29 enero, 2024

Las series españolas de 2024: Parte 1

El Festival de Berlín, que se celebra entre el 15 y el 24 de febrero, ha hecho pública su programación, con presencia destacada del cine español, aunque este año no en la competición oficial. Películas como The human hibernation (Anna Cornudella, 2024) y el documental La hojarasca (Macu Machín, 2024) en la sección Forum; las coproducciones Alle die du bist (Michael Fetter Nathansky, 2024) y Memorias de un cuerpo que arde (Antonella Sudasassi, 2024) en Panorama; y Los tonos mayores (Ingrid Pokropek, 2023) y Reinas (Claudia Reynicke-Candeloro, 2024), que acaba de participar en el Festival de Sundance, en la sección Generation Kplus. Pero desde este año Berlinale Series desaparece como programa independiente y la selección de series de estreno se incorpora a la programación principal, dentro de la sección Berlinale Special, donde participan el thriller Dostoevskij (Sky Italia, 2024) y la biografía de Rocco Siffredi Supersex (Netflix, 2024), mientras que en la sección Panorama se incluye Zeit Verbrechen (Paramount+, 2024), una antología de cuatro episodios en la que participa la nominada al Oscar Sandra Hüller. Pero el Berlinale Series Market realiza una selección de 15 producciones con potencial para el mercado internacional, entre las que se encuentran dos series españolas, Zorras (atresplayer, 2023) y Déjate ver (atresplayer, 2023). Junto a ellas también se han elegido Elsbeth (CBS, 2024), creada por Michelle King y Robert King, que se estrena en Estados Unidos a finales de febrero; la divertida comedia dramática argentina Familia de diván (Flow, 2024); la británica Lost boys and fairies (BBC, 2024); la serie de acción sudafricana Soon comes night (Netflix, 2024); la miniserie australiana Where the men are away (SBS, 2023), que tiene dos nominaciones para los premios de la Academia Australiana (AACTA); o el thriller danés Oxen (TV 2 Play, 2023), basado en las novelas de Jens Henrik Jensen. 

Asimismo en el terreno internacional, cuatro producciones españolas han obtenido premios en la primera edición de los Rose d'Or Latinos, que se han celebrado en el Content Americas de Miami: El hormiguero (Antena 3, 2006-) como Mejor Programa de Entretenimiento, Poquita fe (Movistar+, 2023-) como Mejor Serie de Formato Corto y Falso amor (Netflix, 2023-) como Mejor Talent Show. El premio a la Mejor Serie de Comedia ha sido para la producción argentina El encargado (Disney+, 2022-) y el de Mejor Serie de Drama para la miniserie chilena Noticia de un secuestro (Prime Video, 2022). Por otro lado, los Premios Feroz, entregados el pasado viernes, volvieron a reconocer a La Mesías (Movistar+, 2023) con la mayor parte de los galardones de televisión: Serie dramática, Guión, Actor (Enric Casamajor), Actriz (Lola Dueñas), Actor Secundario (Albert Pla) y Actriz Secundaria (Irene Balmes), quedando solo libre el premio a la Mejor Serie de Comedia para Poquita fe (Movistar+, 2023), y de nuevo consolidando a Movistar+ como la plataforma con mayor reconocimiento de premios. 

Los siguientes comentarios se basan exclusivamente en el visionado de las temporadas completas de las series comentadas y pueden contener información relevante sobre sus argumentos.

Cristóbal Balenciaga

Miniserie | Ficción, 6x50' | Disney+ | ★ 

Creada por Lourdes Iglesias, Aitor Arregi, Jon Garaño, Jose Mari Goenaga

Dirigida por Aitor Arregi, Jon Garaño, Jose Mari Goenaga


Adentrarse en la biografía de un personaje que siempre se mantuvo al margen de la prensa y al que parecían horrorizarle los comentarios que se hacían sobre él en los periódicos, no deja de tener una gran dificultad, pero al mismo tiempo permite una mayor libertad para reinventarle desde un punto de vista dramático. De forma que esta serie toma como punto de partida la única entrevista que Cristóbal Balenciaga (Alberto San Juan) concedió en 1971, un año antes de su muerte, a la revista The Times y a su persistente editora de moda Prudence Glynn (Gemma Whelan), quien le abordó en el funeral de Coco Chanel (Anouk Grinberg). Al parecer, en realidad la entrevista fue breve y no obtuvo demasiada información, aunque se anunció como una primicia mundial, pero en la serie la convierten en una larga charla de tres días en los que el diseñador recuerda algunos de los momentos destacados de su trayectoria profesional en la Maison Balenciaga de París, añadiendo un giro de guión para explicar la ausencia de detalles significativos en la publicación de la entrevista. La decisión de centrarse únicamente en su etapa francesa, donde desarrolló buena parte de su trayectoria profesional, dejando a un lado la exploración de su camino desde el pequeño pueblo costero de Guetaria (que también fue la cuna del navegante Juan Sebastián Elcano) hasta llegar al centro neurálgico de la moda, permite centrarse en la época más fructífera de su carrera, dejando algunas sombras sobre su vida pero evitando la clásica narración cronológica (hay solo algunos breves flashbacks sobre su infancia y las burlas de sus amigos por su interés en la moda).

Por el contrario, Cristóbal Balenciaga (Disney+, 2024) adopta una estructura muy deudora de The Crown (Netflix, 2016-2023), dedicando cada episodio a algún acontecimiento destacado, histórico o social, que ofrece un contexto adecuado para ayudar a explicar al personaje. Si el primer episodio Cuestión de estilo (T1E1) cuenta su llegada a París de la mano del empresario vasco Nicolás Bizcarrondo (Josean Bengoetxea), cuya relación se muestra a lo largo de la serie como compleja, La ocupación (T1E2) está centrado en el desembarco nazi en París y los diferentes posicionamientos de los diseñadores de moda, muchos obligados a cerrar sus maisons y otros directamente colaboracionistas como Coco Chanel (la desclasificación de documentos del Ministerio de Defensa francés confirmó que había ejercido como agente de la inteligencia alemana aprovechando sus contactos con Winston Churchill). Cristóbal Balenciaga adoptó una postura coherente con su idea de que "la alta costura siempre ha estado al servicio de las clases de élite" y cambió a las clientas de la aristocracia francesa por las amantes de los oficiales nazis. Pero en una excelente escena al final del episodio tras la liberación de París, cuando una de esas clientas colaboracionistas le pregunta qué va a pasar con ellos, Balenciaga se siente ofendido y le replica: "Me temo que se equivoca. La Maison Balenciaga nunca ha tomado partido políticamente". Es un ejemplo notable de lo que hace bien esta serie, explorar los claroscuros de un personaje que siempre estuvo aprisionado por su personalidad introspectiva. Otra de las escenas significativas ocurre en Un rival para Balenciaga (T1E3), cuando llora desconsoladamente por una tragedia personal, pero es un llanto hacia adentro, callado y disimulado, en el que se mantiene el primer plano para que un Alberto San Juan extraordinario exprese el dolor interiorizado de su personaje. 

Este episodio muestra la rivalidad con Christian Dior (Patrice Thibaud) y su "new look", un diseñador extrovertido y astuto en su exposición a los medios frente a la negativa de Balenciaga, ni siquiera a aparecer en fotografías. Casi se puede contemplar como un prólogo a otra serie sobre moda que nos llegará en poco tiempo, The new look (Apple tv+, 2024) en la que el protagonista es Christian Dior y pasa a un papel secundario Cristóbal Balenciaga, interpretado por el actor portugués Nuno Lopes. Aunque no se sabe mucho de su vida privada, la serie adjudica al diseñador un gran amor, Wladzio D’Attainville (Thomas Coumans), presentado públicamente como su socio, y un compañero sentimental en la segunda mitad de su vida, Ramón Esparza (Adam Quintero), quien acabaría convirtiéndose en el único español que llegó a ser director creativo de Chanel, como se indica en el libro Balenciaga: mi jefe (2017, Ed. Círculo Rojo) de Mariu Emilas. Hay otra relación destacada en el episodio Réplicas (T1E4), cuando conoce al joven prometedor Hubert de Givenchy (Adrien DeWitte) en Nueva York, por el que se sugiere que no solo sentía admiración profesional sino también una atracción personal. Sin ser especialmente lujosa, la serie transcurre en su mayor parte en interiores, lo que en este caso está justificado por el propio carácter introspectivo del personaje, y los directores Aitor Arregi, Jon Garaño y Jose Mari Goenaga, responsables de excelentes películas como Handia (2017) y La trinchera infinita (2019), realizan un trabajo sutil y elegante, muy elevado por la extraordinaria banda sonora de Alberto Iglesias. Es curioso porque el habitual colaborador musical de los directores ha sido Pascal Gaigne, y se podría pensar que para una historia sobre un español que desarrolló su carrera en Francia, la elección más obvia sería la de un compositor francés que ha desarrollado su carrera en España. Pero lo cierto es que Alberto Iglesias ha creado una de sus mejores partituras, refinada y suntuosa.  

La serie destaca también por una cuidada puesta en escena, sin retratar demasiado los exteriores de París, pero sobre todo Cristóbal Balenciaga es una biografía sobre un diseñador que presta una atención especial a la moda, gracias a un trabajo minucioso de recreación de los diseños del modisto. Esto puede parecer una obviedad, pero ya hemos visto películas como La casa Gucci (Ridley Scott, 2021) y series como Halston (Netflix, 2021) y American Crime Story: El asesinato de Gianni Versace (Disney+, 2018) en las que lo que menos importaba era la moda. La alemana Bina Daigeler, nominada al Oscar por Mulán (Niki Caro, 2020), quien también trabajó en Tár (Todd Field, 2022), ha creado el vestuario junto a Pepo Ruiz Dorado utilizando los archivos del diseñador y realizando réplicas de más de una veintena de vestidos con la colaboración de Miren Arzalluz, directora del Palais Galliera, haciendo frente a la dificultad de encontrar telas que se parezcan a las originales, como explica Daigeler: "Fue un proceso muy, muy difícil, sobre todo en el caso de las lanas, porque encontrar esta calidad es misión imposible: hoy son mucho más blandas y no puedes construir el mismo abrigo porque no tienes el mismo peso o la misma rigidez. Y el peso, en el caso de todas estas prendas, es imprescindible" (Vogue Spain, 12/1/2024). Pero es de agradecer que se intente explicar la moda, ofreciendo una perspectiva de las características que diferenciaban a Balenciaga del resto de sus competidores. Y describiendo el cambio fundamental que sufrió la alta costura con la llegada del Prêt-à-porter, el diseño industrial sin tener en cuenta las medidas particulares, como vemos en el episodio Vestir a una reina (T1E5) cuando el diseñador se enfrenta al traje de novia de Fabiola de Bélgica (Belén Cuesta) adaptando su elaboración para construir una figura elegante a partir de un físico desgarbado. Cristóbal Balenciaga es un logro espléndido en todos los sentidos, una recreación de la vida de uno de los grandes diseñadores que refleja también la evolución de una industria que pasó del trabajo minucioso a la producción en cadena.

