27 enero, 2017

Análisis: Nominaciones Oscar 2017

La Academia de Hollywood planteó este año un cambio significativo en la presentación de sus nominaciones al Oscar, eliminando la presencia física de actores o actrices en una sala de prensa, y haciéndola mucho más sobria en su retransmisión en streaming, acompañándola de entrevistas a actores y actrices que han vivido una nominación, y hasta con un intermedio en el que pudimos ver por primera vez el trailer oficial de la ceremonia de los Oscar. A algunos les ha parecido una forma fría y distante de dar cobertura a las nominaciones, pero hay que reconocer que ha resultado mucho más clara y concisa, aunque ciertamente se echaron en falta esos aplausos de los periodistas que marcaban las alegrías y decepciones con los finalistas finalmente seleccionados. Y no faltaron algunos fallos polémicos, que la cadena de televisión ABC se atribuye a sí misma, cuando aparecieron en la página web los nombres de Amy Adams y Tom Hanks como nominados, lo que ha despertado ciertas sospechas de algunos medios de comunicación respecto a las votaciones. 

En todo caso, en el cómputo general están todas las películas que ya venían apareciendo en las quinielas sin grandes sorpresas, con la excepción de la práctica ausencia de Animales nocturnos, el film de Tom Ford que aparecía destacada en algunas quinielas. Las 14 nominaciones de La ciudad de las estrellas (Damien Chazelle, 2016) igualando los récords de Eva al desnudo (Joseph L. Mankiewicz, 1950) y Titanic (James Cameron, 1997) la sitúan en el limbo de las grandes películas de los Oscar, y por definición en la gran favorita de la ceremonia que se celebrará el 26 de febrero. La pregunta es si finalmente los académicos decidirán otorgar el respaldo total a este musical que se refleja en el Hollywood clásico (y ahí puede tener su principal ventaja), o bien deciden repartir los galardones para reconocer, al menos, a tres películas cuyos valores cinematográficos, todo sea dicho, están por encima: Moonlight (Barry Jenkins, 2016) y La llegada (Denis Villeneuve, 2016), empatadas a 8 nominaciones y Manchester frente al mar (Kenneth Lonergan, 2016), con 6 nominaciones.

La película de Denis Villeneuve ha sido la más damnificada en estas edición, porque se le han "usurpado" tres nominaciones que deberían haber sido seguras: la de mejor banda sonora (descalificada injustamente por la utilización del tema "On the nature of daylight" de Max Richter como apertura y cierre, a pesar de que la música original ocupa el 80% de la película), la de Mejor Actriz, con la sorprendente ausencia de Amy Adams, y la de Mejores Efectos Visuales. De forma que, en justicia, debería haber tenido al menos 11 nominaciones.

En este cómputo global, destaca la presencia de Comanchería (David Mackenzie, 2016), ese thriller vigoroso que, si bien consigue colarse entre las nominadas a Mejor Película, no logra que su director, principal responsable de la fortaleza de un film ejemplar (con permiso del guionista y Jeff Bridges) acabe siendo nominado.


Pero la mayor sorpresa han sido las 6 nominaciones de Hasta el último hombre (Mel Gibson, 2016), que empata con Manchester frente al mar. Mientras ésta ya era favorita entre las destacadas, el film de Mel Gibson no había conseguido hasta el momento premios importantes, exceptuando las nominaciones a los Globos de Oro. El actor y director regresaba a Hollywood tras una larga ausencia, en cierto modo forzada por una serie de declaraciones desafortunadas, y ha protagonizado lo que ya denominan los medios norteamericanos como "la redención de Mel Gibson".

Películas: La taquilla no es importante

Una de las características de estas nominaciones es la casi ausencia de títulos realmente taquilleros entre las películas nominadas en la categoría principal. Como indica Los Angeles Times, ninguna de las nominadas como Mejor Película ha conseguido superar la barrera psicológica de los 100$ millones en taquilla (hablando solo del rendimiento en los Estados Unidos), circunstancia que únicamente se ha producido una vez en los últimos 10 años (concretamente en 2015). Lo curioso es que la Academia de Hollywood decidió ampliar en 2011 el número de películas con posibilidad de estar nominadas (de 5 a 10), precisamente para dar cabida a títulos destacados no solamente por su calidad sino también por su carrera comercial.

