20 julio, 2024

Fantasia '24 - Parte 2: Mundos extraños

Aunque el año pasado ofrecimos algunos apuntes de títulos que se pudieron ver en Fantasia Festival '23, en esta ocasión nos acercamos por primera vez de una forma más extensa al que posiblemente es el festival de cine fantástico más importante de Norteamérica, cuyo comienzo tiene lugar justo después de la celebración del Bucheon Fantastic Film Festival en Corea del Sur, otras de las citas importantes para el género. Durante el resto del mes de julio nos acercaremos a los títulos más destacados de la selección realizada por Fantasia Festival, que se celebra entre el 18 de julio y el 4 de agosto, desplegando una amplia programación de estrenos mundiales y canadienses que ofrecen una perspectiva relevante en torno al género fantástico, en su más amplio significado, como iremos viendo. Comenzamos con algunas películas que construyen mundos extraños, espacios de fantasía que hablan del aislamiento y de distopías post apocalípticas, pero también nos acercamos a la mirada personal de colectivos poco representados dentro del género y la problemática del acoso escolar precisamente en un país como Corea del Sur. 

Animalia Paradoxa

Niles Atallah

Chile 2024 | Animation Plus | ★☆

IFFR '24: Harbour


La animalia paradoxa es una nomenclatura utilizada por el botánico Carl Linnaeus (1070-1778, Suecia) para su clasificación de las especies animales que recopiló en el libro Systema Naturæ (1735). Bajo el encabezado "Paradoxa" se describían diez animales mitológicos o mágicos como la hidra, la rana-piscis o el monoceros, criaturas fantásticas encontradas en bestiarios medievales. Tomando como referencia estas descripciones, el cineasta norteamericano-chileno Niles Atallah (1978, Estados Unidos) construye un mundo post-apocalíptico en el que han sobrevivido diferentes criaturas a una destrucción que no sabemos si se ha producido por un desastre ecológico, una crisis económica, una guerra, por el fanatismo religioso o todo al mismo tiempo, aunque se escuchan algunas referencias al Apocalipsis de la Biblia. Esta extinción ya había sido explorada por el director recientemente en su cortometraje Vitanuova (Niles Atallah, 2023), como si estuviera interesado últimamente por retratar futuros que ya son pasados. La fábula, que también tiene referencias a La sirenita (1837, Ed. Edelvives) presenta a una criatura anfibia de forma humana denominada Animalia (Andrea Gómez) que deambula por las ruinas intercambiando objetos para conseguir el agua que necesita para su subsistencia, tratando de alcanzar un mar imaginario en el que pueda encontrar el entorno adecuado para vivir. En mitad de esta búsqueda del personaje, el director introduce fragmentos de video en blanco y negro que remiten a ese mundo que se ha enfrentado a fenómenos meteorológicos extremos y a guerras que han ido construyendo su propia destrucción. Sin apenas diálogos, Animalia Paradoxa (Niles Atallah, 2024), que tuvo su estreno mundial en el Festival de Rotterdam, abunda en la exploración del lenguaje cinematográfico que el director defiende como una forma de narración (y un sistema de producción) que no tiene por qué seguir la estructura tradicional, sino encontrar su propio camino. Aunque especialmente esta película tiene algunos referentes cinematográficos claros como Fausto (Jan Švankmajer, 1994), con la que comparte ese estilo visual que mezcla imagen real con animación stop-motion, y ese concepto de fábula que comienza y termina con un telón.  

