31 octubre, 2022

Dustin O'Halloran en concierto: Un final, un comienzo

© Jónatan Grétarsson

El confinamiento durante la pandemia del coronavirus ha tenido un efecto de reencuentro en muchos compositores, la posibilidad de detenerse para hacer un paréntesis. Hay algunos músicos que han tenido esta especie de autorreflexión desembocando en trabajos íntimos, como comentamos en la crónica del concierto de Ludovico Einaudi, quien compuso su último álbum Underwater (2022, Decca Records) inspirado por paseos en la naturaleza durante la pandemia. Si para el compositor italiano esta publicación fue el primer álbum solo para piano en veinte años, el músico Dustin O'Halloran (1971, Phoenix) también ha regresado en cierto modo a sus orígenes mientras se encontraba confinado en su casa en Reikiavik, donde vive desde hace algunos años. Grabado durante el confinamiento en 2020, Silfur (2021, Deutsche Grammophon), revisita composiciones autónomas de cuatro de las primeras publicaciones del músico norteamericano, que comenzó su carrera con dos álbumes titulados Piano solos (2004, Splinter Records) y Piano Solos vol. 2 (2008, Cobraside Distribution) en los que demostraba su capacidad para elaborar pasajes melódicos íntimos, casi susurrados como "Opus 20", que en la versión que incluye en Silfur (2021) suena más introspectivo. Las composiciones de Dustin O'Halloran se han comparado con músicos impresionistas como Claude Debussy (1862-1918) y románticos como Franz Liszt (1811-1886), pero también conectan con la cadencia de Arvo Pärt (1935, Estonia) uno de los compositores que Dustin O'Halloran reconoce como esencialmente influyentes. En los últimos años se ha acercado a las sonoridades de músicos nórdicos como Jóhann Jóhannsson (1969-2018), con quien compartió estudio de grabación en Berlín, y Ólafur Arnalds (1986, Islandia), del que acaba de lanzar una versión del tema "Spiral" para el álbum Some kind of peace - piano reworks (2022, Universal Music), una recopilación de composiciones del músico islandés interpretadas por sus amigos. 

"Estos han sido dos años muy extraños", decía Dustin O'Halloran al comienzo de su actual gira por Europa que le acerca a su público por primera vez desde hace varios años, para transmitir las sensaciones de su primer disco para piano en una década. Silfur (2021) es también el primer álbum con la discográfica Deutsche Grammophon, con la que firmó en 2019 y para la que ha publicado una pieza de 20 minutos en formato EP bajo el título de Sundoor (2019, Deutsche Grammophon). Porque el compositor norteamericano ha estado dedicado al mundo del cine desde que participara en la banda sonora de la película María Antonieta (Sofia Coppola, 2006), en la que incluyó algunas de sus composiciones para piano. A partir de entonces, su trayectoria en el mundo del cine ha sido intensa, con trabajos más desconocidos pero muy hermosos como An American affair (William Olsson, 2009), que prácticamente es otro álbum para piano en la línea de su música autónoma para el disco Lumiere (2011, Splinter Records), algunas de cuyas composiciones se incluyeron también en la banda sonora del drama romántico Como locos (Drake Doremus, 2011). En esos años, Dustin O'Halloran formó junto a Adam Wiltzie una formación orquestal llamada A winged victory for the sullen con la que ha publicado cuatro álbumes y alguna banda sonora como Iris (Jalil Lespert, 2016). Asimismo, ha colaborado en varias películas con Volker Bertelmann (1966, Alemania), también conocido como Hauschka como Lion (Garth Davis, 2016), que les valió una nominación al Oscar, La guerra de las corrientes (Alfonso Gómez-Rejón, 2017), El arte de vivir bajo la lluvia (Simon Curtis, 2019), La vieja guardia (Gina Prince-Bythewood, 2020) y Ammonite (Francis Lee, 2020). Dustin O'Halloran ganó un premio Emmy por el tema central de la serie Transparent (Prime Video, 2014-2019) y recientemente ha trabajado en La serpiente de Essex (Apple tv+, 2021) y la miniserie de próximo estreno A spy among friends (Britbox, 2022).