La ley del mar

Miniserie | Ficción, 3x45' | RTVE Play | ★☆☆ 

Escrita por Tatiana Rodríguez, Víctor Pedreira | Dirigida por Alberto Ruiz Rojo


Tras tener una presentación multitudinaria en la primera edición del South International Series Festival en Cádiz el pasado mes de octubre, La ley del mar (À Punt/RTVE Play, 2023) se ha estrenado finalmente en la televisión pública valenciana y unos días después en la televisión pública nacional, ésta última tomando una decisión controvertida pero habitual en los últimos meses de programar la serie completa en una sola noche en su emisión lineal. Aunque se puede considerar como una manera de dilapidar la estructura narrativa del formato de serie, lo cierto es que al tratarse de solo tres episodios de entre 45 y 55 minutos de duración, en total casi tres horas, se puede ver como si se tratara de un largometraje, y de hecho se programó el domingo 15 de enero en un prime time habitualmente dedicado a películas. En este caso, la estrategia tuvo buenos resultados de audiencia, liderando la noche con un share de 13,1% (1.544.000 espectadores), superando de esta forma a producciones internacionales emitidas en semanas anteriores. Lo que resulta más curioso es que el proyecto nació como idea para un largometraje, que no pudo completar su financiación hasta que se cambió el planteamiento al formato de miniserie, pero que finalmente ha sido emitido como si fuera una película. Detrás de la serie está la productora Studio60, fundada hace un año y medio por Enrique Pérez 'Flipy' quien, tras vender 100 Balas a The MediaPro Studio y trabajar durante varios años en Buendía Estudios como productor ejecutivo para Latinoamérica, decidió crear esta nueva empresa junto a David Troncoso y Rafael Parbus. Enfocada a las producciones a ambos lados del Atlántico, ya ha estrenado series como la mexicana Las Bravas F.C. (HBO Max, 2022) y la colombiana Playa soledad (Claro Video, 2023) producida con Sony Latinoamérica. La ley del mar nació a partir del documental Malta Radio (Manuel Menchón, 2009) en el que se contaba la historia del pesquero Francisco y Catalina

El barco salió a faenar desde Santa Pola en julio de 2006, con el patrón José Durá 'Pepe' (Luis Tosar) y nueve tripulantes, y en su recorrido encontraron a 51 inmigrantes procedentes de Eritrea naufragando en una pequeña embarcación en aguas internacionales entre Malta y Libia, así que decidieron rescatarlos y acercarlos hasta Malta, pensando que tendrían más facilidades para ayudarlos, pero se encontraron en medio de un conflicto diplomático internacional cuando las autoridades maltesas no permitieron el desembarco de los inmigrantes como forma de presionar a la Unión Europea por su política de inmigración, incluso llegando a acusar al patrón de tráfico de personas. Lo cierto es que desde entonces la situación no ha cambiado demasiado, y la cumbre del MED9 que se celebró precisamente en La Veleta (Malta) el pasado mes de septiembre avanzó poco en las decisiones sobre la acogida de inmigrantes rescatados por ONGs. El guión escrito por los gallegos Tatiana Rodríguez y Víctor Pedreira se estructura en tres tramas: la relación entre los pescadores y los inmigrantes en el barco, las gestiones de la embajadora de España en Malta, Andrea de Velasco (Blanca Portillo), y la incertidumbre de las mujeres en Santa Pola, especialmente Pepi (Sonia Almarcha), cuya relación con su marido José Durá no pasa por sus mejores momentos. Pero de alguna manera la trama de los familiares, que intenta mostrar las dificultades de las relaciones personales dentro de una profesión tan dura como la pesca, y que deriva hacia los gestos de solidaridad, entorpece la narración principal, que nunca llega a alcanzar la tensión que necesita. 

La ley del mar es una serie solvente pero demasiado cargada de cierto buenismo que no utiliza el relato de los hechos para reflexionar sobre las políticas de inmigración, lo cual rebaja la efectividad de su propuesta. En este sentido sufre parecidos defectos que el reciente estreno Unwanted (SkyShowtime, 2023), sobre un crucero turístico italiano que recoge a un grupo de supervivientes del naufragio de una patera, aunque en ese caso tiene un desarrollo más dramático cuando los refugiados se niegan a ser trasladados a Libia. Tampoco ayuda el retrato de las autoridades de Malta como unos burócratas insensibles sin reflejar la manera en que la Unión Europea se desentiende de los países que reciben una mayor cantidad de inmigrantes. Se queda así en una mirada condescendiente hacia la inmigración, incapaz de ir más allá de los mensajes de solidaridad que son evidentemente necesarios pero demasiado superficiales. Alberto Ruiz Rojo (1967, Madrid), director de series como Montecristo (Movistar+, 2023), la segunda temporada de Entrevías (Telecinco, 2021-) y La Templanza (Prime Video, 2021), consigue dotar a los dos primeros episodios de cierta tensión, pero mantiene un tono complaciente en el último, que alcanza casi una hora de duración, recurriendo a los relatos del sufrimiento a través del personaje de Barack, interpretado por el actor y cómico senegalés Lamine Thior, que llegó a España con dos años, se crió en Algeciras (él se considera afroandaluz) y al que el cine y la televisión le han encasillado en papeles de inmigrante, algo que ha denunciado creando la productora Limbo Producciones junto a otros artistas negros. Aunque la tripulación del barco está interpretada por actores muy reconocidos como Alfonso Lara, Víctor Clavijo, Ramón Ródenas, Alex Monner o Carlos Serrano, en realidad no se sienten como personajes demasiado desarrollados, quedando siempre en un segundo plano, y el intento de darle un trasfondo humano al personaje de Andrea de Velasco a través de la enfermedad de su marido, Enrique Duch (Pau Durà) se siente algo forzado. La ley del mar tiene la virtud de contar un relato sorprendente basado en una realidad compleja, pero se queda en la superficie sin ahondar en un tema tan trascendente. Al menos, consigue evitar ser tan panfletaria como la película Mediterráneo (Marcel Barrena, 2021), pero tampoco lograr ir más allá de la condescendencia. 

Zorro

Temporada 1 | Ficción, 10x52' | RTVE Play/Prime Video | ★☆☆ 

Creada por Carlos Portela | Dirigida por Javier Quintas, Jorge Saavedra, José Luis Alegría


La figura del héroe enmascarado El Zorro resultó tan atractiva que, solo un año después de que se publicara la primera tira cómica, La maldición de Capistrano (1919, Ed. Revista Barsoom), ya tenía una adaptación cinematográfica en La marca del Zorro (Fred Niblo, 1920), cuyo guión estaba escrito por el propio creador del personaje, Johnston McCulley (1883, Illinois-1958, Los Ángeles), y que estaba protagonizada por Douglas Fairbanks, quien volvería a interpretarlo en Don Q, hijo del Zorro (Donald Crisp, 1925). Este héroe característico de la cultura pulp, estaba inspirado en alguna figura histórica como el terrateniente Diego de Vega y tomaba prestados elementos de Robin Hood, pero sobre todo parece muy influido por el legendario héroe mexicano Joaquín Murrieta, quien vivió precisamente en la década de 1850 en la California de la fiebre del oro, y al que se le ha dedicado recientemente una interesante serie, La cabeza de Joaquín Murrieta (Prime Video, 2023). De hecho, el personaje que interpreta Antonio Banderas en La máscara del zorro (Martin Campbell, 1998) se llamaba Alejandro Murrieta, y era hermano de Joaquín. El personaje se caracteriza por ser especialmente astuto, con una gran capacidad acrobática, un excelente dominio del sable y mucho sentido del humor, lo cual es importante a la hora de abordar esta versión porque casi ninguna de ellas están presentes en la interpretación que hace Miguel Bernardeau, que es un Zorro serio, nada acrobático y poco carismático. El principal mérito de esta nueva adaptación es adelantarse a otras versiones que se están desarrollando: una serie para Disney+ escrita por Bryan Cogman, que fue productor ejecutivo de Juego de tronos (HBO Max, 2011-2019), tomando como base la serie de televisión El Zorro (Walt Disney, 1957-1959), y que protagonizará el actor mexicano Wilmer Valderrama; y el largometraje dirigido por Jonás Cuarón Z (2025), un enfoque retrofuturista con Gael García Bernal como protagonista. 

Con un presupuesto anunciado de 42 millones de dólares, Zorro (RTVE Play/Prime Video, 2024) es el proyecto más ambicioso de Secuoya Studios cuyo estreno coincide con su tercer aniversario y el nombramiento del ex ejecutivo de Sony Pictures Brendan Fitzgerald como CEO de un estudio que tiene en desarrollo una veintena de proyectos entre series, series de largo recorrido, largometrajes y programas unscripted. Rodada en Canarias, la propuesta del creador Carlos Portela (1967, Vigo), quien ha escrito guiones para Auga seca (HBO Max, 2020) y ha creado series como Padre Casares (TVG, 2008-2015) y Matalobos (TVG, 2009-2013), tiene un aspecto camp y la representación del personaje recuerda más al actor Guy Williams en El Zorro (Walt Disney, 1957-1959) que a Douglas Fairbanks o Antonio Banderas. Y aunque Miguel Bernardeau, a pesar de distanciarse físicamente del personaje original, se acerca en edad, puesto que en La maldición de Capistrano Diego de la Vega es descrito como "un joven hermoso de excelente sangre y veinticuatro años", resulta sorprendente que se renuncie a características tan precisas como sus habilidades acrobáticas o su sentido del humor, quizás porque el actor valenciano no es especialmente carismático. Con una estética que hace referencia a las viñetas de los cómics, reforzando el contraste de los colores cálidos, no da la impresión sin embargo de que el alto presupuesto luzca demasiado en la pantalla, y las coreografías de luchas tampoco resultan muy elaboradas, incluso con recursos como la cámara lenta que son tan anticuados que ya no lo utilizan ni las series de Marvel. 