La necesidad de encontrar su propia forma de creación llevó a Niles Atallah a fundar junto a Joaquín Cociña y Cristóbal León la productora Diluvio para llevar a cabo proyectos desde una perspectiva personal fuera de los caminos de la industria cinematográfica tradicional, que ha dado como resultado películas como Rey (Niles Atallah, 2017), premiada en Rotterdam , y La casa lobo (Joaquín Cociña, Cristóbal León, 2018), que consiguió el principal galardón en el Festival de Annecy. En medio de esta atmósfera de ruinas parecen haber sobrevivido las criaturas más extrañas que también remiten a la magia y el esoterismo, con una referencia visual directa al escritor Aleister Crowley, conocido por sus influencias ocultistas y alquimistas, como si este mundo renacido necesitara creer en elementos místicos y en sortilegios para entenderse a sí mismo. Hay un trabajo extraordinario en la construcción de este escenario interior por el que deambula Animalia, que se mueve con la sutileza de una intérprete de danza, caminando entre suelo y techo. La película construye su propio lenguaje que es tanto animación como imagen real, circo y danza, fábula y distopía, sugiriendo que de la destrucción siempre surge algo nuevo, pero sobre todo, diferente. Aunque adopta una cierta perspectiva pesimista, como si el mundo no pudiera deshacerse de las supercherías, las proclamas y los engaños como una forma de subsistencia que está por encima de la convivencia. La última parte, cuando la Ordácula (Rocío Hormazábal) trata de convencer a Animalia de que tome una decisión que la alejará de su objetivo, adquiere una tonalidad onírica que refleja la fragilidad de este nuevo mundo, tomando las formas de una representación teatral en un escenario vacío. Animalia Paradoxa se alimenta de la construcción de este entorno imaginario con elementos de la ciencia-ficción, los cuentos de hadas y la imaginería bestiaria, creando una experiencia singular y absorbente, pero también una reflexiva consideración sobre el futuro de un mundo que estamos sometiendo a tantos impactos. Es, al mismo tiempo, una obra cinematográfica muy referencial, que puede recordar a conceptos tratados por cineastas como los hermanos Quay y el citado Jan Švankmajer, pero también profundamente novedosa en su capacidad de estar abierta a diferentes formas de representar y narrar una historia. 

Adrianne & the castle

Shannon Walsh

Canadá 2024 | Documentaries from the Edge | ★☆

SXSW '24: International Documentaries

Hot Docs '24: Canadian Documentaries


Si el mundo de fantasía tiene una representación clara en la programación del festival es en este trabajo de no ficción creativo que proviene de una de las directoras más reconocidas de su país, Shannon Walsh (1976, Canadá), quien ha conseguido repercusión internacional con películas como Illusions of control (2019) o The gig is up (2021). En este caso se adentra en un relato híbrido que está entre una historia de amor, un cuento de hadas y un musical, pero con ramificaciones psicológicas en torno a los sacrificios que exige el amor incondicional y el duelo por la pérdida del ser querido. Todo eso, y algunas cosas más, es Adrianne & the castle (Shannon Walsh, 2024), que destacó como uno de los documentales más relevantes en los festivales SXSW y Hot Docs. El protagonista principal es Alan St. George, quien recuerda con emoción los treinta años que pudo vivir con su pareja Adrianne Blue Wakefield St. George, una mujer vitalista, amante de los musicales y de Gran Hermano, para la que convirtió su residencia en Illinois, una casa de principios del siglo XX, en una especie de castillo para que ella pudiera desplegar toda su creatividad a través de una decoración suntuosa, reflejo de una personalidad desbordante y una alegría contagiosa. El castillo de Havencrest, como lo llamaron, está sobrecargado de pinturas, esculturas, vidrieras y retratos, todo ello creado por Alan St. George, un hombre de 52 años, fundador de una empresa de mascotas y talentoso artista. En su apogeo, la propiedad albergó fiestas y actuaciones, así como producciones musicales protagonizadas por la glamurosa Adrianne. Pero su fallecimiento en 2006 dejó a Alan viviendo en solitario dentro de ese castillo de cuento de hadas cuya magia rompió la aparición de una enfermedad que le arrebató al amor de su vida. Y desde entonces, el castillo de Havencrest se promociona como una especie de atracción turística de temporada en Illinois, en la que se muestran la colección de vestidos y pelucas voluminosas de Adrianne.

La relación que mantuvo la pareja durante tres décadas estaba rodeada de una cierta elegancia kitsch que la directora transmite a través de una textura onírica en los videos caseros que grabaron, pero también sobrellevó el aislamiento de Alan y Adrianne en su propio mundo de fantasía y la ruptura absoluta con sus respectivas familias, aunque no se entra en demasiados detalles sobre las causas, lo que deja algo de frustración en el espectador. Pero principalmente refleja el carácter absorbente y dependiente de la relación que construyeron entre ambos, que también se apunta a través de los ensayos para una representación teatral en la que dos actores interpretan el momento en que se conocieron, que captura la timidez y la persistencia de Alan frente a la seguridad y la exuberancia de Adrianne. "Tú tienes tu arte, pero yo soy el arte", cuenta Alan que solía decirle ella. La película sin embargo no se construye como una mirada al pasado sino que se desarrolla a partir del presente, en una creación metalingüística en la que vemos a Alan participando en la propia reconstrucción de su vida, leyendo un texto en la sala de grabación que podría haber sido utilizado como una narración en off tradicional. Pero el guión de Shannon Walsh y Laurel Sprengermeyer evita los lugares comunes mostrando su elaboración, como cuando la representación teatral es observada por Alan, quien interviene para dar algunos apuntes a los actores. La propia película se revela a través de su propio proceso de ejecución, en este sentido. Y a partir de esta mirada desde el presente se aborda uno de los principales temas de la historia: el duelo. 