Por eso una de las sorpresas de estas nominaciones ha sido la no inclusión de Deadpool (Tim Miller, 2016), a pesar del respaldo que le dieron los Globos de Oro e incluso la PGA, la Asociación de Productores de Hollywood, más aún cuando no han sido 10, sino 9 las películas nominadas este año.


En todo caso, solo La ciudad de las estrellas (que acumulaba hasta el pasado fin de semana 89.7$ millones), Figuras ocultas (83.7$ millones) y La llegada (95.7$ millones acumulados pero ya con su carrera comercial casi terminada) son las únicas películas que podrían rebasar los 100$ millones este fin de semana. En el otro lado, títulos como Moonlight (15.8$ millones) o Lion (16.3$ millones) pueden verse aupados en taquilla gracias a sus nominaciones.

Este año se produce además una circunstancia a tener en cuenta frente a la actual tendencia de distribución. Por primera vez está nominada a Mejor Película un film distribuido por una plataforma digital, Amazon Studios, que consigue colocar Manchester frente al mar entre los títulos destacados. En este sentido, Amazon le gana la partida a Netflix, que ya intentó el año pasado que su largometraje Beasts of no nation (Cary Joji Fukunaga, 2015) se colara en los Oscar, sin conseguirlo. 

Actrices: Una de cal y otra de arena

En los apartados interpretativos no ha habido grandes sorpresas, pero sí nos hemos encontrado con alguna alegría inesperada y alguna decepción notable. En la parte positiva, la inclusión de la francesa Isabelle Huppert en el quinteto de las nominadas gracias a su espléndido trabajo en Elle (Paul Verhoeven, 2016). Decíamos en anteriores posts que la distribuidora había realizado una intensa campaña para que, al menos, la actriz tuviera posibilidades después de que la película fuera descabalgada de la shortlist en la categoría de Films Extranjeros. Y que lo tenía difícil dado que muchos académicos reconocían no haberla visto por ciertos prejuicios en cuanto al tratamiento del abuso sexual. El papel, rechazado según Paul Verhoeven por numerosas actrices de Hollywood, se ha convertido en uno de los que mayores alegrías ha dado a la veterana actriz francesa, que logró el premio de interpretación en el Festival de Cannes y en los Premios del Cine Europeo, es la favorita en los Premios César y ha sido premiada también por las más relevantes asociaciones de críticos en estados Unidos, como los Globos de Oro. Con este bagaje a sus espaldas, hubiera sido una injusticia no alcanzar la nominación.

También resulta positiva la presencia de Ruth Negga por su trabajo en Loving (Jeff Nichols, 2016), sobre todo porque es la única nominación que reconoce esta historia de amor interracial (resulta incomprensible que no esté nominado Joel Edgerton, la otra parte de la relación). En todo caso, al menos se reconoce un trabajo excelente para un film que hubiera merecido mejor tratamiento.

En la parte negativa, la ausencia de la actriz Amy Adams, una de las que partía como favorita por estar presente, además, en dos de películas destacadas en la carrera previa hacia el Oscar: La llegada (Denis Villeneuve, 2016) y Animales nocturnos (Tom Ford, 2016). Este año la actriz ha demostrado su capacidad para resolver personajes complejos, y su ausencia resulta inexplicable.

En todo caso, la categoría de Actriz Principal parece tener dos principales contendientes: Emma Stone y Natalie Portman. A la primera le beneficiará el huracán La la Land, y a la segunda no le vienen bien las escasas 3 nominaciones de Jackie (Pablo Larraín, 2016) y su ausencia de las categorías principales, pero su precisa construcción de un personaje difícil como el de Jackie Kennedy en los momentos inmediatamente posteriores al asesinato del presidente, le harían merecedora de su segundo Oscar.