Zorro se ajusta a la actualidad siendo más inclusiva y dando mayor protagonismo a los personajes femeninos que no tenían en el siglo XIX. De manera que Lolita Márquez (Renata Notni), que protagoniza la trama romántica, es una joven independiente, mientras que la nativa americana Nah-Lin (Dalia Xiuhcoatl) reivindica su derecho a adoptar la máscara del Zorro para luchar contra los abusos del gobernador español (Rodolfo Sancho). El problema es que algunas historias necesitan un cambio radical para poder ser realmente inclusivas, y en este caso no se produce. El personaje del Zorro estaba planteado originalmente como una reivindicación de la nobleza española en California durante el siglo XIX, luchando contra la corrupción de los gobernantes mexicanos y denigrando así el período de independencia de México. Pero aunque la perspectiva cambia al convertir en antagonista a un gobernador español, la reivindicación de Diego de la Vega como el verdadero Zorro frente a la violencia que propone la indígena Nah-Lin hace que la lectura final contradiga la propuesta inclusiva de la serie, convirtiendo en el verdadero héroe a un terrateniente blanco como el único capaz de defender los derechos de los nativos y mexicanos, incapaces de defenderse por sí mismos. Hay algunas propuestas interesantes sobre El Zorro como una idea de libertad que no tiene que estar asignada a un solo representante, y algún episodio como El Mito (T1E7) enfrenta a Diego de la Vega con la idealización del héroe enmascarado en los relatos de periódicos de la época, pero son conceptos que no terminan de desarrollarse. Al final, Zorro acaba pareciendo una mezcla entre El Cid (Prime Video, 2020-2021) y Águila roja (RTVE, 2009-2016), un producto caro que no luce en pantalla y que tampoco es capaz de enfocar el personaje desde una perspectiva actual con cierta profundidad, proponiendo en su desarrollo una especie de identificación con Batman, que se explicita en el ridículo plano final en Nueva York. La serie ha seguido los pasos de La ley del mar (À Punt/RTVE Play, 2023) en la estrategia de estreno en abierto de RTVE con formato Binge Watching, emitiéndose el 28 de enero los tres primeros episodios, que lideraron de nuevo una noche de domingo en la que no suele haber demasiada competencia, con un 12,8% de cuota (1.478.000 espectadores), parecida a la que tuvo la miniserie la semana pasada. Lo que RTVE está empezando a hacer bien es el trabajo de branding, estableciendo su marca como prescriptora del contenido, de manera que series como Zorro o La ley del mar se identifiquen con la marca RTVE. En este caso, participando ampliamente en la promoción (fue la anfitriona del preestreno en los cines Callao la semana pasada) y estableciendo una emisión paralela a la plataforma de streaming Prime Video, aunque su grado de participación en la producción ha sido menor.  

Todos mienten

Temporada 2 | Ficción, 6x42' | Movistar+ | ★☆☆ 

Creada por Pau Freixas, Eva Santolaria | Dirigida por Pau Freixas


La historia creada por Pau Freixas (1973, Barcelona) y Eva Santolaria (1975, Barcelona), pareja en la vida real, se plantea como una especie de puzzle en el que el espectador debe, no tanto resolver el misterio sino poder seguir las diferentes tramas de mentiras, medias verdades y secretos que se desarrollan dentro de la urbanización Belmonte, a través de una complicada estructura narrativa con flashbacks y flashforwards en la que no está claro si también el propio relato nos está mintiendo. Es una propuesta arriesgada que en la primera temporada adoptaba un tono de thriller sexual como el de Escándalo, relato de una obsesión (Telecinco, 2023), pero que derivaba progresivamente hacia la comedia negra, sin llegar a conseguir nunca ser demasiado apasionante. La segunda temporada de Todos mienten (Movistar+, 2022-) parecía anunciarse desde el final impactante de la anterior, y de hecho continúa exactamente donde terminaba aquella, pero directamente adopta el tono de un thriller esperpéntico en el que aparecen cadáveres que están muertos y otros que no están tan muertos, personajes protectores que toman decisiones poco acertadas y una nueva tanda de mentiras dentro de mentiras que enredan la historia más de lo que deberían. Al menos se debe agradecer que los guionistas hayan tomado la decisión de incorporar los días de la semana para que cada ida y venida temporal resulte mucho más clara. También hay un cambio sustancial en cuanto a una perspectiva que ahora centra el protagonismo principalmente en los personajes femeninos, cada vez más desquiciadas todas ellas, especialmente Ana (Natalia Verbeke), Yolanda (Eva Santolaria) y por supuesto Macarena (Irene Arcos), quedando los masculinos en un segundo plano, en el que no tienen mucho que decir Néstor (Leonardo Sbaraglia), Diego (Ernesto Alterio) o Arturo (Jorge Bosch). 

Desde el comienzo la serie despertaba el recuerdo de Big little lies (HBO Max, 2017-) como un referente principal, de la que estas semanas se viene hablando de una posible tercera temporada a todas luces innecesaria, algo que se intensifica precisamente en esta nueva historia, a la que se incorporan dos personajes. Por un lado, Ángela (Kiti Mánver), la madre de Macarena, quien después de terminada la temporada no sabemos todavía qué función tiene realmente en la trama; y por otro el inspector Beto (Alberto San Juan), una mirada masculina y externa apropiada como contrapunto a las investigaciones de Maite (Miren Ibarguren), pero que también tiene una vinculación en el pasado con Sergio (Juan Diego Botto). Pau Freixas y Eva Santolaria aumentan las consecuencias de las decisiones que toman los personajes, y envuelven a la serie de un ritmo constante que se mantiene firme a lo largo de la temporada, pero que acaba resultando demasiado exagerado, con cierta tendencia al histrionismo en interpretaciones como la de Natalia Verbeke y escenas directamente ridículas como el encuentro decisivo entre Macarena, Yolanda y Néstor que funciona como elemento catalizador de la trama principal. Sin embargo, este carácter de thriller humorístico ha permitido a Todos mienten tener una destacada presencia internacional a través de las ventas de la distribuidora alemana Beta Cinema, con la que Movistar+ mantiene una duradera relación, siendo estrenada este mes de enero en buena parte de Europa a través de HBO Max, que también acaba de estrenar Vestidas de azul (atresplayer, 2023) con el título de Veneno. Parte II, y con ventas a plataformas y televisiones de otros países como Alemania, Francia, Grecia y Chipre. Eso sí, la tercera temporada casi anunciada al final de ésta promete ser incluso más histriónica, con la incorporación de actores como Guillermo Toledo.

Serrines. Madera de actor

Temporada 1 | Ficción, 8x35' | Prime Video | ★☆☆ 

Creada por Ángel Cañas, David Cavanilles | Dirigida por Jaime Botella

Se cuenta que esta serie es un proyecto acariciado por Antonio Resines desde hace tiempo, quizás desde que apareció brevemente en ¿Qué fue de Jorge Sanz? (Movistar+, 2010-2017), con la que guarda numerosos parecidos, aunque la separa un planteamiento completamente diferente. Además de que aquella apareció en el momento adecuado, no solo para el propio Jorge Sanz sino para la renovación de las series de comedia en España, mientras que Serrines. Madera de actor (Prime Video, 2024) nace ya anacrónica. En el primer episodio, El prestigio (T1E1) hay chistes sobre negros (Serrines se pinta la cara para pasar desapercibido en un cásting para una obra de teatro producida por artistas de raza negra) y en el segundo, El beso de la mujer de araña (T1E2), hay chistes de mariquitas, cuando se reúne con una pareja de productores para poner en marcha una adaptación de la novela de Manuel Puig. Más o menos, este es el nivel humorístico de una historia nacida sobre una idea de Ángel Cañas y David Cavanilles, y escrita por Germán Aparicio y Javier Aguayo, coordinadores de guión, junto a Ángel Cañas, David Cavanilles, Ana Muniz y Manel Nofuentes. Es cierto que la intención es mostrar de qué manera el personaje de Antonio Serrines (Antonio Resines) está distanciado de la realidad actual, después de pasar más de veinte años protagonizando la misma serie. Los Tocino. Pero esta representación del personaje maduro al que le parece complicado adaptarse a los códigos de una sociedad que ha cambiado, pero cuyos exabruptos también esconden algunas verdades que ironizan sobre determinados comportamientos, no solo resulta demasiado tópica sino que, en todo caso, podría funcionar si estuviera impulsada por un buen guión. Y además, en Sentimos las molestias (Movistar+, 2022-2023) el actor interpreta un personaje parecido con mayor fortuna, entre otras cosas porque tiene como réplica a un gran actor de comedia como Miguel Rellán. Pero en este caso predomina el humor de trazo grueso que algunas veces consigue ironizar sobre la industria audiovisual, con las recurrentes referencias a los algoritmos y las plataformas de streaming, pero que en general acaba cayendo en la comedia burda y sin gracia. 

De hecho, a partir del episodio Canino (T1E5) la historia abandona las referencias al mundo audiovisual para estancarse en un proyecto de película sobre El Quijote que dirigirá el prestigioso, aunque pretencioso director de cine Flexo (Canco Rodríguez), y a partir de ahí la gracia consiste en ver a Serrines tratando de mantener una dieta o intentando conseguir citas mediante una aplicación de móvil, otro de esos recursos manidos que utiliza la serie para encontrar el humor. El "original" planteamiento visual sigue el estilo de un docu show que se está rodando en torno a la vida de Antonio Serrines, como complemento a su regreso a las series en una plataforma de streaming, de manera que el actor rompe la cuarta pared e incluso hay intervenciones del supuesto director de la docuserie que tiene la voz de Jaime Botella, el director de Serrines. Madera de actor. Pero en realidad, este recurso visual no importa demasiado, porque se abandona cuando interesa, por ejemplo, cuando se le aparece al protagonista el fantasma de Bosco (Jesús Castejón). Jaime Botella ha dirigido, entre otras, series de éxito como Ana y los 7 (TVE, 2002-2005) y fracasos rotundos como Aquí paz y después gloria (Telecinco, 2015), otro intento de apoyarse en Antonio Resines como principal impulsor del humor, que la cadena privada acabó relegando al late night tras su tercer episodio. Serrines. Madera de actor tampoco parece tener la confianza de Mediaset, porque al margen de su estreno completo en Prime Video, los dos primeros episodios se han estrenado en abierto en Factoría de Ficción sin pasar antes por Telecinco. 