Porque Adrianne & the castle es también una historia sobre cómo sobrellevar la pérdida de alguien que ha sido tan importante en la vida de Alan, y con la que se ha construido una fantasía que en realidad ha acabado aislándole de la realidad. Él mismo cuenta que uno de los momentos más extraños que experimentó fue cuando tuvo que "salir de la burbuja y enfrentar el mundo real", como la cotidiana tarea de ir él mismo a un supermercado, y la película le muestra paseando por el aeropuerto con su castillo a cuestas, una secuencia surrealista ideada por el propio Alan, quien también creó el disfraz en forma de Havencrest que lleva puesto. El sentimiento de pérdida es definido por Alan St. George diciendo que "el duelo es una enfermedad, pero está conectado con el amor", y a veces no puede evitar emocionarse cuando se enfrenta a sus recuerdos o cuando ve la figura de Adrianne representada en la dramatización teatral. El hecho de que la película esté construida como una mezcla de fantasía y realidad es significativo, porque precisamente algunos de los relatos de Alan pueden ser creíbles o no, teniendo en cuenta que vive aislado y rodeado de reproducciones de fantasía. Como cuando afirma que tras la muerte de Adrianne se sintió identificado con el protagonista del relato corto de Washington Irving Rip Van Winkle (1818, Ed. Nórdica Libros). En el cuento, el personaje se queda dormido a la sombra de un árbol y despierta veinte años después, comprobando que el mundo se ha transformado por completo. 

Carnage for Christmas

Alice Maio Mackay

Australia 2024 | Underground | ☆☆

Frameline '24: Narrative Feature


La prolífica carrera de la directora Alice Maio Mackay (2004, Australia) la ha llevado a dirigir cinco largometrajes en los últimos tres años, el último de los cuales se presenta en Fantasia Festival tras pasar por otros encuentros cinematográficos como Salem Horror Fest y Frameline. Influida por la estética de Buffy, la cazavampiros (Frank Rubel Kuzui, 1992), más la película que la serie, la joven directora ha ido explorando diversos subgéneros del terror, utilizándolos para abordar temas como la homofobia y la transfobia con protagonistas que trascienden la representación heteronormativa para crear una realidad más diversa, y de camino ofrece un espectáculo entretenido que se deja influenciar por algunos referentes clásicos del género, sobre todo de los años setenta. Carnage for Christmas (Alice Maio Mackay, 2024) tiene uno especialmente claro, de forma que se plantea como una especie de versión trans de Navidades negras (Bob Clark, 1974) y sus remakes, con una protagonista que se refleja en la investigadora Nancy Drew, un personaje que protagonizó algunas películas en los años treinta pero que en este caso es tomada como referente sobre todo a partir de la serie de televisión The Hardy Boys/Nancy Drew mysteries (ABC, 1977-1979). La película comienza con Lola (Jeremy Moineau) contando una leyenda urbana en el último episodio de su pódcast antes de las vacaciones navideñas: la historia de un hombre que repartía juguetes entre los niños vestido de Papá Noel hasta que experimentó un hecho traumático que le llevó a ser conocido como The Toymaker (El fabricante de juguetes). Lola tuvo su propia experiencia como superviviente de sus crímenes, lo que la llevó a convertirse en podcaster true crime, investigando casos en los que la policía no muestra interés. Después de dieciséis años de ausencia, y tras haber realizado la transición de género, Lola regresa por Navidad a su lugar de nacimiento, la pequeña ciudad de Purdan, en un momento en el que parece estar actuando un imitador de The Toymaker que siembra de nuevo sus calles de asesinatos sangrientos, y algunos bastante crueles. El espíritu "Nancy Drew" de Lola la lleva a implicarse directamente en la investigación, ante las reticencias y una evidente transfobia de las autoridades locales. 

