincidir la despedida de los personajes con la evolución de una época que se representa bien en el episodio "Waterloo", mid-season en el que la llegada a la luna sobrevuela toda la historia. En las historias de Matthew Weisner nada es casualidad, y ese guiño final a uno de los anuncios más influyentes de todos los tiempos resulta divertido y certero para el personaje de Don Draper.
Justified (Temporada 6 y Final)
Graham Yost para FX
Otra de las series que han concluido este año ha sido esta adaptación de las historias cortas del escritor Elmore Leonard quien también participó en la serie hasta su muerte en 2013. Justified es otra de esas series que se han venido desarrollando sin grandes alardes, pero siempre con la acertada revisión de un western moderno (ese Raylan Givens sin despojarse de su anacrónico sombrero de vaquero), y ha logrado a lo largo de sus seis temporadas concentrar una serie de buenos personajes en tramas de investigación que huyen de los lugares comunes. Aunque seguimos prefiriendo esa magnífica segunda temporada que concentraba grandes interpretaciones de Jeremy Davies y Margo Martindale (ambos ganaron el Premio Emmy), lo cierto es que esta última temporada cierra con honores una serie de altura que animamos a redescubrir.
Bryan Fuller para AXN/NBC
Continuamente en la cuerda floja (se habló de su cancelación incluso después de la primera temporada), Hannibal ha ido forjando un entramado narrativo que conecta directamente las primeras novelas de la serie con las adaptaciones cinematográficas. En su última temporada, nos acerca a "El dragón rojo", inicio del personaje en la literatura creada por Thomas Harris, que se nos presenta casi a mitad de los capítulos, tras un largo prólogo que parecía encaminarnos por otros derroteros. Pero Bryan Fuller ha conseguido crear una de las series más compulsivas y simbólicas que se han visto en televisión, con tantas lecturas y tan hipnótica que merecería más de una visión completa. Tan elaborada es la interiorización de la psique de los personajes (esos Will Graham y Hannibal Lecter indisociables), que no es apta para quienes buscan solo acción en este tipo de series. Oscura y magnética, el final deja algún resquicio de esperanza.
Sense8 (Temporada 1)
Andy Wachowski, Lana Wachowski y J. Michael Straczynski para Netflix
La primera incursión de los hermanos Wachowski en la televisión despertó algunas dudas al principio, pero podemos decir plenamente que, en esa línea de "internacionalización" de su cine iniciada con El atlas de las nubes, la serie consigue acoplar una trama de ciencia-ficción con la reflexión sobre las relaciones humanas más allá de la conexión local, entre personajes de países diferentes y distantes. La serie se beneficia de un buen plantel de actores internacionales, entre los que destaca el español Miguel Ángel Silvestre en un papel difícil que está a punto de caer en el ridículo en ocasiones pero que consigue solventar con astucia y buen hacer. Renovada para una segunda temporada que aún no tiene fecha de estreno, Sense8 es uno de los títulos más interesantes entre los que han surgido este año.
Juego de tronos (Temporada 5)
David Benioff y D.B. Weiss para HBO
Controvertida en ocasiones por la densidad de sus tramas y la complejidad de sus historias entrelazadas, la quinta temporada de esta serie convertida en un auténtico fenómeno de masas nos ofrecía la particularidad de poder ver los escenarios rodados en ciudades españolas como Sevilla, aunque la trama de Dorne resulta de lo más flojo de toda la serie (poco futuro para las localizaciones en Sevilla, mucho nos tememos). La quinta temporada es la primera que traza un alejamiento claro de las novelas originales, y eso le da a los guiones un morbo especial, añadido al que se produce después de leer algunos furibundos ataques de los más acérrimos seguidores de la serie literaria. En todo caso, Juego de tronos ya ha marcado una personalidad propia, y consigue en esta temporada uno de sus mejores episodios de toda la serie, el tan comentado "Hardhome" y su batalla final.
