10 abril, 2024

Las mejores bandas sonoras de 2024: Enero-Marzo

La Asociación Internacional de Críticos de Música de Cine (IFMCA) presentó el pasado mes de febrero su lista de ganadores en los Premios IFMCA 2023. El reconocimiento a la Banda Sonora del Año fue para Indiana Jones y el dial del destino (James Mangold, 2023), compuesta por John Williams (1932, Nueva York), que James Southall, miembro de la asociación, considera que es "un regreso nostálgico a esos grandes tiempos del pasado". Esta es la quinta edición en la que John Williams consigue el premio a la Mejor Banda Sonora del Año. Por su parte, Christopher Young (1958, Nueva Jersey) fue nombrado Compositor del Año pos su trabajo para la película La partitura (Erlingur Óttar Thoroddsen, 2023), que también ha logrado los premios a Mejor Composición del Año y Mejor Banda Sonora de Terror. Asimismo, IFMCA también ha otorgado el Premio Especial Kyle Renick a Christopher Young por su nueva banda sonora para la clásica película de terror expresionista Nosferatu (F.W. Murnau, 1922). El premio recibe su nombre en honor a Kyle Renick, el periodista de música cinematográfica y productor de teatro de Nueva York que fue miembro de la IFMCA hasta su muerte en 2019. Young recibió el encargo de la Europäische FilmPhilharmonie para escribir una nueva partitura para conmemorar el centenario de la película, que se estrenó mundialmente en febrero de 2023 en la Tonhalle de Zúrich, Suiza, dirigida por Frank Strobel. La banda sonora no se ha publicado hasta la fecha.

Por su parte, el músico Paweł Lucewicz (1985, Polonia) ha sido nombrado Compositor Revelación del Año tras ser ampliamente aclamado por su banda sonora para El curandero (Michal Gazda, 2023), una nueva versión de la película The quack (Jerzy Hoffman, 1982), que en España pasó algo desapercibida. Otros premios concedidos este año han sido para Ludwig Göransson (1984, Suecia) por Oppenheimer (Christopher Nolan, 2023) como Mejor Banda Sonora Dramática; Laura Karpman (1959, Los Angeles) por American Fiction (Cord Jefferson, 2023), como Mejor Banda Sonora de Comedia; Naoki Satō (1990, Japón) por la épica japonesa Godzilla: Minus One (Takashi Yamazaki, 2023), como Mejor Banda Sonora de Fantasía/Ciencia-ficción; Joe Hisaishi (1950, Japón) por la película El chico y la garza (Hayao Miyazaki, 2023) como Mejor Banda Sonora de Animación;, George Fenton (1949, Reino Unido) por el documental de la BBC Wild Isles (Prime Video, 2023), como Mejor Banda Sonora Documental; James Newton Howard (1951, Los Angeles) por la miniserie La luz que no puedes ver (Netflix, 2023), como Mejor Banda Sonora para Televisión; y Pinar Toprak (1980, Turquía) y Neal Acree (1974, Los Angeles) por el videojuego Avatar: Frontiers of Pandora (Ubisoft, 2023), basado en las exitosas películas de ciencia ficción de James Cameron.

A continuación ofrecemos nuestro primer repaso trimestral a las bandas sonoras que se han publicado entre los meses de enero y marzo de este año, que destacamos principalmente teniendo como principal criterio su aplicación a las imágenes de las películas y series para las que han sido escritas.  

La storia - 
Battista Lena
CAM,  9/1/2024
Duración: 88mns

La ambiciosa adaptación de la novela de Elsa Morante La historia (1974, Ed. Lumen) es un conmovedor retrato de Ida Ramondo (Jasmine Trinca), una profesora de escuela que sufre la violación de un soldado nazi en la Italia de 1941 y su necesidad de sobrevivir en medio de la pobreza y el hambre provocados por la guerra, junto a su hijo Useppe (Mattia Basciani), fruto de aquel abuso sexual. La novela fue también adaptada en formato de miniserie por Luigi Comencini en 1986, pero esta versión traslada con más precisión el relato completo, en una de las series que ha logrado un mayor éxito en Italia este año. El compositor Battista Lena (1960, Italia) ha puesto música a esta adaptación, que dirige su esposa, la reconocida directora Francesca Archibugi, con la que trabaja habitualmente, estableciendo un interesante tándem creativo en películas como Domani (2001) y Gli sdraiati (2017). Su trayectoria también está ligada al cine español, habiendo sido nominado al Goya por su banda sonora para la popular El día de la bestia (Álex de la Iglesia, 1995). Coincidiendo con el estreno de la serie en RAI, se ha publicado esta emotiva banda sonora que tiene una tonalidad clásica para acompañar este retrato que se desarrolla a lo largo de varios años. Interpretada por Bulgarian National Symphony Orchestra, bajo la dirección de Konstantin Dobroykov, las primeras imágenes nos introducen en el barrio de San Lorenzo, en Roma, donde vive la protagonista, y establece el sentido de comunidad vecinal a través de composiciones desenfadadas que introducen a los personajes principales, como Remo (Valerio Mastandrea) el dueño de un pequeño bar que ayudará a Ida a lo largo de los años ("Meeting Remo"). Los primeros bombardeos obligan a los vecinos a congregarse en los refugios antibombas ("Night at the shed") donde se introducen las instrumentaciones más localistas, como el acordeón (Luciano Biondini) característico del folclore italiano. Hay otros instrumentos de viento característicos como la ocarina (Renato Vecchio), que se asigna como un sonido infantil para Useppe, el duduk o el salmoé, un predecesor del clarinete, cuya sonoridad remite a los orígenes judíos de la protagonista ("La Storia Main Theme"). La relación entre Ida y su hijo mayor Nino (Francesco Zenga), cuyo padre ha fallecido, se establece en una hermosa composición que está creada desde el punto de vista de la madre, aportando ternura pero también el sentimiento de rebeldía del joven ("Ida and Nino", "Nino joins the army")), y conecta con el tema de los hermanos Nino y Useppe, interpretado con piano solista (Gilda Buttà), pero posteriormente incorporando el sonido suave de la ocarina ("Brothers"). 

