El Festival Docsbarcelona encara su recta final esta semana, reflexionando sobre algunas de las facetas que conforman el trabajo cinematográfico. La fotografía, la edición y la supervisión musical juegan un papel fundamental en la concepción de una película, con algunas particularidades en el caso de los documentales. Es lo que se trató en el coloquio "Más allá de la mirada de la dirección", moderado por Diego Mas Trelles, Jefe de Industria de Doscbarcelona y director de documentales como Sexo, maracas y chihuahuas (Diego Mas Trelles, 2016).
"Uno de los problemas que nos encontramos en los documentales es que normalmente cuentan con poco presupuesto", dice Núria Roldós, Vicepresidenta de la Asociación Española de Directores y Directoras de Fotografía, y directora de segunda unidad de películas como El olivo (Icíar Bollaín, 2016) o series de televisión como Merlí (TV3, 2015-2018). "En el documental siempre sueles rodar más material del habitual, porque estás constantemente pensando en el montaje. Buscas más planos, porque tienes que captar todo lo que ocurre a tu alrededor".
De hecho, en el documental el trabajo de montaje juega un papel especialmente importante, porque es en la sala de montaje donde se da estructura a la historia con el material rodado, que suele ser más amplio. Bernat Aragonès, montador y supervisor de FX, comenta que "la mirada del director se debe mostrar siempre en los planos con los que trabajamos." Como editor, ha trabajado recientemente en la película La hija de un ladrón (Belén Funes, 2019), y es un habitual colaborador de Isabel Coixet. Con ella precisamente realizó un proyecto documental curioso, el cortometraje No es tan fría Siberia (Isabel Coixet, 2016): "Isabel estaba en Siberia y comenzó a grabar con su móvil. Me dijo que me iba a enviar algunas grabaciones y que tratara de darles algún sentido. Eran planos de maletas, de aeropuertos... Mientras viajaba a otros lugares como Los Angeles o París, siguió grabando con el móvil y subiendo el material a iCloud y yo los iba ordenando. Todo se rodó de una manera muy improvisada. Esta mirada fresca te permite contar una historia de una forma diferente a como lo haces en producciones más convencionales".
La música también puede jugar un papel fundamental en un documental, pero en algunos casos puede ser excesiva. Según Víctor Coronado, supervisor musical en películas como Madre (Rodrigo Sorogoyen, 2019), "los documentales norteamericanos suelen tener mucha música desde el principio. Es un sustento que a veces subraya demasiado. Para mí, los silencios equilibran determinados sonidos. En un documental la imagen muchas veces no necesita música. Siempre tiene que estar justificado el uso de la música".
El confinamiento no ha sido necesariamente una pérdida de trabajo. En algunos casos como Víctor Coronado, se ha enfocado más en proyectos publicitarios, mientras que para Bernat Aragonès, este tiempo ha servido para replantearse la forma de trabajar de cara al futuro, incluso con mayor efectividad.
Sección Oficial Panorama
Entre los documentales más esperados de esta edición de Docsbarcelona se encuentra Advocate (Philippe Bellaiche, Rachel Leah Jones, 2019), que pasó por algunos de los festivales de documentales más prestigiosos, como Tesalónica, donde ganó los dos principales premios, CPH:DOX y el Festival de Sundance. La película se centra en la trayectoria de Lea Tsemel, una abogada y activista judía que solo defiende a acusados palestinos, y concretamente se enfoca en dos casos concretos: un adolescente acusado de intento de homicidio y una mujer que pretendía inmolarse en el centro de Tel Aviv. Estamos por tanto ante un retrato personal de una mujer que antepone su postura política a su propia condición como ciudadana, lo que para ella no resulta contradictorio. "Yo soy una ocupante. Con sus ventajas y con sus problemas".
Rodada en pantalla panorámica, lo que le da una un vigor especial al documental (este es uno de esos ejemplos de película que sería mucho más disfrutable en una pantalla de cine), los directores hacen un uso inteligente de este formato. Pocas veces hemos visto en un documental una utilización más contundente del widescreen, y eso que todos los escenarios son interiores. La pantalla panorámica también le permite a los directores introducir de una forma innovadora elementos de animación para aquellos protagonistas cuyas imágenes no pueden ser mostradas. Esta división de la pantalla es también una metáfora visual del abismo que separa a israelíes y palestinos.
Ciertamente, el documental es parcial. Su foco está puesto en la abogada Lea Tsemel y no pretende mostrar otros puntos de vista. No hay medias tintas. La protagonista es ella y su trabajo. Pero, al mismo tiempo, y especialmente en los flashbacks que muestran su trayectoria profesional desde que decidió unirse a las protestas en contra de la ocupación israelí de los territorios palestinos, cuando aún se encontraba en la Universidad, la historia particular ofrece una reflexión más general sobre cómo el sistema judicial israelí trata con desventaja a los detenidos palestinos. Su objetivo no es conseguir una absolución ("Nosotros siempre perdemos", dice Lea Tsemel), sino tratar al menos de que sus defendidos sean juzgados en igualdad de condiciones. La justicia existe siempre y cuando las dos partes, acusación y defensa, tengan los mismos derechos. De lo que se deduce que en Israel el sistema judicial no funciona.