House of cards (Temporada 3)
Beau Willimon para Netflix
Sin duda una de las series más crueles y sin concesiones sobre los entresijos de la política. El asalto al poder de Francis Underwood es uno de los más retorcidos que hemos visto en televisión, y especialmente en las dos primeras temporadas contenía momentos de auténtica delicia para el espectador. Quizás en la última temporada los juegos maquiavélicos del protagonista ya no resultan tan sorprendentes, pero no por ello dejan de contener auténticas dosis de malicia. Underwood es uno de esos personajes bombón para cualquier actor, y Kevin Spacey encuentra la horma de su zapato con este retorcido hijo de puta que es, junto a su querida esposa, capaz de pasar por encima de cualquiera (CUALQUIERA) para lograr su objetivo. El final, un cliffhanger de aúpa, nos convoca a una cuarta temporada que puede ser lo mejorcito de 2016.
Entre caníbales (Temporada 1)
Juan José Campanella para Telefé
También en torno a la política se desarrolla la trama de thriller de esta serie argentina estrenada el pasado verano, y que era la gran apuesta de Juan José Campanella para la parrilla diaria de Telefé. Ambos ya habían conseguido un notable éxito con la comedia romántica El hombre de tu vida, serie de gran repercusión en su país. Entre caníbales sigue la trama de una violación ocurrida hace veinte años en la que pueden estar implicados algunos políticos. Con interpretaciones irregulares (excelentes Joaquín Furriel y Eduardo Blanco, más flojos Natalia Oreiro y Benjamín Vicuña), la serie se desarrolla a través de tramas interesantes y diálogos de afilada punta. Pero las audiencias no se mantuvieron en los niveles deseados y la producción se canceló precipitadamente, llegando a los 60 capítulos. Un descubrimiento destacable.
Show me a hero (Miniserie)
David Simon para HBO
Dos nombres de primera se unieron para esta miniserie producida por HBO. David Simon, creador de auténticos hitos en la televisión moderna como The wire y Treme, y el director Paul Haggis, responsable de certeras revisiones de la condición humana como Crash, Million dollar baby o Cartas desde Iowa. Así las cosas, nada tiene de extrañar que estemos ante la mejor producción televisiva de 2015, una disquisición sobre el auge y caída de un joven político que llega a la alcaldía de la ciudad de Yonkers demasiado pronto. El tono y trama de la serie nos trae a la memoria la disección del mundo de la política que también recorría The wire, y por eso nos entusiasma esta nueva incursión de David Simon en los barrios degradados de una pequeña ciudad del estado de Nueva York. Como de costumbre, los trabajos interpretativos (especialmente Oscar Isaac y James Belushi) están a la altura de la excelencia.
Show me a hero (Miniserie)
David Simon para HBO
Dos nombres de primera se unieron para esta miniserie producida por HBO. David Simon, creador de auténticos hitos en la televisión moderna como The wire y Treme, y el director Paul Haggis, responsable de certeras revisiones de la condición humana como Crash, Million dollar baby o Cartas desde Iowa. Así las cosas, nada tiene de extrañar que estemos ante la mejor producción televisiva de 2015, una disquisición sobre el auge y caída de un joven político que llega a la alcaldía de la ciudad de Yonkers demasiado pronto. El tono y trama de la serie nos trae a la memoria la disección del mundo de la política que también recorría The wire, y por eso nos entusiasma esta nueva incursión de David Simon en los barrios degradados de una pequeña ciudad del estado de Nueva York. Como de costumbre, los trabajos interpretativos (especialmente Oscar Isaac y James Belushi) están a la altura de la excelencia.
Mr. Robot (Temporada 1)
Sam Esmail para USA Network
Uno de los estrenos más sorprendentes de esta temporada. La serie partía con el sambenito de ocupar la franja veraniega, siempre con producciones más flojas, y sin embargo ha acabado siendo una de las grandes sleepers del año. La historia gira en torno a un desubicado hacker que tiene la oportunidad de poner sus conocimientos en manos de un plan para cambiar el mundo de las comunicaciones en manos de grandes corporaciones. Aunque la trama se acaba diluyendo al final en propuestas de menor interés, los primeros episodios nos presentan unos personajes apasionantes, y una historia que engancha desde el principio, convirtiéndola en una serie que ya es de culto, por supuesto convenientemente renovada para una segunda temporada.