Antonio Resines es un actor encasillado en la comedia que sin embargo no parece especialmente capacitado para soportar una serie en torno a él, a no ser que tenga réplicas de actores más solventes como la que mencionamos de Miguel Rellán en Sentimos las molestias. Y Jorge Sanz, que ahora le devuelve el favor apareciendo en un personaje secundario, tampoco funciona como ese contrapunto al que Antonio Resines necesita apoyarse para brillar. Seguramente, para los guionistas no deben ser muy agradables las comparaciones constantes con otras series, pero es lo que tiene crear un producto que se parece a otras decenas de producciones anteriores. Y eso que hemos evitado compararla con Fuera de serie (Telecinco, 2021), que por cierto también estaba desarrollada por Producciones Mandarina, la productora afiliada a Mediaset y rival de La Fábrica de la Tele en la producción de programas del corazón, que se ha beneficiado de la salida de Paolo Vasile y la desaparición de todos los programas de ésta última, lo que ha provocado que se aumente su presencia en la cadena. Serrines. Madera de actor no es ni siquiera una serie que resulte divertida por sus referencias a Los Serrano (Telecinco, 2003-2008), detrás de la cual estaban ni más ni menos que Álex Pina y Daniel Écija, nombres relevantes de la televisión en España. Porque, como decíamos, abandona pronto el enfoque hacia el mundo audiovisual para convertirse en una comedia simplona con chistes al estilo pajares-esteso, creada por guionistas jóvenes que, en su intento por construir un personaje desubicado, han acabado identificándose con un humor desfasado. 

Tino Casal

Miniserie | Documental, 4x35' | atresplayer | ★☆☆ 

Creada por Alfonso Albacete, Antonio Asencio | Dirigida por Alfonso Albacete


En esta recuperación de las figuras más populares de las décadas de los ochenta y noventa, que Atresmedia ha abrazado con especial dedicación en series como Cristo y Rey (atresplayer, 2023), Camilo Superstar (atresplayer, 2023) y también Nacho (atresplayer, 2023), en esta ocasión el protagonista es el polifacético artista Tino Casal (1950, Tudela Veguín-1991, Madrid) en una miniserie documental escrita y dirigida por Alfonso Albacete (1963, Murcia), quien se confiesa influido por las imágenes de videoclips como el de la canción "Embrujada", del álbum Etiqueta negra (1983, Warner Music Spain) y por una época que le inspiró la estética de sus primeras comedias, Más que amor, frenesí (1997) y Atómica (1998). Porque, aparte del documental Tino Casal: Más allá del tiempo (Pep Navarro, 2013) no se han realizado más incursiones en la vida de uno de los nombres más influyentes de la música de los años ochenta en España, pero también uno de los creadores más heterogéneos, quien ayudó a diseñar el concepto visual del grupo de heavy metal Obús, como afirma en la serie su vocalista Fortu Sánchez, y produjo sus dos primeros discos, Prepárate (1981, Warner Music Spain) y Poderoso como el trueno (1982, Warner Music Spain), junto a Luis Soler y Luis Cobos, que también participa en el documental. A lo largo de tres episodios que suman una duración total de poco más de 75 minutos, Tino Casal (Atresplayer, 2023) repasa la corta trayectoria del músico asturiano, con la permanencia siempre de la sombra del accidente de tráfico que acabó con su vida en 1991, cuando tenía 41 años y comenzaba a relanzar su carrera tras una larga ausencia debido a una enfermedad que le dejó postrado en una silla de ruedas. De hecho, había sido elegido para protagonizar una adaptación del musical El fantasma de la ópera (1986) junto a Miguel Ríos. 

El documental sin embargo sufre por exceso de entrevistados, lo que se manifiesta en un primer episodio que parece una presentación larga de un listado de cabezas parlantes que termina resultando demasiado agotador, porque se mezclan algunos que tienen una narrativa clara como Paco Clavel o Arturo Paniagua con otros que no aportan demasiado como Agoney e incluso hasta el ciclista Perico Delgado, solo porque la canción "Pánico en el Edén", de su album Hielo rojo (1984, Warner Music Spain) fue utilizada como sintonía de la Vuelta Ciclista a España. Pero sobre todo con ausencias notables (lo que ya va siendo habitual) como la del productor Julián Ruiz, amigo personal de Tino Casal, quien no solo rechazó participar en la serie sino que la calificó posteriormente como "un esperpento con diretes nimios, soeces cotilleos de mesa camilla y sin un sentido real de la historia de Tino Casal" (Plásticos y Decibelios, 29/12/2023). Una opinión que puede resultar desmesurada, pero que subraya la raíz del principal problema de estas producciones que pretenden rescatar la relevancia de una época y sus protagonistas, pero que tienen un enfoque más cercano a la rumorología y la vida personal que a la importancia artística del personaje. Quizás porque son productoras habituadas a crear programas de entretenimiento y telerrealidad las que están acaparando el liderazgo de este tipo de producciones. En este caso La Cometa TV, que suele producir programas como Dos en la carretera (Telemadrid, 2020), el magazine Juntos (Telemadrid, 2020-) o el espacio de viajes Vascos por el mundo (ETB, 2022). Al concluir la serie da la sensación de que no conocemos realmente cuál fue la relevancia de Tino Casal en el mundo de la música, por mucho que se repita constantemente que trasladaba a España las tendencias de la moda de Londres, dedicando más minutos a su rivalidad con Pedro Almodóvar y a su bisexualidad que a analizar sus influencias, o abordar su profundo conocimiento de la cultura pop. 

Porque Tino Casal no solo compraba trajes y telas en Londres, sino que se empapaba de un ambiente musical que no existía en la España posfranquista, lo que se refleja en la introducción de versiones de canciones como "Life on Mars?" de David Bowie en su primer álbum, Neocasal (1981, Parlophone Music Spain). En este sentido, el documental se centra solo en tres éxitos: "Embrujada", "Eloise" y "Champú de huevo", en este caso por incluir referencias a su mala relación con Pedro Almodóvar, sin explorar demasiado otros aspectos musicales que hicieron a Tino Casal una figura destacada y sobre todo adelantada a su época, mucho más allá de la etiqueta de una "movida madrileña" en la que estuvo presente pero de la que nunca llegó a formar parte. Conforme se desarrolla, Tino Casal se enreda en anécdotas y chascarrillos sobre sus relaciones personales, olvidando a la figura artística que sentó las bases de un estilo que bebía directamente de las vanguardias artísticas de los países anglosajones, y dejando algo desdibujadas su amistad con Fabio McNamara, quien finalmente optó por acercarse más al mundo audiovisual y con los pintores gaditanos Los Costus, cuyo fallecimiento prematuro marcó la última etapa de la carrera del cantante. Resulta sorprendente el aumento de las producciones documentales para las plataformas, pero al mismo tiempo la escasa profundidad de sus propuestas. Tino Casal es otro ejemplo de una oportunidad perdida que deriva en una narrativa simple, absurdamente plagada de entrevistados que tienen poco que decir y superficial en su manera de enfocar las historias de sus protagonistas. 

La casa de papel: Berlín

Temporada 1 | Ficción, 8x50' | Netflix | ★☆☆ 

Creada por Álex Pina, Esther Martínez Lobato

Dirigida por David Barrocal, Albert Pintó, Geoffrey Cowper


La productora Vancouver Media es a Netflix lo que La Fábrica de la Tele era a Telecinco, una sucursal de producciones para sus respectivas plataformas de comunicación, casi el único cliente que sostiene su rentabilidad. Fundada por Álex Pina (1967, Pamplona) en 2016, dos años después, en 2018, ya alcanzó un acuerdo de exclusividad con el gigante rojo tras el éxito internacional de La casa de papel (Netflix, 2017-2021), mientras se encontraba en producción su tercera temporada. Es una estabilidad que se ha mantenido a pesar de que series como White lines (Netflix, 2020) o Sky rojo (Netflix, 2021-2023) no funcionaron tan bien como se esperaba, y de alguna incursión fuera de su espacio de comodidad con El embarcadero (Movistar+, 2019-2020). Pero la serie con la que iniciaron su colaboración sigue siendo la parte central de su éxito, y tras el paréntesis de la versión coreana La casa de papel: Corea (Netflix, 2022), ha llegado el primer spin-off, centrado en uno de los personajes más desquiciados de la serie. La historia de La casa de papel: Berlín (Netflix, 2023-) se desarrolla en una época no muy anterior a la trama original, con referencias del protagonista a cómo su hermano El Profesor (Álvaro Morte) está trabajando en un plan para un robo espectacular, pero sí previa a las escenas de flashback de Berlín (Pedro Alonso) que se mostraban en la temporada 6 de La casa de papel, en las que le veíamos casado con Tatiana (Diana Gomez) e incluso con su hijo Rafael (Patrick Criado), cuya traición es el principal catalizador de su involucración en el robo de la Casa de la Moneda. 

La trama se desarrolla ahora en París (porque si se hubiera desarrollado en Berlín habría sido demasiado confuso), lo que permite ofrecer el habitual ramillete de postales turísticas de la capital francesa, y utiliza básicamente los principales resortes narrativos que han funcionado previamente, estableciendo una coherencia de estilo, pero al mismo tiempo otorgando al personaje su propia identidad. Si El Profesor era cerebral y concienzudo, Berlín es más impetuoso pero igualmente preciso en sus planes, aunque le pierde una cierta tendencia a la psicopatía, algo que hubiera sido deseable que se explorara mejor. De hecho, su historia de amor con Camille Polignac (Samantha Siqueiros) tiene un punto de romanticismo exacerbado que roza el acosamiento, pero con un tono menos oscuro del que se podría haber esperado del personaje central, incluso redimiéndole de alguna manera en el episodio Un elefante en peligro de extinción (T1E8). La construcción de este romance y el trasfondo francés tiene asimismo toques de Emily en París (Netflix, 2020-), porque como veremos Álex Pina toma prestados no solo elementos de su propia serie, sino de otros éxitos de Netflix. Dos habituales de la productora, David Barrocal y Albert Pintó (1985, Terrassa) se encargan de la dirección, aunque el episodio Un aquarium en la espalda (T1E4), en el que se desarrolla el robo principal, corre a cargo del director de videoclips hispano-australiano Geoffrey Cowper (1986, Terrassa). 