A lo largo de la banda sonora encontramos excelentes composiciones dramáticas como la que se refiere a la violación que sufre Ida en su propia casa por parte de un joven soldado alemán borracho, cuyo destino también podremos ver posteriormente ("The Gunther's look"). Introduciendo instrumentaciones como el acordeón, el tema de la violación es una larga composición que refleja las consecuencias que provoca en Ida, quien sufre ataques de epilepsia ("The rape"). También la secuencia del bombardeo de Roma, rodada con un nivel de producción y una credibilidad notables, se refleja en un intenso y dramático tema con predominio de las cuerdas e introducción del acordeón que remite al barrio de San Lorenzo, el que más sufrió los ataques de los aliados ("The bombing"). La llegada del final de la guerra se presenta como una composición luminosa para instrumentos de viento (saxo, ocarina, trompeta...) que tiene una cierta sonoridad mágica, casi de fábula ("The armistice"), conectando con el tema de los hermanos, que se desarrolla en otras composiciones ("Where is the rabbit?"), que reflejan la vida en la posguerra, cuando Ida regresa a Roma y convive con otras mujeres en un apartamento, entre ellas la prostituta Santina (Asia Argento). Pero La storia (RAI, 2024) habla sobre del trauma provocado la guerra, el que permanece incluso después del final, como la mente atormentada de Davide (Lorenzo Zurzolo), que se refugia en las drogas, incorporando el violonchelo y percusiones con una sonoridad casi fúnebre ("The torment of Davide Segre"), porque de hecho la muerte sigue presente alrededor de los protagonistas, con el piano como instrumento principal para reflejar la tragedia y el drama ("The morgue"). La liberación para Ida adopta otro sentido mucho más complejo y psicológico que el del final de la guerra, pero también es una forma de afrontar la dramática realidad ("Liberation"). En algunos pasajes como el final del episodio Antonio (T1E1), se utilizan derivaciones para instrumentos solistas del tema principal ("La Storia Main Theme - Guitar and chalumeau"), una hermosa versión para guitarra y salmoé. Battista Lena logra una sobresaliente banda sonora que acompaña con gran eficacia a este viaje emocionante que inicia la protagonista. 

Cristóbal Balenciaga - 
Alberto Iglesias
Hollywood Records,  12/1/2024
Duración: 82mns

El compositor Alberto Iglesias (1955, San Sebastián) aborda por primera vez en su carrera la composición musical para una serie, lo cual no deja de ser algo sorprendente, teniendo en cuenta su amplia trayectoria en el mundo del cine. Y de hecho en alguna entrevista ha afirmado que le ha resultado una experiencia divertida: "Aplicar las variaciones a las unidades temáticas es un ejercicio que se parece a la música clásica. Aquí no se acaba con un enunciado, sino que después tienes que reenunciarlo. Y eso es una tarea que me gusta mucho.(elDiario.es, 10/1/2024). Cristóbal Balenciaga (Disney+, 2024) es una excelente producción que transmite la compleja personalidad del modisto español a través de diferentes momentos de su trayectoria profesional y personal, y la música impulsa la historia desde diferentes perspectivas que también construyen al personaje. El compositor utiliza como uno de los instrumentos principales el arpa, que refleja la delicadeza del trabajo de costura artesanal ("El estilo") transmitido por su madre ("Martina Eizagirre"), a través de la entrevista con la que rememora los episodios más destacados de su vida en París. Alberto Iglesias afirma que uno de los momentos que más le interesaron es cuando Cristóbal Balenciaga (Alberto San Juan) se asoma entre las cortinas para escudriñar la reacción de los espectadores de su colección, manteniéndose oculto, sin querer destacar su presencia (es la imagen que se utiliza para el cartel de la serie). Esta personalidad que se resiste a convertirse en protagonista, esconde también su homsoexualidad reprimida, al mismo tiempo que una negación absoluta de la exhibición personal. El tema principal muestra estos rasgos de complejidad del personaje ("Cristóbal Balenciaga"), reflejándolos sin tratar de revelar sus secretos, a través del piano (Juan Pérez Floristán) y unas cuerdas que transmiten las luchas internas del protagonista. Los desfiles de moda son concebidos musicalmente como piezas de danza, pero conectan con la descripción más extrovertida de los diseñadores más jóvenes que surgieron como competidores del estilo tradicional de alta costura ("C'est Dior!", "Cher Givenchy"), introduciendo instrumentos de viento como la flauta, mientras Cristóbal Balenciaga trata de adaptarse a una forma más industrial de abordar sus creaciones ("Prêt a porter"), vaso comunicante con esa modernidad que choca con las formas artesanales de sus creaciones. 

Hay también cierta oscuridad en la representación del personaje, cuando mantiene abierta su Maison Balenciaga durante la ocupación nazi en París, adaptándose a la nueva clientela ("Sombreros de guerra"), en un tema misterioso con la incorporación del violín solista (Thomas Bowes) y el clarinete ("París ocupado"). Pero también hay tristeza en sus relaciones personales ("Wladzio D'Attainville"), marcadas por una sonoridad que no es romántica sino enigmática, introduciendo el dolor interiorizado del personaje a través de una emotiva aportación vocal para contratenor (Carlo Mena) que tiene ecos fúnebres ("En noir", "Otro silencio"), con la que se cierra el episodio Un rival para Balenciaga (T1E3), en una composición que se repite posteriormente con arpa y bajo ("Pídeme perdón"). La colección de vestidos negros del modisto que surgieron del dolor por la muerte de su amante son acompañados por una pieza para piano solista con tonalidad funeraria ("Silencio"). También hay un cierto toque de melancolía en los leitmotivs de personajes importantes en la carrera de Balenciaga, como la reina Fabiola, cuya elaboración del vestido de novia se muestra en una larga suite ("Fabiola, reina de Bélgica"), que tiene una estructura de pieza para ballet. Alberto Iglesias viene grabando sus bandas sonoras desde hace muchos años en Londres, concretamente en AIR Studios, fundado por George Martin en 1965, y que desde 1991 ocupa una antigua iglesia del siglo XIX situada en Lyndhurst Road, que se ha convertido en una referencia para la grabación de música cinematográfica. La banda sonora de Cristóbal Balenciaga ha utilizado el estudio principal, Lyndhurst Hall, que es el que se sitúa en lo que era la iglesia. El año pasado el compositor vasco editó dos trabajos autónomos, Asalto al castillo (2023, Quartet Records) y Phantom Songs (2023, Quartet Records), en el que colaboró de nuevo con el pianista Juan Pérez Floristán y el contratenor Carlos Mena. Pero este regreso a las bandas sonoras, y su primera incursión en el formato de series, ha dado como resultado uno de los mejores trabajos de Alberto Iglesias, una elegante composición de sonoridades aterciopeladas para adentrarse en los misterios de una personalidad compleja pero profesionalmente exuberante. 