Estamos ante un slasher de manual, dentro del subgénero de terror navideño, que la directora australiana envuelve en su característico estilo de colores saturados que ofrecen una visión casi onírica de la realidad. Y también es la película más sangrienta de su filmografía, aunque sin recrearse especialmente en los asesinatos, que muestra principalmente a través de una edición fragmentada, con algunos destellos psicodélicos, que aporta la editora Vera Drew (1989, Illinois), conocida sobre todo como directora y protagonista de The people's Joker (2022), una incursión en la identidad de género enfrentándose a un cruzado fascista. Solo hay uno o dos asesinatos en los que la cámara permanece más estática, por la relevancia que tienen dentro de la historia. Si bien en el caso de Carnage for Christmas los temas de género no son la parte central de la película, están muy presentes no solo por el protagonismo de la actriz Jeremy Moineau, cuya presencia destaca entre un reparto que ofrece interpretaciones algo irregulares, sino por el bagaje personal que incorpora Lola. En las primeras escenas de la película, cuando ella está relatando la historia de The Toymaker conectada con su propia infancia, Alice Maio Mackay recurre a la animación para representarla, lo que no solo ofrece una separación del presente con el pasado, sino que establece una distancia formal respecto a la etapa pre-transición del personaje. A lo largo de la película hay algunos apuntes de fobias de género que se muestran de manera sutil, incluso dentro de la comunidad LGBTQI+, como cuando la novia de su hermana hace una afirmación significativa: "Yo no soy transfóbica pero...". Lola sin embargo está acostumbrada a batallar con los demonios del rechazo y a transgredir la heteronormatividad que también representa el asesino (las víctimas son principalmente femeninas). 

Pero al margen de estas lecturas de identidad de género, Carnage for Christmas es una película muy entretenida que se beneficia de su corta duración y que tiene las suficientes dosis de sangre y algo de casquería, sin ser especialmente gore. Para los amantes del género, además hace continuos homenajes al cine underground, con apariciones especiales de Betsey Brown, protagonista de All jacked up and full of worms (Alex Phillips, 2022) y Zelda Adams, directora y actriz de Hellbender (John Adams, Zelda Adams, Toby Poser, 2021) y Where the devil roams (John Adams, Zelda Adams, Toby Poser, 2023), además de contar con la colaboración de Vera Drew en el montaje y los efectos especiales. Como suele ocurrir en el cine de Alice Maio Mackay esta última película ofrece una incursión muy personal dentro del género fantástico y de horror, aunque ella misma se resiste a calificarla como una historia de terror, sino más bien como un relato que conecta mejor con los clásicos del misterio policíaco. 

Brave citizen

Park Jin-Pyo

Corea del Sur 2023 | Sección Oficial | ☆☆


El acoso escolar es uno de los problemas más graves que afronta Corea del Sur como sociedad, con un incremento preocupante el año pasado. El acoso verbal representó el 42% de toda la violencia escolar en 2023, aumentando de un 10,7% a un 13,3% los casos de violencia física. El gobierno coreano decidió adoptar medidas más directas en contra del bullying, especialmente cuando surgió la polémica sobre las acusaciones contra el hijo de un funcionario del Ministerio de Educación. El acoso, de hecho, es una representación del sexismo y las diferencias sociales, porque la mayor parte de las víctimas son mujeres o jóvenes de familias con bajos recursos económicos. Otra de las controversias surgidas en los últimos años es la proliferación de acusaciones de violencia escolar a través de las redes sociales contra celebridades del deporte y el cine. La actriz Jeon Jong-seo, una de las protagonistas de la película Burning (Lee Chang-dong, 2018), fue acusada por parte de compañeros de la escuela secundaria, mientras que Song Ha-yoon, que protagonizó la serie Cásate con mi esposo (Prime Video, 2024) tuvo que reconocer que fue trasladada de escuela por violencia escolar y Ji Soo, uno de los actores de la serie When I was the most beautiful (Kocowa, 2021) publicó una disculpa en redes sociales después de que se descubriera que había sido un acosador en el instituto. La serie La gloria (Netflix, 2022-) abordó el tema y se convirtió en uno de los grandes éxitos recientes de los k-drama, contando la historia de una mujer que decide vengarse de quienes habían sido sus acosadores en el instituto, mientras que The king of pigs (TVING, 2022), inédita en España, contaba la historia de un asesino en serie que ha decidido matar a quienes le acosaron en su juventud. Da la impresión de que el tratamiento del problema en el cine y la televisión tiene el mismo enfoque que el del gobierno coreano a la hora de afrontar el problema: castigar duramente a los agresores. Algo que la comunidad docente ha criticado, afirmando que deberían desarrollarse políticas educativas para evitar que existan estas agresiones, no solo castigarlas cuando ya se han producido. 