Menos elaborado que otros robos, el plan en este caso resulta algo soso y en muchas ocasiones se deja en un segundo plano, mientras Berlín se rodea de una banda que parece sacada directamente de Élite (Netflix, 2018-2024), el otro gran éxito español de la plataforma. Adecuadamente emparejados a lo largo de la temporada, encontramos a personajes absolutamente estereotipados que resuelven sus traumas a base de polvos: por un lado, Roi (Julio Peña) y Cameron (Begoña Vargas), y por otro Bruce (Joel Sánchez) y Keila (Michelle Jenner), liderados por el veterano Damián Vázquez (Tristán Ulloa), que es una especie de "Profesor" para esta historia, mientras Berlín pasea de la mano de Camille por las calles de París. Con un tono más cercano esta vez a las historias de robos de guante blanco al estilo de El caso de Thomas Crown (Norman Jewison, 1968), pero adaptándose al formato de resoluciones absurdas de Lupin (Netflix, 2021-), resulta decepcionante que la serie prefiera encaminarse hacia las tramas románticas en vez de hacia el desarrollo de un tipo de delincuencia más refinada, lo que la habría alejado adecuadamente de la historia original. Pero se traslada desde las primeras imágenes una intención clara de apostar sobre seguro y de acercarse a un perfil de espectadores más joven, incluso incorporando directamente un videoclip al final del episodio After love (T1E5). No hay riesgo porque no entra en los planes de Álex Pina tomar caminos inseguros en la construcción de su casadepapelverso, pero se sienten desaprovechadas incluso las incorporaciones de personajes conocidos como las inspectoras Alicia Sierra (Najwa Nimri) y Raquel Murillo (Itziar Ituño), que en realidad parecen más un recurso de fanservice. La casa de papel era absurda y gratuitamente desquiciada, pero resultaba entretenida. Berlín no es siquiera esto último. 

______________________________________
Películas mencionadas: 

La trinchera infinita se puede ver en Netflix.
Mulán se puede ver en Disney+. 
Tár y La máscara del Zorro se pueden ver en Movistar+. 
Malta radio se puede ver en Filmin. 
Mediterráneo se puede ver en Filmin y FlixOlé.
La marca del zorro y Don Q, hijo del Zorro se pueden ver en YouTube. 
El caso de Thomas Crown se puede ver en Filmin, Movistar+ y Prime Video. 

22 enero, 2024

Vientos nórdicos 2024 - Parte 1: Las series escandinavas que vendrán


La plataforma escandinava Viaplay anunció hace unos años un plan ambicioso de producción y de crecimiento en los mercados anglosajones, como Estados Unidos y Gran Bretaña, pero la profunda crisis que ha acabado afectando a la compañía sueca ha hecho que se enfrente a una de sus peores épocas, retrasando los estrenos de series como The fortress (Viaplay, 2023), la fantasía distópica ganadora del premio al Mejor Guión en Séries Mania '23, o la segunda temporada de la producción noruega Furia (Filmin, 2022-), que se ha estrenado en España antes que en los países nórdicos, al igual que ha ocurrido con el drama sueco End of summer (Primeran, 2023), estrenado en la plataforma de streaming del canal autonómico vasco, que tiene un acuerdo para ofrecer contenidos en la sección Viaplay Select. La crisis comenzó en junio de 2023, cuando quedó claro que la expansión internacional del grupo, una inversión masiva en drama y ficción, y los costosos acuerdos de derechos deportivos se habían vuelto demasiado pesados para que la compañía pudiera soportarlos, incluso aumentando el precio de sus planes de suscripción. El ex director ejecutivo Anders Jensen dejó la presidencia de Viaplay y fue reemplazado por Jørgen Madsen Lindemann, que ha pasado los últimos seis meses poniendo en marcha un plan de rescate, mientras la compañía anunciaba despidos del 25% de su plantilla y sus acciones se seguían desplomando hasta un 75% en la Bolsa de Estocolmo. A pesar de que el grupo de comunicación Schibsted, que controla casi todos los grandes medios escritos y digitales noruegos, compró un 10% de la empresa, aportando 400 millones de coronas suecas (36 millones de euros) y se planteó un rescate de 3.100 millones de coronas (271 millones de euros), aportados en parte por la francesa Canal+ y el grupo inversor checo PPF a finales de noviembre, los resultados siguen siendo poco alentadores. Además, Viaplay ha ido perdiendo algunas de sus principales alianzas en los países nórdicos, como la que tenía con la empresa de telecomunicaciones finlandesa Elisa, que ha trasladado todas las series de Elisa Viihde a la plataforma Ruutu+, como la tercera temporada de Ártico (Cosmo, 2018-). También en Noruega está teniendo dificultades para renovar su acuerdo con la empresa de telecomunicaciones Telia, lo que podría dejar a más de medio millón de usuarios sin acceso a Viaplay.

FINLANDIA

El 26 de enero se entregan los premios de la Academia de Televisión de Finlandia, los Kultainen Venla, que reconocen las mejores producciones realizadas durante el pasado año. Entre los finalistas de las 23 categorías, que se dieron a conocer el pasado mes de diciembre, se encuentran como Serie Dramática: Estonia (C More, 2023), sobre el hundimiento del ferry M/S Estonia, que comentamos a continuación; Piiritys (Mediawan, 2023), un true crime sobre el primer asesino a sueldo de Finlandia que actuó en 1992, y que ha obtenido en total cuatro nominaciones, también en dirección, guión e interpretación principal (no se hace distinción entre actores y actrices); y el drama de humor negro sobre el reparto de tierras de una herencia Reindeer mafia (C More, 2023), que ya comentamos el año pasado, y que ha sido la ficción con mayor número de nominaciones, cinco en total, también en dirección, guión, interpretación principal e interpretación secundaria. En la categoría de comedia, son finalistas dos series de éxito que llegan a su tercera y cuarta temporadas, respectivamente: Duke of Sipoo (Ruutu, 2018-), sobre un hombre que ha construido su imperio mediante la corrupción, y Sunday lunch (C More, 2018-), sobre un jubilado que, tras sufrir un infarto que en realidad es acidez de estómago, decide organizar almuerzos semanales con sus hijos. La única comedia nueva nominada en la principal categoría es Etisjät (Yle Areena, 2023), protagonizada por una patrulla de voluntarios que se dedica a buscar personas y objetos perdidos en un bosque. En otras categorías de interpretación, destaca la nominación de la serie Dirty snow (Ruutu+, 2023), que aborda en formato de ficción el escándalo de dopaje que sacudió al Campeonato del Mundo de Esquí celebrado en Lahti (Finlandia) en 2001, en el que el español Johann Muehlegg logró la Medalla de Plata en la prueba de 20 kilómetros después de que se confirmara que Jari Isometsä fue uno de los seis deportistas finlandeses que utilizaron sustancias prohibidas. 
______________________________

Con solo una nominación a los premios Kultainen Venla, Estonia (C More, 2023) parte sin embargo como una de las favoritas, porque aborda por primera vez en formato de ficción, con un presupuesto de casi 16 millones de euros y la participación de Finlandia, Estonia, Suecia y Bélgica, uno de los mayores desastres marítimos ocurridos en el Mar Báltico. En septiembre de 1994, el ferry M/S Estonia partió desde el puerto de Tallin para dirigirse hasta Estocolmo, pero las adversas condiciones climatológicas, con una gran tormenta, provocaron el hundimiento del barco en aguas gélidas finlandesas, y la muerte de 852 personas, entre pasajeros y tripulantes. Una investigación interna en la que participaron expertos de Estonia, Finlandia y Suecia concluyó en 1997 que la causa de que el ferry se hundiera en menos de una hora, impidiendo que sus ocupantes pudieran ser rescatados, se debió al fallo de la visera de proa, lo que provocó que se desprendiera y se llenara de agua rápidamente el aparcamiento para coches. Lo más extraño del caso es que el gobierno de Suecia se apoyó en otros países para establecer la prohibición de realizar incursiones en el fondo del mar en la zona donde se encuentran los restos del ferry, justificándolo como un acto de respeto a las víctimas, aunque posteriormente se descubrió que se trataba de una estrategia para ocultar parte del cargamento que llevaba el ferry. La controvertida serie documental Estonia (HBO Max, 2020-2022) descubrió algunos aspectos relevantes que las autoridades habían ocultado, y dos de sus responsables fueron juzgados por realizar grabaciones de los restos del ferry, aunque éstas descubrieron un gran agujero en el casco que provocó la apertura de una nueva investigación en 2022. Pero un reciente reportaje producido por el canal público sueco SVT en octubre de 2023, Estonia och myterna (Estonia y los mitos) (2023), acusaba al director Henrik Evertsson de alimentar unas teorías de la conspiración que ya se habían descartado, manipulando la información y ofreciendo en la serie documental de Discovery+ únicamente el punto de vista de los defensores de estas teorías.

Estonia

Miniserie | C More | 8x42' ★★★☆

Creada por Mikko Oikkonen | Dirigida por Måns Månsson, Juuso Syrjä

Kultainen Venla '24: Nominada Serie Dramática


En realidad, treinta años después la verdad sobre el hundimiento del M/S Estonia está tan intoxicada por las diferentes versiones que será difícil que cualquier conclusión resulte satisfactoria para todos, aunque hay una investigación todavía abierta, y el formato de ficción se enfrenta a un caso que sigue despertando inquietud y, sobre todo, muchas preguntas. Por eso es acertado que el planteamiento de la serie se centre principalmente en los acontecimientos ocurridos inmediatamente después del hundimiento, sobre todo en la comisión de investigación que trató de dar respuestas. Estrenada en el Festival de Toronto 2023, la serie ha sido creada por Mikko Oikkonen (1975, Finlandia), responsable también del drama sobre la crisis económica Helsinki syndrome (2022), contando con una mesa de guionistas que ha incluido a diferentes asesores y expertos, y está co-dirigida por Måns Månsson (1982, Suecia), quien trabajó como director de segunda unidad en la premiada miniserie Chernobyl (HBO Max, 2019) y como director en Masa (Filmin, 2021) y Dinero fácil (Netflix, 2021-). Hay una inteligente manera de abordar la historia a partir del momento en el que se conoce que el M/S Estonia tiene problemas, pero enfocando la narración desde miradas externas. Los primeros episodios se muestran desde la perspectiva del buzo de la Guardia Costera finlandesa Ari Luoma-Aho (Pelle Haikillä), que participa en el rescate de algunos de los 137 supervivientes, y de la sacerdote Mikaela Karlsson (Cecilia Milocco), lo que permite evitar la tradicional estructura que predomina en las historias sobre catástrofes. 