Monsieur Spade
 - 
Carlos Rafael Rivera
Lakeshore Records,  19/1/2024
Duración: 33mns

El compositor Carlos Rafael Rivera (1973, Washington), de ascendencia cubano-guatelmateca, ha venido colaborando con Scott Frank (1960, Florida), desde sus primeros trabajos, logrando una resonancia especial gracias a la miniserie Gambito de dama (Netflix, 2020). A comienzos de este año ha publicado dos bandas sonoras destacadas, para Griselda (Netflix, 2024), con un planteamiento operístico que resalta el impulso de supervivencia y el destino trágico de la protagonista, y para el acercamiento de Scott Frank al personaje creado por Dashiell Hammett para la serie Monsieur Spade (AMC, 2024), que recupera al detective radicado en San Francisco para reinterpretarlo trasladando el personaje a Francia e inventando un posible retiro tras la muerte de su esposa. Aunque algunos acontecimientos que se desarrollan a su alrededor le obligan a involucrarse en un nuevo caso. La serie adopta el estilo del escritor, pero actualizando el perfil de los personajes, el mismo planteamiento del compositor Carlos rafael Rivera, quien elabora una aproximación al cine negro que tiene la mirada puesta en clásicos como Laura (Otto Preminger, Rouben Mamoulian, 1944) de David Raksin, pero que sobre todo toma referencias de los acercamientos más modernos como los de Jerry Goldsmith para películas como Chinatown (Roman Polanski, 1975) y L.A. Confidential (Curtis Hanson, 1997). La banda sonora se sostiene en leitmotivs que se asignan a los personajes principales, aunque la idea original era componer con una estructura monotemática que mantuviera la presencia musical a través de un tema principal predominante, en la línea de John Williams para El largo adiós (Robert Altman, 1973). Y tiene ese tipo de construcción el tema dedicado al protagonista ("Sam Spade") con la trompeta (Jesse Klirsfeld) como instrumento principal que impregna tanto el presente como el pasado del personaje ("The old mill"), donde se incorporan otras instrumentaciones como la flauta (Vanessa Fourla). Sin embargo, las características de la historia, que está poblada de numerosos personajes, impidió este enfoque de único tema principal, porque necesitaba otras composiciones específicas. Así, los temas asignados a algunos personajes femeninos incorporan la guitarra, como en el caso de la esposa de Sam Spade ("Gabrielle"), dueña de un viñedo, que subraya el paisaje de la campiña francesa, o el tema de la adolescente ("Teresa") a la que el detective ha recibido el encargo de proteger. Para Philippe Saint-André, el peligroso padre de la niña, se incorpora el tema de Sam Spade como una anticipación de revelaciones posteriores ("Philippe"), mientras que para el ex-soldado de la guerra de Argelia Jean-Pierre Deveraux se añade la voz solista de la cantante georgiana Nino Basharuli ("Jean-Pierre"), en una pieza musical que se va construyendo conforme se revela la historia del personaje en los flashbacks. 

Uno de los principales misterios de la serie tiene relación con un convento en el que se encuentra un grupo de monjas asesinadas al final del primer episodio, que irá desvelando aspectos desconocidos de los personajes. El compositor introduce voces corales de tono religioso ("Our Lady of Sorrow"), incorporando sonoridades que remiten a una relación con Argelia a través de la flauta, y un tono que oscurece la melodía principal con la introducción del violonchelo interpretado por Shea Kole (quien ha participado en bandas sonoras como Gambito de dama), para la secuencia en la que Sam Spade descubre los cuerpos de las monjas, introduciendo posteriormente un miserere ("The chapel"). La banda sonora de Monsieur Spade adopta la tonalidad de las películas de cine negro clásicas pero enfocándose desde un punto de vista más actualizado y se expande hacia la introducción de elementos y sonoridades africanas, pero principalmente apoyados en instrumentaciones occidentales. 

Tout cela je te le donnerai  - 
Erwann Kermorvant
Plaza Mayor,  6/2/2024
Duración: 62mns

La adaptación de la novela de Dolores Redondo Todo esto te daré (2016, Ed. Destino) para la televisión francesa ha conseguido buenos datos de audiencia y traslada con solvencia una historia que tiene cierta textura de telenovela pero que consigue ir más allá de la tradicional saga familiar para mostrar unos personajes heridos emocionales y marcados por la carga de un pasado que se ha convertido en el mayor secreto de la familia Castelmore. La irrupción del marido del hijo mayor, del que nadie tenía constancia, acaba haciendo tambalear la permanencia de la tradición y el legado familiar. Erwann Kermorvant (1972, Francia) es un compositor que comenzó a destacar con bandas sonoras para películas como Asuntos pendientes (Olivier Marchal, 2004) y que ha desarrollado una estable carrera tanto en cine como en televisión, a la que se ha dedicado principalmente en los últimos años. Su destacado dominio de la música sinfónica hace que sea un músico idóneo para una historia como ésta que tiene un profundo trasfondo emocional, y podemos decir que ha conseguido crear uno de los mejores temas principales para televisión de este año. "Tout cela je te le donnerai" es una composición de corte melódico apoyada en las cuerdas de la Budapest Scoring Orchestra y en el violonchelo (Lydia Shelley) como instrumento solista, que a veces recuerda a los temas principales de Brian Tyler para series como Yellowstone (SkyShowtime, 2018-2024) y 1883 (SkyShowtime, 2022), lo que tiene cierta lógica porque comparte est lucha de una familia terrateniente de preservar su legado en medio de cambios que siente como amenazas. La introducción de los instrumentos de viento de metal hace referencia al legado, identificando la herencia con el trombón ("La succession"), mientras que el peso de la tradición está marcado por el violonchelo ("Uniquement les proches"). Precisamente es éste el instrumento que toca la matriarca de la familia, la marquesa (Nicole Calfan), un personaje con un desapego absoluto de la realidad y un desprecio por sus hijos. Ella interpreta la "Mélodie Nº 2" de la ópera de Christoph W. Gluck Orfeo y Eurídice (1762), que escuchamos también en su versión orquestal ("Mélodie D'Orphée et Euridice - Version Orchestrale") cuando Manuel Ortigosa (David Kammenos), viudo del hijo mayor de la familia, que ha muerto en un accidente, registra su habitación. Los temas que hacen referencia al pasado ("Les tourmentés") están marcados por la oscuridad de los secretos y los abusos, siempre con el violonchelo transmitiendo la carga familiar, que se libera cuando son revelados. La despedida de Aymeric, muerto en un accidente de tráfico al comienzo de la serie, tiene cierta cadencia etérea, de incredulidad respecto a un fallecimiento repentino, pero con la delicadeza del piano que refleja la relación con Manuel ("Adieu Aymeric"). También hay cierta liberación cuando Manuel comienza a escribir en una composición que comienza con un arpa y un piano que son acompañados después por el violín y la orquesta ("Manuel écrit"). Hay alguna composiciones adicionales de Benjamin Guigue-Rodet ("Le bon choix", "Pris pour cible") que se apoyan principalmente en el piano y los sintetizadores, en paralelo con las composiciones que se refieren al personaje de Richard Saugier (Bruno Solo), un policía retirado que comienza una investigación personal poniendo en duda el accidente de Aymeric. Los temas de este personaje tienen una tonalidad de thriller, pero siempre está presente la sombra de la familia ("Le dernière fois"), que también ha marcado el destino de los habitantes de la zona, como el recuerdo que asimismo ha mantenido en secreto el policía. Si la adaptación es adecuadamente fiel a la novela, la música de Erwann Kermorvant aporta una profundidad adicional a los personajes, apoyada en un emocionante tema principal. 