Sección Oficial Latitud
El documental que encuentra una personalidad poderosa que reclama ser retratada ya tiene ganada una buena parte de su razón de ser. Es lo que ocurre con Advocate y también con El viaje de Monalisa (Nicole Costa, 2019), que tiene como protagonista a Iván Ojeda/Monalisa, un artista chileno afincado en Nueva York que sobrevive en medio de la prostitución, su adicción a las drogas y el mundo del travestismo. Es una mezcla quizás tópica que ha sido descrita en numerosos documentales, pero en este caso tiene como eje principal a una personalidad singular, que convierte todos estos elementos en reflexiones escritas que hablan también de la inmigración, de la soledad y del abandono.
La directora se implica directamente en la historia (ella misma es uno de los personajes secundarios) para mostrarnos la complicada vida de este personaje ambigüo y dual (fue Iván Ojeda en Chile, es Iván Monalisa en Nueva York). En este sentido, la utilización de recursos de collage que van ocupando parte de la historia funciona también como representación de ese caos vital en el que vive el protagonista. Porque El viaje de Monalisa habla de arte y de representación, pero sin "glamour". Las reflexiones escritas de Iván Monalisa describen un Nueva York que en la presentación de uno de sus libros, se define como más real que el de Manhattan (Woody Allen, 1979) o el de Taxi Driver (Martin Scorsese, 1976), porque tiene la ambivalencia de una ciudad depredadora y acogedora al mismo tiempo. Ese "two-spirits" del que habla Monalisa cuando se describe a sí mismo, esa dualidad en la que se representa como hombre y como mujer. "Yo soy mi propia conquista".
Sección What de Doc!
En esta Sección que acoge documentales con una narrativa no convencional Docsbarcelona estrena Salka, en la tierra de nadie (Xavi Herrero, 2020), que es un recorrido eminentemente visual a través de la frontera entre Mauritania y el Sahara Occidental, por la que circula el llamado Tren del Hierro, un gigantesco tren que alcanza los 2.5 kilómetros de longitud y que transporta los minerales obtenidos en la minas de la zona de Zuérate hasta el puerto de Nuadibú.
El director utiliza un personaje principal, Salka, que intenta llegar a Europa a través del puerto, convertido desde hace años en una de las principales zonas de acceso a la ruta entre África y Canarias. Esta así presente la temática migratoria, pero representada más a través del viaje que de la construcción de una narración convencional. Este documental tiene su fuerza visual en las imágenes de ese recorrido largo, solitario, monótono a través del desierto del Sáhara y de algunos de los habitantes de las ciudades en las que se detiene. Son imágenes que muestran un paisaje como de otro planeta, árido, rojizo, caluroso. Son sin duda imágenes poderosas que conforman un conjunto irregular pero a veces hipnótico.
La directora se implica directamente en la historia (ella misma es uno de los personajes secundarios) para mostrarnos la complicada vida de este personaje ambigüo y dual (fue Iván Ojeda en Chile, es Iván Monalisa en Nueva York). En este sentido, la utilización de recursos de collage que van ocupando parte de la historia funciona también como representación de ese caos vital en el que vive el protagonista. Porque El viaje de Monalisa habla de arte y de representación, pero sin "glamour". Las reflexiones escritas de Iván Monalisa describen un Nueva York que en la presentación de uno de sus libros, se define como más real que el de Manhattan (Woody Allen, 1979) o el de Taxi Driver (Martin Scorsese, 1976), porque tiene la ambivalencia de una ciudad depredadora y acogedora al mismo tiempo. Ese "two-spirits" del que habla Monalisa cuando se describe a sí mismo, esa dualidad en la que se representa como hombre y como mujer. "Yo soy mi propia conquista".
Sección What de Doc!
En esta Sección que acoge documentales con una narrativa no convencional Docsbarcelona estrena Salka, en la tierra de nadie (Xavi Herrero, 2020), que es un recorrido eminentemente visual a través de la frontera entre Mauritania y el Sahara Occidental, por la que circula el llamado Tren del Hierro, un gigantesco tren que alcanza los 2.5 kilómetros de longitud y que transporta los minerales obtenidos en la minas de la zona de Zuérate hasta el puerto de Nuadibú.
El director utiliza un personaje principal, Salka, que intenta llegar a Europa a través del puerto, convertido desde hace años en una de las principales zonas de acceso a la ruta entre África y Canarias. Esta así presente la temática migratoria, pero representada más a través del viaje que de la construcción de una narración convencional. Este documental tiene su fuerza visual en las imágenes de ese recorrido largo, solitario, monótono a través del desierto del Sáhara y de algunos de los habitantes de las ciudades en las que se detiene. Son imágenes que muestran un paisaje como de otro planeta, árido, rojizo, caluroso. Son sin duda imágenes poderosas que conforman un conjunto irregular pero a veces hipnótico.
El encuentro "Más allá de la mirada de la dirección" se puede ver en la web de Docsbarcelona.
Advocate se puede ver en Filmin hasta el 28 de mayo.
The journey of Monalisa y Salka en la tierra de nadie se pueden ver en Filmin hasta el 29 de mayo.
Estrenos Miércoles 27:
Estrenos Miércoles 27:
Overseas (Sung-a-Yoon, 2019)
Zona árida (Fernanda Pessoa, 2019)
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