Pero posteriormente, la serie se centra en el verdadero protagonista, el ingeniero Henri Petonen (Jussi Nikkilä), quien participa en la comisión de investigación como representante de Finlandia, enfrentándose a los intereses encontrados entre Estonia y Suecia, especialmente ésta última, cuyos delegados parecen muy interesados en establecer los errores humanos y los fallos técnicos como principales causas del hundimiento. A los que se unirá una complicación mayor cuando la empresa alemana que construyó el M/S Estonia se sienta perjudicada por las conclusiones sobre los defectos de fabricación del ferry, iniciando una investigación propia que pone en entredicho las conclusiones de la comisión principal. Este enfoque centrado en los aspectos políticos y los intereses económicos resta algo de intensidad al drama, que mejora notablemente cuando se enfoca en las entrevistas a miembros de la tripulación superviviente que sirven para incorporar flashbacks del hundimiento. Rodadas en Lites Studios de Bélgica, uno de los países co-productores, las escenas acuáticas ofrecen un tenso dramatismo, sobre todo en episodios como The life raft (T1E7), que describe el intento de sobrevivir de un grupo de pasajeros en unos botes salvavidas en medio de un mar helado. La serie de ficción evita abarcar todas las conjeturas que se han venido realizando a lo largo de los años, lo que se revela como una decisión acertada para no enturbiar el drama humano, concluyendo cuando la primera comisión de investigación publica las consecuencias finales de su informe, que en realidad no satisface a casi nadie. Para una historia que aborda un accidente marítimo, el enfoque en torno a las reuniones entre los investigadores puede ser demasiado solemne, y se siente que no profundiza en el drama de unos familiares que, en primer lugar no tenían noticias sobre sus allegados, y finalmente se enfrentaron a decisiones controvertidas de los gobiernos. Pero como serie que trata de bucear en los aspectos humanos de la historia, consigue ser lo suficientemente sólida. 
______________________________

En la comedia The change (Channel 4, 2023), la protagonista se enfrentaba al diagnóstico de la menopausia abandonando a su marido y conduciendo una motocicleta para encontrar una antigua caja que escondió cuando era niña en el bosque de Dean, donde trata de integrarse en una comunidad formada por personajes singulares. Este "cambio" que provoca la menopausia en el cuerpo de las mujeres es también el tema central de la comedia dramática Hormonit! (Yle, 2023-), creada por Johanna Vuoksenmaa (1965, Finlandia), guionista y directora que en sus trabajos suele abordar las temáticas en torno a la convivencia en las parejas, como en la película 21 ways to ruin a marriage (2013) o en la popular serie Ex-onneliset (C More, 2016-2020) que imagina una Sociedad de Vivienda para Divorciados que permite la convivencia en un mismo apartamento de matrimonios con hijos que se han separado. Basándose en su propia experiencia, Johanna Vuoksenmaa plantea una comedia que tiene como protagonista a Elena (Karoliina Blackburn), una ginecóloga que a sus 47 años comienza a padecer alteraciones en el sueño y en su estado emocional, lo que se explica a través del diagnóstico de una menopausia prematura. Acostumbrada a encontrar la solución a los problemas de otras mujeres, se enfrenta ahora a una situación que para ella es incontrolable. "Una persona cambia cuando hay menos estrógeno o testosterona. Es química. Durante la menopausia, puedes comportarte tan irracionalmente como en la adolescencia, incluso aunque no quieras", comentaba la directora en una entrevista (Kodin Kuvalehti, 31/8/2023). La serie, estrenada en la cadena pública finlandesa Yle en agosto de 2023, incorpora también a un protagonista masculino, Patrik (Robin Svartström), un conocido escritor y psicoterapeuta que se ha hecho popular con libros en los que reflexiona sobre el amor y el matrimonio, pero que en su vida privada acaba de ser abandonado por su esposa, mucho más joven y exitosa. 

Hormonit!

Temporada 1 | Yle | 8x45' ★★★☆

Creada por Johanna Vuoksenmaa | Dirigida por Johanna Vuoksenmaa


Por supuesto, ambos personajes se encontrarán y comenzarán una relación sentimental, pero mientras Elena experimenta una líbido pronunciada, la pérdida de autoestima y de testosterona de Patrik tras haber sido abandonado le provoca impotencia. De alguna manera, ambos no están en el mejor momento de sus vidas para iniciar una nueva relación, pero al mismo tiempo son los únicos que pueden entender sus constantes cambios emocionales. La propia canción principal de la serie habla de un amor complicado: "I'm in love with the enemy" ("Estoy enamorada de mi enemigo"). Los títulos de los episodios hacen referencia a los procesos químicos que se producen en los cuerpos al experimentar estos cambios: la falta de producción de las hormonas femeninas estrógeno y progesterona, la ralentización del metabolismo, el tratamiento de testosterona, o la oxitocina, la hormona de los vínculos emocionales. La serie funciona en el tratamiento de comedia de personajes de mediana edad que se sienten confundidos y removidos emocionalmente, lo cual aporta interesantes situaciones de humor que pueden llegar a ser algo absurdas. Pero está mejor construido el entorno de Elena, sobre todo la relación que mantiene con su ex-marido español Ramón (Bisher Sawan), que comienza a salir con la profesora de su hija pequeña Vili (Eino Kantee). Y al mismo tiempo plantea una realidad palpable en torno a la manera en que los padres con hijos ya adultos aparentemente pueden desprenderse de la responsabilidad paterna, pero en realidad pasan de ser los educadores a estar continuamente controlados por sus hijos.  

Hormonit! (Yle, 2023-) cae, sin embargo, en algunos tópicos en torno a las relaciones de pareja, como el hecho de que una mujer tenga que acabar necesariamente alrededor de un hombre de más edad, y algunas situaciones de comedia a veces se sienten demasiado forzadas y exageradas. Pero la pareja protagonista tiene buena química (nunca mejor dicho) y son intérpretes finlandeses reconocidos: a Karoliina Blackburn la hemos visto en la serie Enemiga del pueblo (Filmin, 2021) y Robin Svartström ha participado en películas como Time out (Matti Kinnunen, 2018). Hay aciertos notables como los numerosos intentos de la pareja por mantener una relación sexual, que se ven interrumpidos constantemente, y destacados personajes secundarios felinos como el gato de Patrik, obsesionado con marcar constantemente el territorio cuando su dueño tiene alguna visita en casa, lo cual se convierte en un problema que hace del Episodio 4 el más divertido de toda la temporada. Hormonit! tiene algunas dificultades para encontrar el equilibrio en su narrativa dramática y humorística, pero propone un tratamiento interesante sobre los cambios emocionales provocados por las hormonas en hombres y mujeres de mediana edad.

SUECIA

El Festival de Gotemburgo se celebra entre el 26 de enero y el 4 de febrero, y dentro de sus actividades se incluye el TV Drama Vision, una selección de proyectos para televisión que buscan financiación, con encuentros y conferencias los días 30 y 31 de enero. En el programa de este año, se presentarán varios proyectos "Work in progress" de Suecia, entre ellos la serie Faithless (SVT/Arte), que dirige el prestigioso Tomas Alfredson. Las jornadas tendrán como estrella invitada a la actriz británica Sarah Lancashire, protagonista de Happy Valley (Movistar+, 2014-2023) y Julia (HBO Max, 2022-2023). También se otorgará el Nordisk Film & TV Fond Prize, que desde hace ocho años reconoce el trabajo de los creadores de una selección de series de cada uno de los países nórdicos. El premio está dotado con 20.000 € para el ganador, que se dará a conocer en una ceremonia el próximo 30 de enero, durante las actividades del Drama TV Vision. Este año, los finalistas son: el finlandés Mikko Oikkonen por Estonia (C More, 2023); la islandesa Tinna Hrafnsdóttir por Descendants (Simmin, 2023); los suecos Johan Lundborg y Gabriela Pichler por Painkiller (SVT, 2024), que se estrena en el canal público SVT el próximo 26 de enero; los noruegos Johan Fasting, Silje Storstein y Kristin Grue por Power play (Filmin, 2023-2024); y el danés Kim Fupz Aakeson por Huset (DR, 2023). 

Por otro lado, la semana pasada se entregaron los premios Guldbagge 2024 a las mejores producciones cinematográficas suecas en una ceremonia celebrada el 15 de enero que no estuvo exenta de polémica tras un cambio repentino en el reglamento. Los premios Guldbagge los concede un jurado presidido por Anna Carlson, que decidió modificar las reglas restringiendo los premios solo a actores profesionales, después de que en los últimos años acabaran en manos de intérpretes amateurs, lo que ha impedido en esta edición que los niños protagonistas de Paradise is burning (Mika Gustafson, 2023) optaran a los galardones. Algunos sectores han calificado esta decisión de los premios Guldbagge como excluyentes, en una controversia que recuerda a la que hemos tenido también con los Premios Goya, cuyo reglamento impide nominar a menores de 16 años, lo que ha provocado que se hayan quedado fuera de las nominaciones tanto Sofía Otero, premiada en el Festival de Berlín por 20.000 especies de abejas (Estíbaliz Urresola, 2023), como Carla Quílez, premiada en el Festival de San Sebastián por La maternal (Pilar Palomero, 2023). La gran vencedora de los Guldbagge 2024 ha sido Shame on dry land (Alex Petersén, 2023), que logró el récord de siete estatuillas: Dirección, Actor (Joel Spira), Actriz Secundaria (Jacqueline Ramel), Actor Secundario (Christopher Wagelin), Guión, Montaje, Fotografía, Sonido y Música, compuesta por Baba Stiltz. Aunque el premio a la Mejor Película fue para el drama adolescente Paradise is burning (Mika Gustafson, 2023), que logró también el de Diseño de Producción. Opponent (Milad Alami, 2023), que estrenó la plataforma Filmin en España hace unas semanas, se tuvo que conformar con el premio a la Mejor Actriz (Marall Nasiri), mientras que la secuela de Juntos (Lukas Moodysson, 2000), que se presentó el año pasado con el título de Together 99 (Lukas Moodysson, 2023), logró los galardones a Mejor Guión y Actriz Secundaria (Ana Lundqvist). 
______________________________

Aron Levander (1979, Suecia) es uno de los escritores suecos más reconocidos, responsable de producciones populares a nivel internacional como Jordskott (SVT, 2015-2017) y The truth will out (Viaplay, 2018-2021), y guionista de episodios para series como Dinero fácil (Netflix, 2021-) o Agatha Christie's Hjerson (C More, 2021-). En su último trabajo hay también algo del habitual tono de las novelas de la escritora inglesa, porque The detective from Beledweyne (SVT, 2023-) se apoya en una extraña pareja para resolver algunos crímenes. Y lo más interesante de esta producción es la elaboración de dos personajes que no tienen nada en común pero son capaces de colaborar, cada uno a su manera, para encontrar a los culpables. Por un lado está Tilda Renström (Malin Levanon), una mujer egoísta que suele utilizar métodos poco ortodoxos, por no decir directamente fraudulentos, lo que ha provocado su despido como fiscal por un escándalo, siendo trasladada como funcionaria a un centro de detención de inmigrantes en la pequeña localidad de Kakebo. Allí se encuentra un joven al que se le ha asignado el Número 24 porque, aunque ha solicitado asilo en Suecia, no responde a las preguntas sobre sus orígenes ni sus circunstancias, por lo que está a punto de recibir la carta de expulsión de regreso a Somalia, lo que para él supone una sentencia de muerte. Sin embargo, la investigación sobre la desaparición de una niña en el pueblo puede suponer la posibilidad de que Tilda recupere su antiguo trabajo, cuando ella se da cuenta de que Ibraahin (Nasir Farah Dhagole) tiene una especial perspicacia para encontrar pistas y encajar las piezas del misterio. A lo largo de la serie veremos que este singular Sherlock Holmes africano fue agente de policía en la localidad somalí de Beledweyne, por lo que Tilda se compromete con él a paralizar su deportación si colabora con ella para resolver el caso. 