Dustin O'Halloran en Kulturkirken Jakob (Oslo)
La idea de su últimos disco partió de Christin Badzura, Vicepresidente de Nuevo Repertorio de Deutsche Grammophon, que sugirió a Dustin O'Halloran revisitar composiciones previas, una práctica que por otro lado suelen hacer las discográficas con los músicos que incorporan a su firma para tener los derechos de reproducción de composiciones previas. Pero Dustin O'Halloran aprovechó la oportunidad para recuperar su música autónoma con una 
nueva perspectiva desde un espacio diferente. Los primeros álbumes fueron grabados cuando vivió en Italia y Alemania, y desde el confinamiento en Islandia, donde alterna su residencia con Los Angeles, le permitió establecer una conexión diferente, no solo por el paso del tiempo sino también por un entorno estrechamente conectado con la naturaleza a través de los vientos constantes o del espectacular paisaje. El título Silfur (que significa 'plata' en islandés) hace referencia a la llamada silfurberg (roca plateada), un tipo de cristal que solo se encuentra en Islandia. El también llamado espato islandés tiene la extraña característica de ofrecer una doble refracción, una propiedad óptica rara que sirvió a los vikingos como una especie de brújula. El tono del álbum es más melancólico, pero también más íntimo, y de hecho parte de la grabación del disco se efectuó en la Iglesia de Fríkirkjan, un hermoso edificio blanco situado en Reikiavik junto al lago Tjörnin en el centro de la ciudad, que fue el primer lugar donde Dustin O'Halloran dio un concierto en ese país, junto a Jóhann Jóhannsson y Hauschka. Esta búsqueda del recogimiento, que también transmite cierta espiritualidad, se traslada a los escenarios escogidos para la gira, que en algunos casos tiene lugar en iglesias como Passionskirche en Berlín o Kulturkirken Jakob en Oslo. Esta última es una de las iglesias desacralizadas de la capital noruega, un edificio de 1880 que fue sede luterana hasta que decayó la afluencia de fieles y estuvo a punto de ser demolida por orden del obispo Andreas Aarflot en 1985, quien no quería asumir el mantenimiento de un espacio sin uso. Pero fue reformada por una empresa privada y convertida en la única iglesia de Oslo dedicada exclusivamente a actividades culturales, pero manteniendo sus elementos religiosos, como el retablo "La adoración de los pastores" (1880), pintado por Eilif Peterssen (1852-1918). 

Yuki Numata Resnick
Clarice Jensen
 La gira de conciertos que concluye en Londres el 4 de noviembre es la primera que realiza Dustin O'Halloran en solitario, aunque en este caso también está acompañado por dos instrumentistas de cuerda: por un lado, la violonchelista Clarice Jensen, afincada en Nueva York, que ha trabajado junto a músicos como Jóhann Jóhannsson, Nico Muhly y Max Richter. Como compositora ha sido la responsable de las bandas sonoras de 
Ainu mosir (Takeshi Fukunaga, 2020), Sin señas particulares (Fernanda Valadez, 2020) y  Ted Bundy. En la mente del asesino (Amber Sealey, 2021), y acaba de publicar su último álbum Esthesis (2022, FatCat records), del que interpreta en los primeros cuarenta y cinco minutos del concierto algunas de sus composiciones, formadas por siete piezas musicales que muestra cada una de ellas una emoción sacada del Libro de los Ritos (circa 907) que describe las ceremonias de la Dinastía Zhou. El violonchelo tratado electrónicamente muestra repeticiones constantes en temas como "Disliking", aportando una ambientación onírica que contribuye a establecer un estado de ánimo casi hipnótico en los espectadores. La otra acompañante de Dustin O'Halloran es la violinista canadiense Yuki Numata Resnick, que también ha colaborado con Jóhann Jóhannsson y Max Richter, así como en el disco de Taylor Swift Evermore (2020, Taylor Swift), y que publicó hace unos años su único álbum en solitario titulado For Ko. (2016, Innova) en el que interpretó principalmente obras de Johann Sebastian Bach. También estaba anunciada en las actuaciones en Oslo y Estocolmo la presencia de la cantante noruega Ane Brun, interpretando las canciones "Lose my way", escrita por Dustin O'Halloran para su álbum How beauty holds the hand of sorrow (2020, Universal Music) y "Horizons", incluida en la banda sonora de la película Puzzle (Marc Turtletaub, 2020). Pero Ane Brun no apareció finalmente en estas ciudades, sin que la promotora Live Nation haya dado ninguna explicación a los espectadores. 