Masters of sex (Temporada 3)
Michelle Ashford para Showtime
Una de esas producciones que pasan casi desapercibidas pero que terminan apareciendo siempre en las listas de lo mejor de cada año. La dificultad que encontraba Masters of sex era saber desarrollar una trama que parecía agotada en su segunda temporada, tanto en la relación de los dos personajes principales como en la historia de este doctor que revolucionará los estudios sobre el comportamiento sexual de hombres y mujeres. La solución ha sido inteligente, y en esta nueva temporada la serie da un giro de tuerca para enfrentar a sus personajes a nuevos retos, lo cual garantiza su continuidad. Ya no se centra tanto en el objeto de estudio como en el desarrollo de un éxito arrollador. Y nos presenta uno de los episodios más interesantes, "Party of four", otro hallazgo que se sostiene sobre los diálogos y las interpretaciones.
Jordskott (Temporada 1)
Henrik Björn para SVT
Entre las producciones escandinavas de este año destacamos dos series que demuestran el buen momento de la televisión a nivel internacional. Esta que nos ocupa no es lo que parece, aunque comienza como una historia más de desaparición de un niño. Pero ese impactante final del capítulo piloto nos deja claro que los derroteros van a ser muy diferentes, tanto que uno no puede esperar a ver la continuación. En el interior de la idiosincrasia escandinava existen numerosas historias fantásticas que son las que han creado personajes como Santa Claus, y de ahí bebe buena parte de esta producción que es capaz de mantenernos expectantes durante sus 10 episodios. Conforme se va desarrollando la historia nos damos cuenta de que estamos ante un cuento más que ante un thriller. Y entonces es cuando ya nos tiene atrapados y sin opción de desengancharse.
Kampen om tungtvannet (Miniserie)
Petter S. Rosenlund para NRK1
Desde Noruega nos ha llegado una de las producciones más importantes de la televisión europea. Esta miniserie, también conocida como The heavy water war, se estrenó el 4 de enero de 2015 y sus dos primeros episodios lograron captar la atención de casi un millón trescientos mil espectadores (1 de cada 5 noruegos). Un récord impresionante para el comienzo de una serie. Las expectativas eran importantes: estamos ante una superproducción de 75 millones de euros centrada en los esfuerzos de los aliados por impedir que los nazis crearan una bomba atómica. A la altura de otras grandes miniseries sobre la 2ª Guerra Mundial como The Pacific o Hermanos de sangre, esta La batalla del agua pesada es un excelente drama bélico que tiene todos los ingredientes para engancharnos a lo largo de sus seis episodios.
The man in the high castle (Temporada 1)
Frank Spotnitz para Amazon
Otra serie centrada en la Guerra Mundial, en este caso con un imaginario resultado a favor de los alemanes y los japoneses es esta producción de Ridley Scott para Amazon. Basada en la novela de Philip K. Dick, la historia nos sitúa en unos Estados Unidos dividido en dos zonas ocupadas por alemanes y japoneses, y una zona neutral, donde predominantemente se elaboran planes para luchar contra la ocupación. Como es su costumbre, Amazon lanzó el capítulo piloto en el mes de enero, siendo el más visto de su lista de pilotos en producción, estrenándose los otros 9 en noviembre. Con una trama que se desenvuelve según los cánones habituales de las historias de resistencia, el planteamiento principal aporta un punto de vista distinto, y eso la hace más atractiva si cabe. Buena ambientación e interpretaciones correctas aportan los ingredientes precisos para una serie que ya ha firmado su segunda temporada.