Detektiven från Beledweyne

Temporada 1 | SVT | 6x43' ★★★☆

Creada por Aron Levander | Dirigida por Zaida Bergroth, Patryk Gillström

Kristallen Award '23: Nominada Serie Dramática, Actriz (Malin Levanon)


En esta extraña colaboración, Tilda aporta un cierto desparpajo a la hora de acceder a determinada documentación, además de tener la libertad de movimientos para realizar las averiguaciones necesarias, mientras Ibraahin es en realidad quien resuelve las investigaciones con su capacidad de deducción. La temporada de seis episodios se estructura a partir de tres casos diferentes que ocupan dos episodios cada uno, al estilo de otras series criminales como Rebecka Martinsson (C More, 2017-), mientras se desarrollan los entornos de los protagonistas. El pasado de Ibraahin se muestra en flashbacks, en los que vemos que es perseguido y torturado en Somalia, aunque no sabemos las razones hasta la última parte de la temporada. Mientras Tilda tiene una relación tensa con su hermana Beata (Hanna Ullerstam), y parece buscar siempre el reconocimiento de su padre Teddy (Donald Högberg), al mismo tiempo que se enfrenta en su trabajo a la constante vigilancia de Mats Drevild (Kristofer Kamiyasu), un agente de policía que parece obsesionado con desenmascarar sus métodos fraudulentos, y que comienza a sospechar de su relación con el joven inmigrante. The detective from Beledweyne es una propuesta muy entretenida, que funciona bien como una comedia criminal con cierto trasfondo social, especialmente gracias al excelente trabajo de la actriz Malin Levanon que, aunque la hemos visto en otras producciones de comedia como Clark (Netflix, 2022) y Amor y anarquía (Netflix, 2020-2022), tiene una buena oportunidad para desplegar en esta ocasión su vis cómica, con un personaje al que llegamos a tener cierta simpatía aunque sea inevitablemente egoísta, mentirosa y manipuladora. El debutante Nasir Farah Dhagole, que llegó a Suecia cuando tenía 21 años y ha trabajado en algunas obras teatrales, también hace un buen trabajo aportando un contrapunto sosegado y una mirada analítica a su personaje, cuya memoria fotográfica le sirve para ser singularmente deductivo. 

La relación casi imposible entre los dos protagonistas está siempre envuelta en el secreto, de forma que, aunque los casos que deben resolver son originales, da la impresión de que la primera temporada (aún no se ha confirmado su continuidad) necesita demasiado tiempo para explicar a sus personajes y sus entornos, de manera que en cierto modo la serie se desequilibra en su enfoque policial. Pero al mismo tiempo es lo suficientemente entretenida como para que algunas de sus debilidades no sean excesivamente problemáticas, y la historia permite elaborar algunos apuntes sobre las políticas de inmigración en Suecia. El propio aprovechamiento que hace Tilda de las habilidades de Ibraahin es una forma de reflejar la condescendencia de los países occidentales respecto a los inmigrantes, lo que ofrece una perspectiva mucho más amplia en esta historia de detectives. 
______________________________

El cine y la televisión en Suecia suele representar bien las problemáticas sociales de un país que el año pasado se enfrentó a un aumento importante de los delitos de sangre hasta el punto de "recurrir al ejército para detener la ola de asesinatos asociados a las disputas entre bandas(BBC News, 29/9/2023). En septiembre, doce personas murieron en actos de violencia relacionados con el crimen organizado, y se produjeron varias explosiones que podrían ser acciones de represalia. Series como La delgada línea azul (Filmin, 2021-) muestran la realidad cotidiana de la policía de Estocolmo, pero la última incursión en este tipo de problemática proviene del guionista Jens Östberg (1971, Suecia), quien ya había abordado el mundo de la violencia en su largometraje Blowfly Park (2014). La historia de su nueva serie, Taelgia (SVT, 2023-) se desarrolla principalmente en la ciudad de Södertälje, situada a 30 minutos de Estocolmo, y que el guionista describe como "el patio trasero de la capital". Se trata de una localidad pequeña que se ha conformado con habitantes procedentes de la emigración, en la que el aumento de la violencia protagonizada por bandas criminales que se produjo en Suecia en realidad es un problema que esta ciudad viene tratando de resolver desde hace décadas. A finales del año pasado se detectó que el crimen organizado estaba intentando controlar la gestión de los residuos, algo parecido a lo que había hecho la mafia en Nápoles. Dentro de este contexto, Taelgia se centra en tres personajes jóvenes que se encuentran en el centro de estas espiral de violencia: Gabriel (John Hanna) es un adolescente que acaba de trasladarse a Södertälje debido a las deudas de juego que contrajo su padre Isac (Fikret Çeşmeli), quien se había apostado tanto su apartamento como la tienda de comestibles que regentaba. Su hermana Magda (Ranja Jan Barbary) parece tener alguna posibilidad de salir de ese entorno gracias a su popularidad en el equipo femenino de baloncesto Taelgia (el antiguo nombre de la ciudad), aunque también se verá intoxicada por las apuestas ilegales. Por último, Sibel (Sara Shirpey) ha decidido ser policía y permanecer en la ciudad, evitando el traslado a Estocolmo, porque piensa que sus raíces sirias le permitirán tener una mejor comprensión de las problemáticas sociales, aunque en realidad sus vecinos la ven como una traidora: "Ese uniforme es un símbolo poderoso. Es un símbolo de nuestra muerte. Si nos volvemos 100% como ellos, ¿qué nos queda entonces?". 

Taelgia

Temporada 1 | SVT | 6x60' ★★★☆

Creada y dirigida por Jens Östberg


La serie consiguió a principios del otoño pasado tanto éxito como controversia en su estreno en el canal público sueco, precisamente en la misma época en la que el gobierno mencionaba que la violencia en el país había alcanzado niveles sin precedentes, y en sus formas recuerda a otras producciones como Dinero fácil (Netflix, 2021-), pero explorando temas sociales más de actualidad, aunque la historia es completamente ficticia. Con la participación en los primeros episodios de las guionistas Pauline Wolff, que ha escrito series como Partisan (AMC+, 2020-), y Jörgen Hjerdt, que también escribió R.I.P. Henry (Viaplay, 2023), aunque la mayor parte de la historia ha sido desarrollada por Jens Östberg, el enfoque se centra en dos familias dentro de un entorno de origen sirio en el que Lucia (Oldoz Javidi), la madre de Gabriel y Magda, ejerce como un elemento de protección. Cuando su hijo es detenido por la policía junto a Marko (Jonay Pineda Skallak), un amigo que le ha introducido en el entorno de las mafias, Sibel pide a Lucia que convenza a su hijo de que ofrezca información a la policía, pero para su madre el silencio es la mejor forma de que Gabriel no sea percibido como un delator. La serie construye un entorno alrededor de las familias, la que trata de mantener a sus hijos fuera de los ambientes violentos, y la que se enfrenta a una hija que ha decidido ejercer la profesión con menor aceptación dentro de su entorno. Posiblemente el personaje del adolescente que se ve consumido por ciertas amistades poco recomendables tiene un tratamiento más convencional, que hemos visto en otras historias como Top boy (Netflix, 2011-2023) o Gangs of Oslo (Netflix, 2023), y por eso resulta más atractivo el personaje de Sibel. 

Elegida por el jefe de policía Urban (Jimmy Lindström) precisamente por su origen sirio, en cierta manera Sibel acaba siendo la protagonista de una especie de experimento para comprobar si la inclusión de agentes racializados puede contribuir a introducirse con mayor precisión en el entorno de las bandas criminales, y al mismo tiempo rebajar la tensión. Pero cuando un adolescente del barrio es violentado por una agente de policía ante las protestas de sus familiares, se aprecia que en realidad Sibel es percibida con mayor desconfianza, aunque ella tiene una historia pasada con Jano (Simon Mezher), uno de los líderes de las bandas criminales. Bien construida, la serie se beneficia de una puesta en escena realista que aporta el reconocido director de fotografía Petrus Sjövik, que ha trabajado en producciones como Bordertown (SkyShowtime, 2020) y Gangs of London (Sky, 2020-). Taelgia construye una historia sólida que acaba reproduciendo la realidad social y la violencia de las mafias que utilizan los entornos poblados por inmigrantes para mimetizarse, creando una atmósfera que está sometida a una presión constante, siempre a punto de explotar, y reflejándose el retrato que han hecho películas francesas como Los miserables (Ladj Ly, 2019). 