Occupied city - 
Oliver Coates
Milan Records,  9/2/2024
Duración: 54mns

Presentada en la pasada edición del Festival de Cannes, la última película del director Steve McQueen se acerca a la ciudad de Amsterdam a través del libro Atlas of an Occupied City: Amsterdam 1940-1945 (2019), una recopilación de historias ocurridas durante la ocupación nazi, que elaboró su esposa Bianca Stigter. A lo largo de cuatro horas y media, el director filma el presente de la ciudad mientras la narradora describe relatos que tienen relación con la imagen, ya sea sobre la fachada de los edificios o en el interior de los apartamentos. De manera que se establece un constante diálogo entre la Historia y la actualidad, en una ciudad que también refleja las consecuencias de la epidemia del coronavirus. El pasado, a pesar de lo que muestran unas imágenes pobladas por jóvenes y familias despreocupadas, está permanentemente presente en una ciudad donde persisten las huellas de la ocupación. El director ha confesado no conocer la música de Oliver Coates (1982, Reino Unido), pero cuando la escuchó casualmente en unos grandes almacenes, tuvo la idea de incorporarle al proyecto, aunque sin encargarle una banda sonora que se apegara estrictamente a las imágenes. La música en Occupied city (Steve MacQueen, 2023) sirve como interludios que introducen una pausa en la narración, habitualmente llena de datos históricos, y aparece por primera vez a los 25 minutos de película, cuando se muestran unas manifestaciones en la ciudad, mientras suena un tema electrónico y etéreo ("Protests"). Cuenta Oliver Coates en las notas de prensa que Steve McQueen le pidió que compusiera una banda sonora personal: "Me dijo que hiciera música sobre mí, mi familia y algunas cuestiones metafísicas más profundas en lugar de centrarme en la música de su película. Creo que estaba buscando una vibración que pudiera crear una sinergia entre la música y la imagen sin forzar ni dirigir ninguna emoción por mi parte". La música también establece una relación entre pasado y presente a través de la combinación de instrumentos orgánicos, principalmente el violonchelo, y electrónicos, incorporando asimismo en algunos temas distorsiones de las instrumentaciones tradicionales ("Pools"). Las composiciones que están relacionadas con el pasado son generalmente piezas para violonchelo solista (Oliver Coates), que en este caso sí acompañan a la narración, cuando ésta se refiere a la sede de LO, un grupo de resistencia que ayudó a permanecer escondidos a más de 25.000 judíos ("Hiding"). En otro momento, también se introducen instrumentaciones de cuerda cuando la voz en off de Bianca Stigter hace referencia a los suicidios que se produjeron durante la ocupación: "En 1940 fueron recogidos 156 suicidios en Amsterdam. 128 de ellos eran personas judías. La mayor parte utilizaban métodos como la asfixia por gas o se ahogaban en el río Amstel" ("Suicide note"). 

Oliver Coates es un violonchelista que ha colaborado con artistas como Mica Levi, interpretando el chelo en bandas sonoras como Under the skin (Jonathan Glazer, 2013) y publicando un album compartido con la compositora titulado Remain calm (2016, Sip), del que se utilizan en esta banda sonora los temas "Pre-Barok" y "Main Barok", en una de las pocas secuencias en las que la cámara no es estática, sino que hace un recorrido nocturno por la ciudad en un travelling que parece sobrevolarla. Oliver Coates ha compuesto las bandas sonoras de películas como El extraño (Thomas M. Wright, 2022), Aftersun (Charlotte Wells, 2022) y Foe (Garth Davis, 2023), así como de la serie Mary & George (SkyShowtime, 2024). La película tiene en sus proyecciones en salas de cine una pausa de 15 minutos en la que suena la música de Oliver Coates ("Intermission"), con un tema que establece una atmósfera reflexiva que mantiene la tonalidad de la película en ausencia de las imágenes. Una variación de la composición "Pre-Barok", del álbum mencionado antes, suena cuando se describe el ataque el 7 de mayo de 1945 que llevó a cabo un grupo de soldados alemanes contra personas que celebraban en la Plaza Dam la liberación de Amsterdam ("Pigeons (Pre-Barok remade)"). Una espléndida composición para violonchelo solista establece un tono de melancolía con una cierta sonoridad barroca ("Tram"), mientras desde el interior de un tranvía las imágenes recorren la ciudad de Amsterdam. La banda sonora concluye regresando a esa resonancia etérea electrónica del comienzo ("Bar Mitzvah"). Dentro de su función como interludio en un documental que establece la permanencia del pasado en el presente de la ciudad, Occupied city es una banda sonora reflexiva, posiblemente muy personal, que consigue establecer una tonalidad volátil y constantemente reflexiva. 

Femme - 
Adam Janota Bzowski
Adam Janota Bzowski,  12/2/2024
Duración: 28mns

El compositor Adam Janota Bzowski se dio a conocer con la banda sonora de la película Saint Maud (Rose Glass, 2019) y desde entonces ha sido nominado a los British Independent Film Awards en tres años consecutivos, también por Out of darkness (Andrew Cumming, 2022) y este año por Femme (Sam H. Freeman, Ng Choon Ping, 2023), un thriller de venganza que se adentra en temas como las representaciones de la masculinidad, la violencia y la atracción sexual. Su trayectoria comenzó cuando estudió en la Universidad de Brighton una Licenciatura en Música Digital y Artes Sonoras, modalidad que aborda técnicas creativas de estudio, percepción del sonido, uso de la estación de trabajo de audio digital y arte sonoro, lo que Adam Janota define como "una especie de versión hippie de la música". Pero esta apreciación de la música como un elemento que tiene una estrecha relación con el diseño de sonido se puede decir que ha definido su estilo, dándole a conocer a compositores como Iannis Xenakis (1922, Rumanía-2001, Francia) y Steve Reich (1936, Nueva York), uno de los pioneros del minimalismo. La formación que recibió le permitió trabajar como diseñador de sonido hasta que comenzaron a surgir las oportunidades para componer música de cine, con una agenda bastante ocupada desde que debutó con la película Saint Maud, hasta llegar a uno de sus últimos trabajos, para la serie Truelove (Channel 4, 2024), que le ha permitido adentrarse en terrenos más melódicos. Hay algunos paralelismos entre la banda sonora de Femme y sus composiciones para la película de Rose Glass, en el sentido de ser un trabajo predominantemente psicológico que describe desde la música el desarrollo emocional de los personajes, y también se encuentran similitudes con la textura de las composiciones de Mica Levi para Under the skin (Jonathan Glazer, 2013). La película es una ampliación del cortometraje Femme (Sam H. Freeman, Ng Choon Ping, 2021), que estaba protagonizado por Paapa Essiedu, ahora narrando los acontecimientos previos, con una historia que comienza cuando Jules (Nathan Stewart-Jarrett), que acaba de terminar una actuación drag queen en un club, sufre un ataque homofóbico cuando se encuentra con un grupo de jóvenes violentos. Pero el guión es lo suficientemente hábil como para plantear siempre interpretaciones más complejas sobre los acontecimientos. Jules acaba tan traumatizado por el ataque que decide dejar de actuar y encerrarse en su casa, hasta que unos meses después acude a sauna gay donde se encuentra a Preston (George MacKay), uno de sus agresores, que tiene una doble vida. Hasta el encuentro de ambos en la sauna no aparece la música de Adam Janota Bzowski ("Sauna reprise"), marcando una tonalidad etérea que introduce voces abstractas, generalmente asignadas a las escenas relacionadas con el sexo. La decisión de Jules de seguir a Preston a la salida de la sauna ("Follow the pitbull") e iniciar una relación con él se convierte en la trama principal de la película, una búsqueda de venganza que al mismo tiempo aborda una necesidad de afirmación. 