El programa del concierto comienza con dos composiciones incluidas en el álbum Lumiere (2011, Splinter Records), grabado cuando el compositor y pianista vivía en Berlín, que es posiblemente uno de los más inspirados de su trayectoria musical cuando apenas comenzaba a destacar con sus primeras bandas sonoras, y que contaba con la producción de Nils Frahm y mezclas de Jóhann Jóhannsson. "A great divide" es la pieza con la que se abría un disco en el que se encuentran algunas de sus composiciones más conocidas, mientras que "Opus 43" continuaba los sonidos del piano solista que había establecido en sus dos primeros álbumes. En una entrevista en el podcast oficial de Deutsche Grammophon, Dustin O'Halloran definía el piano como un instrumento muy "dinámico y completo", que en cierta manera se podía utilizar casi como si fuera una orquesta. Muchas de sus composiciones autónomas simplemente están clasificadas en un orden numérico, sin títulos descriptivos, una decisión que el compositor define como una forma de dejar que sea el oyente quien establezca una emoción respecto a su música. "No me gusta describir un tema como 'Caminando por la mañana', por ejemplo. Prefiero que sean quienes escuchan la música los que establezcan una conexión emocional con ella". En "Opus 43", que no está reinterpretado en su último álbum, esta conexión se establece de una forma sutil, marcada por el piano solitario que posteriormente parece abrazado por el sonido de las cuerdas, y que en la segunda parte se vuelve más dinámico. De hecho, Lumiere (2011) es el álbum del que Dustin O'Halloran extrae más piezas en su concierto, aunque muchas de las que interpreta no están incluidas en Silfur (2021).

Entre ellas se encuentra "Fragile N. 4", en la que utiliza el sonido de un clavecín en contraposición con el piano, y sobre todo "We move lightly", seguramente una de las composiciones más populares del compositor, que está marcada por un hermoso arpegio ascendente de piano acompañado por las cuerdas, que parece establecer una especie de vigorizante aliento de esperanza. Estos dos temas fueron incorporados, junto a otras piezas de piano, en la banda sonora de la película Como locos (Drake Doremus, 2011). Pero es curioso, y también significativo, que estas composiciones que tienen una tonalidad más abierta y optimista no aparezcan en la revisión de Silfur (2021), pero sí estén incluidas en su gira de conciertos. Como si la introspección de una grabación efectuada durante la pandemia quisiera ser sustituida por una mirada mucho más optimista. 

Dustin O'Halloran en Passionskirche (Berlín)
Dustin O'Halloran nunca ha sido un músico que busque la revelación de un virtuosismo en el piano, sino que principalmente extrae las sonoridades más suaves de un instrumento que le permite explorar sobre todo las emociones más profundas. El álbum Vorleben (2012, Splinter Records) fue una de sus últimas publicaciones en solitario, aunque la mayor parte eran interpretaciones en directo de composiciones de sus dos primeros discos. El tema de apertura es "Opus 54", una delicada pieza que tiene un aire nostálgico, y posteriormente escuchamos en el concierto las versiones incluidas en Silfur (2021) de "Opus 28" y "Opus 37", ambas para piano solista pero a las que incorpora en su nueva versión una mayor calidez con la colaboración del cuarteto de cuerdas Siggi String Quartet. Una de las dos composiciones nuevas para su último álbum es "Constellation No. 2", una pieza para piano, violonchelo e instrumentos electrónicos que contiene ya en su propio título una mirada que amplía los horizontes, con resonancias de un paisaje islandés en el que no es difícil asistir a alguno de esos fenómenos atmosféricos e hipnóticos que son las auroras boreales. 