DINAMARCA

Estamos en temporada de premios y el 3 de febrero también se entregan los Robert Awards, que concede la Academia de Cine Danesa, con la particularidad de que estos galardones reconocen tanto a producciones cinematográficas como a series de televisión. Dentro de las primeras, las candidatas a Mejor Película son La tierra prometida (Nikolaj Arcel, 2023), que es finalista para el Oscar en la categoría de Película Internacional, y ha acaparado 14 nominaciones; mientras que Unruly (Malou Reymann, 2023) tiene 11 nominaciones, Toves værelse (Martin Zandliet, 2023) ha logrado 8 nominaciones, The great silence (Katrine Brocks, 2022) tiene 7 nominaciones y Empire (Frederikke Aspöck, 2023), 6 nominaciones. En las categorías de televisión, destacan las nominaciones como series cortas para One of the boys (Primeran, 2023), la tercera temporada de Cara a cara. El capítulo final (Filmin, 2023), que acaba de estrenarse en España, o la comedia gastronómica Bag enhver mand (Detrás de cada hombre) (DR, 2023). Mientras que en series de formato largo casi todas se han estrenado en nuestro país: Agent (TV2, 2023) es un thriller de acción creado y dirigido por el actor Nikolaj Lie Kaas, que ha conseguido otra nominación para su protagonista Esben Esmed; el drama carcelario Huset (DR, 2023), que se pudo ver en el Festival Serielizados '23, ha logrado 6 nominaciones para casi todos sus intérpretes principales y secundarios; Chorus girls (Filmin, 2023), el drama ambientado en los años 70 sobre un grupo de bailarinas, pero con el trasfondo del maltrato y los abusos, que se estrena esta semana en España, ha conseguido 6 nominaciones; la segunda temporada de Carmen Curlers (Filmin, 2022-), que llegará a nuestro país el 6 de febrero, ha logrado también 6 nominaciones; y finalmente la miniserie basada en una historia real La enfermera (Netflix, 2023) ha recibido 3 nominaciones, dos de ellas de interpretación. Fuera de la categoría principal se ha quedado el thriller Oxen (TV 2, 2023), pero ha logrado que sus dos principales intérpretes estén nominados. 
______________________________

La nueva adaptación de una colección literaria de éxito internacional que ha llegado a las pantallas danesas tiene todos los defectos y virtudes de este tipo de proyectos que se construyen desde un planteamiento de producción. El escritor Jens Henrik Jensen (1963, Dinamarca) se ha hecho popular principalmente por sus libros protagonizados por el soldado de élite Niels Oxen, un total de seis novelas (la última se publicó en 2023) de las que en España se ha traducido la mitad: La primera víctima (2012, Ed. Duodomo Ediciones), El hombre oscuro (2014, Ed. Duodomo Ediciones) y La llama congelada (2016, Ed. Duodomo Ediciones). Las dos primeras son precisamente las que sirven como base para la primera temporada de Oxen (TV 2, 2023-), cuyo desarrollo ha sido encargado a los guionistas Peter Thorsboe (1946, Dinamarca) y Mai Bostrøm (1958, Dinamarca), una veterana pareja de escritores que han creado series policíacas muy populares en su país como Unit One (DR, 2000-2004), uno de los primeros trabajos destacados del actor Mads Mikkelsen, o The eagle (DR, 2004-2006), que obtuvieron ambas el premio Emmy Internacional. En su currículum se suman en total más de doscientas horas de drama televisivo en horario de máxima audiencia, lo que les convierte en dos de los más influyentes creadores de televisión en Dinamarca. 

Oxen

Temporada 1 | TV 2 | 6x43' ★★☆☆

Creada por Peter Thorsboe, Mai Bostrøm | Dirigida por Jannik Johansen

Robert Awards '24: Nominada Actor Principal (Jacob Lohmann), Actriz de reparto (Josephine Park)

Berlinale Series '24: Seleccionada Market Selects


La historia comienza cuando Niels Oxen (Jacob Lohmann) regresa de Afganistán como un héroe de guerra que también ha participado en los Balcanes e Irak, lo que le ha provocado algunas consecuencias psicológicas debido al estrés postraumático. En una de las incursiones durante el combate, su mejor amigo Bosse (Mads Hjulmand) ha muerto, sobre todo debido a la falta de ayuda de un oficial que huyó de la zona de guerra. Oxen presiona a sus superiores para iniciar una comisión de investigación, pero los contactos del padre del oficial huído provocan que no solo no se abra ninguna investigación, sino que el propio Niels Oxen sea acusado de posesión de drogas y expulsado del ejército. Divorciado y desempleado, el protagonista decide aislarse en el bosque de Rold Skov y vivir fuera de la sociedad. En paralelo, una reunión secreta en el castillo cercano de Nørlund , que incluye abusos sexuales y un posible asesinato, no solo acaba salpicando al propio Niels Oxen, sino que también incorpora a la investigadora Margrethe Franck (Josephine Park) y a la directora de los servicios secretos daneses Frigg Mossman (Ellen Hillingsø). Este personaje es el que experimenta el mayor cambio respecto a las novelas, porque en aquellas se trata de un oficial veterano y canoso que en la serie es sustituido por una mujer con un cierto carácter ambiguo, de la que nunca está claro si quiere ayudar o está empeñada en perjudicar una investigación que acaba uniendo a Niels Oxen y Margrethe Franck. Ambos personajes están vinculados por las consecuencias del trauma, porque ella sufrió un accidente durante una misión en la que perdió una de sus piernas, y de alguna manera la investigación que le ha encargado de manera personal Frigg Mossman, le permite reincorporarse. 

Los seis episodios de Oxen se sienten demasiado comprimidos para poder incorporar con acierto todos los elementos de los dos libros, desde la presentación del personaje principal hasta el desarrollo de una investigación que acaba relacionándose con la corrupción de las altas esferas de la sociedad, llegando incluso hasta la política. La incorporación de otros personajes ambiguos como Kajsa Corfitzen (Birgitte Hjort Sørensen, que fue una de las protagonistas de Borgen (Netflix, 2010-2022)), la hija del empresario dueño del castillo, agrega cierta confusión a una trama que ya era complicada. Aunque la serie consigue ir directamente al caso, utilizando solo el primer episodio para presentar a los personajes y desarrollándolos a partir de ahí, a veces da la impresión de que quiere avanzar demasiado rápido, y en realidad nunca logra ser tan interesante como pretende, aunque trate complejas relaciones a niveles de corrupción, que implican a miembros del gobierno. Sin embargo, algunos personajes son interesantes, como la Jefa de Inteligencia Frigg Mossman, y la interacción entre estos dos protagonistas heridos (física y psicológicamente) encuentra un punto de equilibrio lo suficientemente sólido como para resultar convincente. 

ISLANDIA

Tinna Hrafnsdóttir (1975, Islandia) ha sido durante muchos años una presencia habitual como actriz en producciones internacionales como Los asesinatos del Valhalla (Netflix, 2019) o The minister (Filmin, 2020), pero tras escribir y dirigir dos cortometrajes, su primera película de ficción, Quake (2021) consiguió una destacada repercusión internacional. Ahora aborda como creadora, directora, productora y actriz su primera serie, una historia familiar que gira en torno a las disputas internas por una herencia dentro del sector turístico en Islandia. Con la mirada muy puesta en los resortes argumentales de Succession (HBO Max, 2018-2023), de la que se confiesa gran admiradora, Tinna Hrafnsdóttir consigue construir una historia en torno a las relaciones humanas y su proyección hacia el territorio que le rodea, con una personalidad propia, alejada de las posibles influencias. Los primeros cuatro episodios de los seis que conforman la temporada se centran en cada uno de los protagonistas: Lóa and Gunnar (T1E1) presenta a los padres de la familia. Gunnar (Pálmi Getsson) es un hombre rudo que ejerce su posición de patriarca sin dar explicaciones, principalmente porque tiene muchas cosas que ocultar, entre ellas una deuda que ha ido generando el pequeño negocio de tours para avistamientos de ballenas que inició hace años. Su esposa Lóa (Hanna María Karlsdóttir) comienza a padecer las consecuencias de su alcoholismo durante años, que ella justifica diciendo que "soy hija de un marinero". 

Descendants

Miniserie | Símmin | 6x45' ★★★☆

Creada y dirigida por Tinna Hrafnsdóttir

Nordisk Film & TV Fond Prize '24: Nominada

Tras el fallecimiento repentino de Gunnar, ella se desentiende del negocio y lo deja en manos de sus tres hijos, que tienen ideas muy diferentes respecto a cómo continuarlo. Arndís (Tinna Hrafnsdóttir) es la hermana mayor y pretende ampliarlo incorporándolo a Luxury Tours, una empresa competidora que ella misma dirige; Elvar (Vignir Rafn Valþórsson), quiere seguir como un negocio familiar sin hacer modificaciones, aunque su afición al alcohol heredada de su madre no le proporciona un perfil adecuado para hacerse cargo; mientras que la hermana menor, Rúna (Þuríður Blær Jóhannsdóttir) tiene demasiados problemas económicos debido a su adicción a comprar compulsivamente, que solo desea vender el negocio para repartir el dinero. A lo largo de este drama con algunos toques de humor, las diferentes posturas de los hijos provocarán algunas consecuencias no deseadas, pero siempre teniendo como influencia las figuras paterna y materna. Mientras Elvar parece empeñado en complacer a su padre, incluso después de muerto, Rúna sigue estando demasiado ligada a su madre, mientras que Arndís ha alcanzado cierta independencia que le provocó un distanciamiento del padre. El guión traza con acierto esta mezcla de relaciones familiares contando con la participación de destacados escritores como Ottó Geir Borg, que fue co-guionista de la serie Los asesinatos de Valhalla (Netflix, 2019) y del largometraje A letter from Helga (Ása Helga Hjörleifsdóttir, 2022), y del dramaturgo Tyrfingur Tyrfingsson, quien se encargó de introducir elementos adicionales de humor satírico cuando los guiones estaban terminados. 

El trasfondo de la industria turística es una aportación interesante que aborda el crecimiento de este sector en Islandia tras la crisis económica. Este aumento fue tan espectacular que entre 2013 y 2015 el país recibió a 1 millón de turistas cada año, que aumentaron hasta los 2 millones anuales entre 2016 y 2019, sufriendo un evidente desplome durante la pandemia del coronavirus, pero volviendo a crecer hasta los 700.000 en 2021. Teniendo en cuenta que la población de Islandia es de 372.520 habitantes (datos de 2021), la relevancia del sector en la economía islandesa es evidente. Es un escenario que enriquece la historia familiar aunque no termina de desarrollarse del todo, porque Descendants (Síminn, 2023) está más interesada en construir unos personajes sólidos que descubren a través de sus relaciones algunos secretos que hacen renacer las viejas heridas emocionales. A nivel visual, Tinna Hrafnsdóttir utiliza como directora el entorno como un elemento metafórico de las relaciones humanas, especialmente el fuego como simbología de la necesidad de reiniciar el camino, y aunque hay ciertas dosis de sarcasmo alrededor de unos personajes que no tienen necesariamente que ser simpáticos para el espectador (en eso sí guarda relación con los guiones de Jesse Armstrong), la influencia del legado familiar les atrapa en un círculo vicioso de dependencia emocional.


______________________________________
Películas y series mencionadas: 

La tierra prometida se estrena el 2 de febrero en cines. 

Chorus girls se estrena el 23 de enero en Filmin. 
Ártico se estrena el 29 de enero en Cosmo.
Carmen Curlers se estrena el 6 de febrero en Filmin. 

Opponent y Los miserables se pueden ver en Filmin.