Better call Saul (Temporada 1)
Vince Gilligan para AMC
Tras el final de Breaking bad, mucho se esperaba de este spin-off centrado en las vivencias del abogado Saul Goodman. Y las expectativas se cumplieron con creces. La inteligente propuesta de Vine Gilligan ha sido la de separarse del tono esperado, elaborando una historia mucho más melancólica en torno al personaje principal, magníficamente encarnado por Bob Odenkirk. Y aunque a lo largo de la serie encontramos guiños y personajes relacionados con Breaking bad (como el hierático Mike), la historia consigue desembarazarse de la narrativa referencial y logra una personalidad propia. Tanto que llega un momento que consigue hacernos olvidar que se trata de un spin-off. Sin duda esta serie nos traerá momentos tan apasionantes como su predecesora en próximas temporadas.
Jordskott (Temporada 1)
Henrik Björn para SVT
Entre las producciones escandinavas de este año destacamos dos series que demuestran el buen momento de la televisión a nivel internacional. Esta que nos ocupa no es lo que parece, aunque comienza como una historia más de desaparición de un niño. Pero ese impactante final del capítulo piloto nos deja claro que los derroteros van a ser muy diferentes, tanto que uno no puede esperar a ver la continuación. En el interior de la idiosincrasia escandinava existen numerosas historias fantásticas que son las que han creado personajes como Santa Claus, y de ahí bebe buena parte de esta producción que es capaz de mantenernos expectantes durante sus 10 episodios. Conforme se va desarrollando la historia nos damos cuenta de que estamos ante un cuento más que ante un thriller. Y entonces es cuando ya nos tiene atrapados y sin opción de desengancharse.
Kampen om tungtvannet (Miniserie)
Petter S. Rosenlund para NRK1
Desde Noruega nos ha llegado una de las producciones más importantes de la televisión europea. Esta miniserie, también conocida como The heavy water war, se estrenó el 4 de enero de 2015 y sus dos primeros episodios lograron captar la atención de casi un millón trescientos mil espectadores (1 de cada 5 noruegos). Un récord impresionante para el comienzo de una serie. Las expectativas eran importantes: estamos ante una superproducción de 75 millones de euros centrada en los esfuerzos de los aliados por impedir que los nazis crearan una bomba atómica. A la altura de otras grandes miniseries sobre la 2ª Guerra Mundial como The Pacific o Hermanos de sangre, esta La batalla del agua pesada es un excelente drama bélico que tiene todos los ingredientes para engancharnos a lo largo de sus seis episodios.
The man in the high castle (Temporada 1)
Frank Spotnitz para Amazon
Otra serie centrada en la Guerra Mundial, en este caso con un imaginario resultado a favor de los alemanes y los japoneses es esta producción de Ridley Scott para Amazon. Basada en la novela de Philip K. Dick, la historia nos sitúa en unos Estados Unidos dividido en dos zonas ocupadas por alemanes y japoneses, y una zona neutral, donde predominantemente se elaboran planes para luchar contra la ocupación. Como es su costumbre, Amazon lanzó el capítulo piloto en el mes de enero, siendo el más visto de su lista de pilotos en producción, estrenándose los otros 9 en noviembre. Con una trama que se desenvuelve según los cánones habituales de las historias de resistencia, el planteamiento principal aporta un punto de vista distinto, y eso la hace más atractiva si cabe. Buena ambientación e interpretaciones correctas aportan los ingredientes precisos para una serie que ya ha firmado su segunda temporada.
Better call Saul (Temporada 1)
Vince Gilligan para AMC
Tras el final de Breaking bad, mucho se esperaba de este spin-off centrado en las vivencias del abogado Saul Goodman. Y las expectativas se cumplieron con creces. La inteligente propuesta de Vine Gilligan ha sido la de separarse del tono esperado, elaborando una historia mucho más melancólica en torno al personaje principal, magníficamente encarnado por Bob Odenkirk. Y aunque a lo largo de la serie encontramos guiños y personajes relacionados con Breaking bad (como el hierático Mike), la historia consigue desembarazarse de la narrativa referencial y logra una personalidad propia. Tanto que llega un momento que consigue hacernos olvidar que se trata de un spin-off. Sin duda esta serie nos traerá momentos tan apasionantes como su predecesora en próximas temporadas.