El concierto de Dustin O'Halloran también se detiene en algunos de sus trabajos más conocidos para el mundo del cine, especialmente los que han marcado su carrera en los últimos años. La conmovedora banda sonora de la película Ammonite (Francis Lee, 2020), compuesta junto a Volker Bertelmann, es una melancólica representación del amor imposible entre las protagonistas., y tiene uno de sus momentos más intensos en la espléndida pieza para piano y cuerdas "Fossils". Dustin O'Halloran ha comentado en varias ocasiones que su forma de escribir música para películas no consiste en componer y grabar con las imágenes, sino que suele crear los temas de manera autónoma, inspirado por la historia. Una de las excepciones fue la banda sonora de Lion (Garth Davis, 2016), que también compuso junto a Volker Bertelmann, pero firmando como Hauschka. En una de las secuencias más importantes, la música necesitaba ser grabada sincronizando en directo con las imágenes, y de ahí surgió una de las composiciones más emocionantes de este espléndido trabajo. "Lion Theme" es otro de los temas que se incluyen en el concierto. 

En 2020, Dustin O'Halloran colaboró en un montaje audiovisual con la fotógrafa australiana Amy Haslehurst, que utilizaba edificios abandonados en las afueras de Reikiavik para explorar conceptos como la decadencia y la pérdida de la memoria. Se trataba de una serie de proyecciones de fotografías sobre los muros semiderruidos de estas localizaciones, y utilizaba algunas composiciones que el músico había incluido en el EP Other lights (2012, Splinter Records), un disco editado solo en Japón pero que en 2019 finalmente se distribuyó en todo el mundo. Una de las piezas centrales de esta instalación audiovisual fue "An ending, a beginning", una creación con tono melancólico cuyo título, trasladado a esos "dos años extraños" a los que se refería Dustin O'Halloran al comienzo del concierto, adquiere un significado mucho más amplio. 

Tras una hora y cuarto de una actuación embriagadora, además de la interpretación en solitario de Clarice Jensen, el compositor no se hizo esperar mucho y regaló dos bises: entre las opciones que tenía previstas, que incluían "Opus 38", de su álbum Vorleben (2012), eligió sin embargo "Opus 20", el tema con el que se abre Piano Solos vol. 2 (2008, Cobraside Distribution), que está versionado en su disco Silfur (2021), pero su interpretación tiene un tono más alto y cercano a la versión original. De hecho, Dustin O'Halloran decía cuando lo presentó que era una composición que hacía años que no había tocado, lo que se confirmó con algunos acordes dubitativos. Por último, quiso dedicar un homenaje al que fuera su amigo, Jóhann Jóhannsson, cuyo nombre ha surgido en varias ocasiones a lo largo de esta crónica. El compositor islandés nominado al Oscar por las bandas sonoras de La teoría del todo (James Marsh, 2014) y Sicario (Denis Villeneuve, 2015) se ha convertido en uno de los más influyentes de su generación, a pesar de la tragedia de su temprana muerte en 2018. Dustin O'Halloran recordó una de sus composiciones más conocidas, "Flight from the City", incluida en su disco Orphée (2016, Deutsche Grammophon), y en cuya grabación original precisamente habían participado tanto la violonchelista Clarice Jensen como la violinista Yuki Numata Resnick. Esta generosidad de dar el testigo a la música de un compositor amigo para finalizar su concierto es una muestra de la especial atmósfera que Dustin O'Halloran consigue crear en estas actuaciones que le llevan a los escenarios en solitario por primera vez desde hace una década. De alguna manera, su concierto no acaba de reflejar el tono melancólico que se desprende de Silfur (2021), lo cual no es necesariamente negativo, sino que muestra hasta qué punto su estado de ánimo ha cambiado desde que lo grabara durante el confinamiento. Y eso también es un reflejo de la implicación emocional que Dustin O'Halloran transmite a través de sus obras. 


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Películas y series mencionadas: 

A spy among friends se estrena el 1 de noviembre en Britbox. 

María AntonietaIrisLa vieja guardia y La teoría del todo se pueden ver en Netflix. 
El arte de vivir bajo la lluvia se puede ver en Disney+. 
Transparent y Ted Bundy. En la mente del asesino se pueden ver en Prime Video. 
La serpiente de Essex se puede ver en Apple tv+. 
Sicario se puede ver en HBO Max, Movistar+, Netflix y Lionsgate+. 


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