La idea de Jules es la de sacar del armario a Preston grabándole en secreto mientras tienen relaciones sexuales, exponiendo su homosexualidad frente a la masculinidad que exhibe ante sus amigos. Surgen las voces etéreas cuando el protagonista busca por internet videos sexuales ("Vp3"), mientras se conecta musicalmente con su propia relación ("Date night"). Pero los encuentros furtivos entre Jules y Preston transmiten siempre una sensación de peligro que se expresa en el uso de música electrónica y percusiones ("The woods", "Glutton of punishment"), en los que Jules asume el papel de sumisión, aunque en realidad tiene un mayor control de la situación. Se trata de una banda sonora muy oscura que transmite en todo momento una sensación de desasosiego, manteniendo un grado de tensión constante cada vez que los dos personajes tienen sus citas secretas, aunque algunas de ellas tengan momentos más relajados, demostrando que Preston necesita de alguna manera encontrar una complicidad debajo de su máscara de masculinidad. A lo largo de la película se difumina la línea que separa a ambos personajes, de manera que se revelan las inseguridades y la vulnerabilidad de Preston al mismo tiempo que se muestra cierta atracción de Jules por esa relación clandestina e imprevisible. Hay solo un momento de claridad en la banda sonora, cuando éste recupera la relación con sus amigos ("Warehouse optimist"), a través de un tema luminoso que explora sonoridades más elevadas e introduce una tonalidad de cuerdas como un elemento que se adhiere al personaje principal, y que volverá a aparecer a través del violonchelo en los minutos finales ("The real deal"), en un desenlace lleno de tensión pero también profundamente triste. Adam Janota Bzowski se incorporó a la película cuando ya estaba terminada y los directores habían descartado a otros compositores, de manera que la banda sonora fue compuesta en poco más de tres semanas. Pero se trata de un trabajo que consigue de manera notable transmitir, con unas sonoridades de texturas superpuestas, los elementos que definen a unos personajes encerrados dentro de una burbuja emocional. 

Scavengers Reign - 
Nicolas Snyder
Milan Records, 16/2/2024 (Digital) / 21/6/2024 (Vinilo)
Duración: 43mns

Después de un largo proceso de producción que comenzó en 2020, esta serie de animación que amplía la historia del cortometraje Scavengers (Joseph Bennett and Charles Huettner, 2016), es una excelente muestra de ciencia-ficción para adultos que reflexiona sobre la relación del ser humano con la naturaleza, a partir del naufragio de una nave de carga cerca del planeta Vesta, un lugar extraño y poblado por una flora y fauna que es hostil y parasitaria. La supervivencia de cuatro de los tripulantes de la nave Demeter, que han aterrizado en diferentes lugares del planeta, ocupa las tres tramas paralelas sobre las que se estructura Scavengers Reign (Max, 2023), una espléndida serie estrenada en Estados Unidos en octubre, que se beneficia de un cuidado diseño visual que toma referencias de Hayao Miyazaki y de los cómics de Moebius. Para crear esta ambientación de ciencia-ficción que plantea cuestiones existenciales y se adentra en la psicología de los personajes, el compositor Nicolas Snyder (1980, Pensilvania) ha creado una banda sonora atmosférica que funciona en dos planos principales: la recreación del planeta Vesta y un entorno que despliega tanta belleza como hostilidad, y el perfil musical de los protagonistas, algunos de ellos marcados por el trauma de la responsabilidad en el accidente de la nave y envueltos en una compleja introspección psicológica. Con el uso de sintetizadores e instrumentos modificados, la banda sonora de Scavengers Reign consigue un efecto hipnótico, creando una vibración melancólica que al mismo tiempo remite a las banda sonoras de series de ciencia-ficción de los años ochenta y noventa. En el plano de la ambientación del planeta, el compositor desarrolla un tema que remite precisamente a sonoridades de esa época, con el uso de órganos y sintetizadores en una tonalidad minimalista ("Vesta"), y en la que introduce también efectos de sonido que se pueden escuchar a lo largo de la banda sonora creados por el diseñador de sonido de la serie, Axel Steichen. Pero también una hermosa canción que suena en el episodio The decision (T1E10), cuando Sam (Bob Stephenson) y Ursula (Sunit Mani) deben tomar una importante decisión, tiene un tono etéreo que recuerda a las composiciones de Angelo Badalamenti para Julee Cruise, y que aquí está interpretada por la voz dulce de Rowan Katz ("This place"). Esta cantante es una presencia permanente en la banda sonora, con protagonismo también en una composición que remite a la infancia de Azi (Wunmi Mosaku), una de las tripulantes del Demeter ("River Levi"), pero asimismo se conecta con Levi (Alia Shawkat), un robot con voz femenina que la acompaña, que está sufriendo algunas modificaciones debido a un hongo parásito. Cuando en el episodio The fall (T1E6), dirigido por el español Diego Porral, Levi tararea una melodía parecida, se refleja cómo está adquiriendo una conciencia humana. Precisamente este robot y su transformación acaparan parte de la atención de la banda sonora, con un tema dedicado a ella ("Levi"), mientras que el episodio The dream (T1E4) comienza con un sueño que refleja nuevamente los cambios que se están produciendo en el robot ("Levi's dream"), con un piano etéreo e introducción de coros. El tema principal de la serie se reinventa en un pasaje ("Levi's garden") que no aparece como tal en la banda sonora, sino que se incorpora a otro tema ("Mia Storm Pillar Suite"), que comienza refiriéndose a una de las tripulantes del Demeter, con la introducción de cuerdas digitales que reflejan la relación de Mia (Sepideh Moafi) con Azi, para posteriormente desembocar en un tema de acción con percusiones para mostrar la llegada de una tormenta al planeta. 