La película Brave citizen (Park Jin-Pyo, 2023) abunda en este tratamiento una vez más. Basada en el webtoon Brave Citizen (Naver, 2014-2016), tiene como protagonista a la profesora sustituta de educación cívica So Si-min (Shin Hye-sun), quien comienza a trabajar en un instituto con la esperanza de convertirse en maestra a tiempo completo. Su pasado está marcado por una carrera frustrada en combates profesionales de artes marciales, una circunstancia muy conveniente que acabará teniendo protagonismo en el desarrollo de una historia de concepto sencillo. Cuando comienza a dar clases en el instituto se percata de que el alumno Han Soo-gang (Lee Joon-young) tiene atemorizados tanto a los estudiantes como a los profesores, utilizando el privilegio que le proporciona estar respaldado por una familia influyente: su padre es un conocido fiscal, su madre es abogada y su tío un oficial de la policía. De manera que lleva a cabo con impunidad todo tipo de acosos de violencia verbal y física que el director muestra recreándose en el carácter malvado del acosador, pero sin desarrollar demasiado su personaje. Una de sus víctimas es una anciana que vende en la calle gimbaps (rollos de arroz envueltos en alga nori pero sin pescado), cuyo nieto Go Jin-Hyung (Park Jeong-Woo) acaba convirtiéndose en el nuevo objeto de las prácticas abusivas del grupo que encabeza Han Soo-gang. La interpretación del joven actor refleja con precisión la impotencia y el trauma que sufren las víctimas de acoso, y es uno de los elementos más interesantes de la película. El consejo principal que recibe So Si-min de sus compañeros de trabajo es que no intervenga cuando se produzca algún tipo de acoso y que deje a los alumnos "resolver sus propios problemas". Sobre todo porque Han Soo-gang puede conseguir que nunca más vuelva a trabajar como profesora. 

Evidentemente, a ella le resulta imposible no involucrarse en la violencia escolar, pero decide cubrirse el rostro con una máscara para poder actuar contra la banda de acosadores. Básicamente, lo que plantea el director Park Jin-Pyo (1966, Corea del Sur) es que la violencia escolar solo se arregla con más violencia, lo que resulta muy discutible como mensaje tratándose de un tema tan relevante. Y el hecho de que sea una profesora la que acabe peleando con un alumno no hace más que agravar el planteamiento de la película. Pero Brave citizen, tratándose de una historia bastante previsible sobre una heroína que salva a las víctimas de su acosador después de tratar de mantenerse al margen, funciona con suficiente solvencia. Las escenas de lucha están coreografiadas por Heo Myeong-haeng (1979, Corea del Sur), un reconocido especialista en secuencias de acción que ha acabado dirigiendo este año dos películas: Cazadores en tierra inhóspita (2024) y Fuerza bruta: Castigo (2024), tercera entrega de la exitosa The roundup (Fuerza bruta) (Lee Sang-yong, 2022). Y realmente son muy contundentes, especialmente en el enfrentamiento final, en el que una profesora castiga duramente a un alumno ante los aplausos del resto de la escuela. Las casi dos horas que dura Brave citizen permiten al director contar la historia con suficiente desarrollo, aunque descuida algunos personajes principales, pero nunca se siente demasiado alargada. Aunque el tratamiento del acoso escolar puede ser discutible, a veces plantea reflexiones interesantes, como cuando muestra que los componentes de la banda de acosadores lo son principalmente porque no quieren convertirse ellos mismos en víctimas, en una especie de círculo vicioso de violencia que genera más violencia. 

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Películas mencionadas:

La casa lobo
Navidades negras y Burning se pueden ver en Filmin.
Buffy, la cazavampiros se puede ver en Disney+. 
All jacked up and full of worms se puede ver en Shadowz.
Cazadores en tierra inhóspita se puede ver en Netflix. 


2 comentarios:

  1. Hola. Los acabo de descubrir. Excelente trabajo. Sigan así.

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