Hay algunos momentos especialmente logrados en la conjunción de música e imagen a lo largo de la serie. En The wall (T1E3), el personaje de Ursula asiste a un proceso de polinización que lleva a cabo una criatura que vive y muere casi en el mismo instante. Esta secuencia está reflejada musicalmente en una composición para órgano y voz solista (Zineb Fikri), que tiene una influencia reconocida por el compositor en el tema "Lacrimosa" compuesto por Zbigniew Preisner, que se incluyó en el album Requiem for my friend (1998, Preisner productions), dedicado al director Krzysztof Kieslowski, que había fallecido en 1996. Nicolas Snyder crea una composición muy bella que sirve como un homenaje al compositor polaco, pero al mismo tiempo forma una simbiosis con las imágenes particularmente conmovedora ("The receiver"). Para los personajes de Ursula y Sam, el músico utiliza una melodía breve que los identifica incorporando una sonoridad de ciencia-ficción que tiene más relación con el interior de la nave y el entorno espacial ("Sam and Ursula Suite"), pero también se les asignan temas desenfadados ("Sam plays, Sam builds") que permiten cierta apertura frente a la hostilidad del entorno que les rodea, que al mismo tiempo saben utilizar como recursos para la supervivencia. Mientras que el tema dedicado a la nave espacial, en algunos pasajes de flashback, incorpora cuerdas y sonidos sintetizados que aportan esa cualidad de género fantástico ("The Demeter suite"). El último superviviente, Kamen (Travelstead) está principalmente envuelto en la culpabilidad por el accidente de la nave, y se relaciona con Hollow, una especie de anfibio cuyas formas recuerdan a las criaturas de Hayao Miyazaki, y que tiene la capacidad de atraer psicológicamente a otros seres. El tema asignado a él ("Hollow") tiene una tonalidad menos melódica y refleja lo que ha comentado en algunas entrevistas Nicolas Snyder, respecto a la diferencia de estilo musical entre el primer episodio, The signal (T1E1) y el resto de la banda sonora. Para este comienzo, compuso una música más atonal y atmosférica, sirviendo como episodio piloto, pero la producción del resto tardó cuatro años en ponerse en marcha, de manera que los temas del comienzo son menos melódicos que el resto de la banda sonora. Para desarrollar la relación entre Hollow y Kamen, el compositor tomó como referencia la música del primer episodio y la desarrolló de una forma más melódica ("Kamen's folly"). Scavengers Reign es una serie excelente que cuenta con una banda sonora que está a su altura, atmosférica y absorbente, rodeada de un cierto tono de melancolía y tragedia. 

Una mujer italiana (Cabrini)
 - 
Gene Back
Sony Classical,  8/3/2024
Duración: 60mns

Si los resultados de las colaboraciones del director Alejandro Monteverde con la productora Angel Studios no son cinematográficamente demasiado apasionantes, hay que reconocerle un importante esfuerzo de producción para arropar las historias con una notable calidad musical, como hemos visto en la colaboración del español Javier Navarrete en Sound of freedom (Alejandro Monteverde, 2023) y ahora en esta historia clásica sobre la monja Francisca Javier Cabrini, la primera ciudadana estadounidense canonizada, patrona de los inmigrantes. De manera que Una mujer italiana (Cabrini) (Alejandro Monteverde, 2024), engrosa la filmografía religiosa del director mexicano, por mucho que siempre insista en las entrevistas en que él no quiere hacer películas doctrinales. Pero aunque se indique que no hay apenas referencias a Dios o Jesucristo, lo cierto es que la película rodea constantemente a la protagonista Cabrini (Cristiana Dell'Anna) de una luminosidad mística, a cargo del director de fotografía español Gorka Gómez Andreu, que también trabajó en Sound of freedom y en la serie Nos vemos en otra vida (Disney+, 2024). La banda sonora en este caso está a cargo del compositor coreano-estadounidense Gene Back, quien hasta el momento había puesto música a largometrajes independientes como Cowboys (Anna Kerrigan, 2020) y la comedia Shortcomings (Randall Park, 2023), pero nunca se había enfrentado a un proyecto que necesitara una aproximación más clásica y sinfónica. El músico se ha inspirado en la ópera italiana, y de hecho en la película hay una representación del coro "Va, pensiero" de Nabucco (1842) de Giuseppe Verdi, que tiene también una versión interpretada por Virginia Bocelli, hija del famoso cantante Andrea Bocelli, junto al que canta el tema "Date to be" que suena en los créditos finales pero solo se ha publicado como single. La aproximación del compositor es clásica, introduciendo una voz soprano (Suzanne Waters) en el tema del prólogo ("Senza voce"), que sitúa la acción en Nueva York en 1889. Admirador de compositores como James Horner, Ryuichi Sakamoto y Ennio Morricone, Gene Back ha contado con la Orquesta Roma Sinfonietta, con la que grabó habitualmente el maestro italiano, bajo la dirección de Andy Einhorn y el violín solista del propio Gene Back en temas que tienen una clara textura operística con coros masculinos ("The letter"), que está asignada a la visita de Cabrini al Vaticano. Hay una aproximación también épica a la llegada de la monja a Nueva York ("Welcome to America"), donde comienza a dedicarse a los huérfanos que habitan la zona de Five Points, con una clara referencia musical a Giuseppe Verdi ("Gli orfani"), mientras que la descripción del cuidado que dedican las monjas a los huérfanos tiene una textura muy inspirada en Ennio Morricone, con una composición para guitarra, voz solista y violín ("The Divine Feminine") y un tema para flauta y orquesta especialmente hermoso ("Crostati"). 

La película trata de ofrecer una descripción certera de los esfuerzos de Cabrini por lidiar contra la discriminación que sufren los emigrantes italianos en Nueva York, y unos niños que, según ella misma describe a un periodista: "Viven peor que las ratas". Y a pesar de que cuenta con actores como Giancarlo Giannini, David Morse o John Lithgow en pequeños papeles, nunca termina de construir un personaje complejo, y en realidad poco averiguamos de la protagonista. La banda sonora tiene mejor suerte porque no está específicamente ligada al perfil psicológico, sino a su entorno, de manera que la música crea los elementos que rodean al personaje y, en cierta manera, lo engrandecen. En algunos casos describe la casa de acogida que le ha sido adjudicada por los jesuitas ("Twenty cents") de una manera bucólica y esperanzadora, pero también se apoya en las cuerdas y el fagot para reflejar las continuas negaciones de préstamos por parte de los bancos ("Unsolicited"). Y utiliza una canción tradicional italiana de los años veinte dedicada a los emigrantes, "Lacrima Napulitane", que interpreta el joven actor y cantante Liam Campore. Algunas composiciones muestran el pundonor y el esfuerzo del trabajo constante ("Armor and strength"), que suena durante una pesadilla de Cabrini, siempre con un estado de salud muy frágil, mientras que su persistente dedicación se manifiesta de una manera más épica ("Empire", "Voci e visioni"). Cabrini es una banda sonora notable que se sostiene en las sonoridades clásicas, inspirándose en la ópera italiana, que en algunos aspectos funciona mejor que la propia descripción narrativa de la película. 


Democracy noir - 
Jonas Struck
Sound by Struck,  15/3/2024
Duración: 39mns 

El compositor Jonas Struck (1971, Dinamarca) consiguió el año pasado varios premios gracias a su banda sonora para el documental Apolonia, Apolonia (Lea Glob, 2022), entre ellos el premio Robert del cine danés y una nominación a los Harpa Nordic Film Music Awards 2024, representando a su país. No es extraño por tanto que entre los últimos proyectos de uno de los músicos daneses más solicitados se encuentren dos documentales, estrenados estas semanas en los festivales más destacados de Europa: Democracy noir (Connie Field, 2024) y Can't feel nothing (David Borenstein), con dos aproximaciones muy diferentes. El primero, cuyo estreno mundial se ha producido en el reciente CPH:DOX '24 en Copenhague, es una incursión de la cineasta norteamericana Connie Field, nominada al Oscar por Freedom on my mind (Connie Field, Marilyn Mulford, 1994), a la forma en que Víktor Orbán, primer ministro de Hungría, ha pasado de ser la única alternativa a la corrupción socialista y la extrema derecha de tintes nazis en 2010, a radicalizarse modificando la Constitución para crear un sistema favorable a su permanencia en el poder. Esta es la banda sonora que tiene más elementos en común con Apolonia, Apolonia, no solo porque uno de sus temas principales ("Democracy waltz") es un vals acompasado por el piano y una voz solista femenina, sino porque la intérprete es Karen Krogshøj, esposa de Jonas Struck, que también colaboraba en aquel documental. El tema tiene un tono más melancólico en su versión final ("Democracy waltz reprise"), apoyado ahora en una guitarra y con la introducción de un silbido junto a la parte vocal. También aparece como elemento de definición de Niko Antal, enfermera y activista en contra de las políticas de Víktor Orbán ("Democracy waltz-Niko"), pero que utiliza instrumentaciones más folclóricas. Para Timea Szabó, una política que se enfrenta desde la oposición, introduce instrumentos más urbanos como la guitarra eléctrica ("Timea"), pero acompañada por una sección de cuerdas. Mientras que para la periodista Babett Oroszi, la tercera de las tres protagonistas del documental, incorpora guitarras y percusiones que reflejan el ritmo continuo de sus investigaciones ("Babett"). Los temas relacionados con Víktor Orbán son más oscuros y tienen una tonalidad de thriller en los que predominan los sintetizadores, mostrando sus tácticas de control de los medios de comunicación y los cambios de la Constitución con leyes polémicas ("Media control", "Changing the law"). Para el comienzo de la película, Jonas Struck introduce una composición que hace referencia al cambio sufrido por las políticas del primer ministro ("Echo from the past"), un espléndido y rítmico tema interpretado junto a su formación Worn Out Sun, uno de los proyectos paralelos del compositor, que publicó su primer album en 2014. Las protestas contra la demolición de una parte del parque central de Budapest se subrayan con guitarras, batería y la voz solista de Karen Krogshøj ("Liget demonstration"). Aunque no están incluidas en el álbum, hay dos canciones destacadas en la película: en las escenas de la guerra de Ucrania suena el magnífico "Dostochka" del album Alambari (2020, DakhaBrakha) del proyecto musical DakhaBrakha, una formación nacida en Kiev que utiliza instrumentaciones indias, árabes, africanas y australianas. Mientras que en la manifestación de profesores y estudiantes contra la Ley de Educación que prohíbe la difusión de material educativo que haga referencia a la homosexualidad, se usa como himno "Mi vagyunk a grund!" (Somos la tierra), del popular musical húngaro A Pál utcai Fiúk (The Pal Street boys). Basado en la conocida novela juvenil de Ferenc Molnar Los muchachos de la calle Pál (1906, Ed. Bambú), cuenta la historia de una guerra entre pandillas de jóvenes en un barrio de Budapest, una zona a la que llaman grund, pero que adopta la forma de un noble juego marcado por la estrategia, el honor y la camaradería, con representaciones ininterrumpidas desde 2016. 

Immaculate - Will Bates
Lakeshore Records, 22/3/2024
Duración: 50mns

Tras su anterior colaboración con el director de Los voyeurs (Michael Mohan, 2021), el compositor Will Bates (1977, Estados Unidos) se encarga de esta historia de terror impulsada por la actriz Sydney Sweeney como productora y protagonista, que toma muchas referencias de las películas de terror de los años setenta, hasta el punto que incluye un tema de Bruno Nicolai (1926-1991, Italia) para La dama roja mata siete veces (Emilio Miraglia, 1972) durante las escenas que muestran la actividad diaria del convento, una composición que no se incluye en el álbum para evitar los derechos de reproducción. La película parte de una idea bastante tonta sobre el ADN de Jesucristo encontrado en un clavo, que se desarrolla por caminos demasiado previsibles, con una interpretación sosa de Álvaro Mortes y un trabajo de Sydney Sweeney que parece tomarse más en serio de lo que debería. Pero lo que el director es incapaz de contar con cierta credibilidad, el compositor consigue afrontar con una propuesta imaginativa que utiliza instrumentaciones variadas del folklore húngaro, y acertadas creaciones corales. El planteamiento de la banda sonora parte de una primera aproximación sobre guión cuando se necesitaba música diegética  para la llegada de la Hermana Cecilia (Sydney Sweeney) a un antiguo convento italiano, en una escena en la que otra de las novicias le enseña las dependencias ("Death is a part of everyday life here"). De manera que el músico creó una serie de composiciones previas que fueron utilizadas durante el rodaje. Esta descripción del convento utiliza instrumentaciones antiguas como la zanfoña, el salterio y la cítara húngara, para mostrar que se trata de una institución anclada en el pasado, incluso abandonada por la propia Iglesia Católica. Otra de las músicas diegéticas creadas para la película es un tema coral ("The Te Deum"), que está interpretado por el coro londinense Hi Lo Singers, dirigido por Geoff Walker, que ha participado en otras bandas sonoras como Los hermanos Sun (Netflix, 2024). El Te Deum es un himno religioso que habitualmente se interpretaba en bautismos y coronaciones de los reyes, pero al que Will Bates aporta unos arreglos más contemporáneos, de manera que consigue una mezcla singular entre un himno religioso y una canción. 

Pero la banda sonora acompaña principalmente a la protagonista, la Hermana Cecilia, a la que asigna al comienzo, cuando acaba de llegar a Italia, la cítara húngara como instrumento principal, acompañada por una voz solista (Maiah Manser) que aporta cierta inocencia ("Sister Cecilia", "Vows"), pero que poco a poco se irá contagiando de la oscuridad. Un ejemplo espléndido es una secuencia de persecución ("Father Tedeschi's chase") en la que la voz solista es apagada literalmente por el tono amenazante de las cuerdas. La monja encontrará a lo largo de su estancia acontecimientos insólitos que dejan cada vez más claro que será difícil salir de aquel lugar ("You will never leave here"), en los que las sonoridades electrónicas aportan una tonalidad inquietante, así como las voces susurradas ("Chapel"). Uno de los elementos más interesantes que están presentes en los dos primeros actos de la película es el uso de un piano de cola cuadrado de 1850 que Will Bates encontró en una de las liquidaciones de bienes que se suelen organizar en Los Angeles. Aunque algunos expertos le indicaron que el piano era irrecuperable, el sonido desafinado de sus teclas sirvió al compositor para incluirlo como un elemento principal que otorga una extraña sonoridad, especialmente asignada a la representación de las monjas del velo rojo ("Red veiled nuns"), apareciendo progresivamente como un reflejo de su naturaleza amenazadora. Una inquietud que también consigue raspando las cuerdas del piano y extrayendo sonidos desgarrados ("Benedicta"). Acompañando a la protagonista, la música gira hacia terrenos más densos a partir del segundo acto ("Miracle"), apoderándose de la banda sonora las sonoridades electrónicas y las cuerdas, que no están interpretadas por una formación orquestal, sino por la superposición de diferentes pistas grabadas con violín y viola por el violinista LJOVA (Lev Zhurbin) (1978, Rusia), afincado en Nueva York. Para los créditos finales, Will Bates realizó arreglos especiales del conocido "Ave Maria" (1825) de Franz Schubert, interpretado por Hi Lo Singers, e introduciendo instrumentos como un piano de juguete y un Ondes Martenot. 

Sound of freedom - Javier Navarrete
Sony Classical, 22/3/2024
Duración: 54mns

Convertida en un éxito inesperado el pasado verano, con una recaudación de ¢250 millones en salas de cine (aunque no está claro qué parte de la taquilla correspondía a entradas compradas por la propia productora Angel Studios a través de un sistema que ellos llamaban patrocinio), Sound of freedom (Alejandro Monteverde, 2023) denuncia el tráfico de niños con un thriller mediocre que utiliza la manipulación emocional, con canciones de Shakira, para lanzar un mensaje religioso sobre los peligros ocultos que acechan a los niños, pero reforzando un cierto adoctrinamiento apostólico que recuerda épocas pasadas: el hombre blanco como la mano de Dios que salva a los niños latinos. Dentro de este proyecto resulta curioso encontrar al compositor español Javier Navarrete (1956, Teruel), quien después del éxito de El laberinto del fauno (Guillermo del Toro, 2006), que le valió una nominación al Oscar, se trasladó a Los Angeles para iniciar una trayectoria internacional, con títulos de grandes estudios como Ira de titanes (Jonathan Liebesman, 2012) y miniseries como Hemingway y Gellhorn (HBO Max, 2012), por la que ganó el premio Emmy. Desde hace algunos años, Javier Navarrete vive entre Londres y Barcelona, colaborando mucho con el cine francés en películas como Raoul Taburin (Pierre Godeau, 2018) y Sous le vent des Marquises (Pierre Godeau, 2024) o la serie Paris Police 1905 (Cosmo, 2022-).  A pesar de que la película se estrenó en 2023, su banda sonora no ha sido publicada hasta el pasado mes de marzo, a través de Sony Music Masterworks, lo que permite acceder a un trabajo notable, muy hermoso y perfectamente estructurado, que brilla muy por encima de los resultados de la película. Uno de los aspectos más destacados es la forma en que el compositor español establece sin disimulo el carácter religioso que transmite el fondo de la historia, con un tema principal referido a la niña secuestrada que utiliza una voz solista infantil (Freddie Jemison) con una tonalidad sacra predominante ("Rocío"), y un apunte de piano que parece una llamada no respondida. Este tema es el que se desarrolla en diferentes formas a lo largo de la banda sonora, como representación de la inocencia invadida. Javier Navarrete describe esta composición como "la llamada de los niños, su forma de suplicarnos que los rescatemos de las profundidades de su miseria y oscuridad absoluta". De manera que aparece siempre en relación con ellos, apoyándose en las cuerdas y el violonchelo (Ian Burdge) cuando tiene un tono más oscuro ("Don't tattoo a child", "Slaves in the jungle"), pero sobre todo en su versión para coro infantil (Trinity Boys Choir), que el personaje de Vampiro (Bill Camp) define como "el sonido de la libertad" ("Fifty-four kids"). También se les asigna en algunos momentos el piano ("Room 204"), que aporta una tonalidad melancólica, pero que contiene un aliento de esperanza ("Tu papa ya sabe"), aunque es absorbido por las cuerdas cuando aparecen los antagonistas, personajes demasiado planos y caricaturescos. 

El protagonista de la historia es el agente Tim Ballard (Jim Caviezel), basado en un activista real que fundó una ONG llamada Operación Ferrocarril Subterráneo, cuyas actividades han sido criticadas por transmitir redadas y adjudicarse rescates que han sido puestos en duda. Al personaje se le asigna una guitarra clásica, interpretada por el español Ale Martí, que define sus investigaciones alrededor de la zona fronteriza a través de la cual llega el tráfico de niños hasta Estados Unidos ("Just give me a week"), introduciendo la guitarra eléctrica como contrapunto antagonista ("Watch the beach"). En cierto modo, se puede decir que las guitarras definen a los adultos, los secuestradores y los salvadores, subrayado por una espléndida versión con guitarra solista del tema principal ("Fields of drug"). Mientras que el espacio fronterizo se muestra con la introducción de los tambores y percusiones (Luke Notary) en un poderoso tema de acción que aporta tensión cuando Tim Ballard viaja a Cartagena ("The call") para rastrear en suelo colombiano el origen de las redes de tráfico, desarrollándose en un tema para tambores y maracas solistas cuando inicia sus investigaciones en las calles de la ciudad ("Streets"). Los temas principales se introducen en una hermosa suite para orquesta, guitarra y violonchelo, dándole a la película una textura casi épica ("Sound of freedom"). 

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Películas mencionadas:

Indiana Jones y el dial del destino y L.A. Confidential se pueden ver en Disney+.
La partitura se puede ver en Movistar+.
Nosferatu se puede ver en Classix, Cultpix, Filmin y Plex.
El curandero, The quack, Godzilla: Minus One y El extraño se pueden ver en Netflix.
Oppenheimer se puede ver en SkyShowtime. 
American fiction y Los voyeurs se pueden ver en Prime Video.
El día de la bestia se puede ver en FlixOlé, Movistar+, Netflix y Prime Video. 
Under the skin se puede ver en Filmin y Movistar+.
Aftersun se puede ver en Mubi. 
Cowboys se puede ver en FlixOlé y Prime Video. 
Apolonia, Apolonia se puede ver en Max. 
La dama roja mata siete veces se puede ver en Filmin. 


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