Entre las Actrices de Reparto, la lista no ha sufrido grandes sorpresas respecto a las quinielas, y no está muy clara la favorita, especialmente entre la resucitada Nicole Kidman (Lion) y la cuatro veces nominada Michele Williams (Manchester frente al mar), con un personaje que, aunque ocupa escasamente 11 minutos en pantalla, desprenden en cada breve escena una fuerza emocional sobresaliente. Sin embargo, la principal apuesta está entre Octavia Spencer por su apreciado trabajo en la convencional Figuras ocultas (Theodore Melfi, 2016), pero recordemos que ya tiene un premio de la Academia por Criadas y señoras (Tate Taylor, 2011), y sobre todo Viola Davis, espléndida en Fences (Denzel Washington, 2016), que ya ha sido nominada en dos ocasiones anteriores sin conseguir el premio.

Actores: pocas sorpresas

Los cinco actores finalistas en la categoría de protagonistas ya tenían su asiento reservado para la ceremonia de los Oscar. Entre ellos, Ryan Gosling tiene la ventaja de formar parte de La ciudad de las estrellas, pero es a Casey Affleck (Manchester frente al mar) hacia el que se dirigen todas las miradas. Mientras su hermano Ben Affleck acapara nominaciones a los Razzies por Batman v. Superman, y se da de bruces contra la taquilla con su última película como director, Vivir de noche (Ben Affleck, 2016) Casey Affleck encuentra en su segunda nominación la oportunidad de conseguir su primer Oscar gracias a uno de esos personajes de pesada carga emocional que sabe construir con talento.

La mayor sorpresa se ha producido en la categoría de Actores de Reparto, en la que ya se predecía la presencia de uno de los intérpretes de Animales nocturnos. El joven Aaron Taylor-Johnson logró el Globo de Oro y una nominación al BAFTA, por lo que parecía encaminado a los Oscar, pero los académicos han decidido reconocer el trabajo de  Michael Shannon, única nominación de la película de Tom Ford. Se da la circunstancia de que con su anterior film, Un hombre soltero (Tom Ford, 2009) también se tuvo que conformar con una sola nominación a Mejor Actor Principal, en aquella ocasión para Colin Firth.

Aunque en esta categoría la principal disputa se va a producir entre la veteranía de Jeff Bridges (Comanchería) y la madurez de Mahershala Ali (Moonlight), siempre que el jovencísimo Lucas Hedges (Manchester frente al mar), hijo del director y guionista Peter Hedges, no sorprenda finalmente gracias a un personaje que borda.

Música y canciones: todo está dicho

Lo primero que hay que decir es que sería muy sorprendente (y diríamos que injusto) que el espléndido trabajo de Justin Hurwitz no se llevara de calle los Oscar a Mejor Banda Sonora y Mejor Canción. Porque sin duda es lo más destacado de una película que tiene sus virtudes y sus defectos, pero que brilla especialmente en el terreno musical, con ese aire al cine de Jacques Demy.

Dicho esto, las mayores sorpresas han sido la ausencia de John Williams (Mi amigo el gigante) y la inclusión de Thomas Newman (Passengers). El primero parecía tener plaza reservada sine die en los Oscar, y aunque su último trabajo no está entre sus creaciones más destacadas, es el profesional con mayor número de nominaciones, cincuenta, y casi todos sus trabajos en los últimos años han estado a las puertas del Oscar.

La nominación del segundo no la esperaba nadie, y en todo caso hubiera sido más justo reconocer su ecléctica banda sonora para Buscando a Dory (Andrew Stanton, Angus MacLane, 2016), mucho más interesante que la de Passenger, un trabajo que cae en ciertos lugares comunes del compositor.  Pero, a pesar de sus ya catorce nominaciones sin haber logrado el Oscar, no parece que este sea el año que lo consiga.

Nos alegra especialmente la nominación para una artista singular, Mica Levi, por su denso y complejo trabajo para la película Jackie (Pablo Larraín, 2016), una creación que transporta la música hacia un nivel psicológico, y que la colocan ya entre las pocas mujeres compositoras nominadas a un Oscar, junto a Rachel Portman, (un Oscar y dos nominaciones) y Anne Dudley (un Oscar). Mica Levi debutó hace solo tres años en el cine con la magnífica banda sonora de la película independiente Under the skin (Jonathan Glazer, 2013) y ahora se sitúa de forma destacada en la industria de Hollywood gracias a su primera nominación.   

En el apartado de canciones, es curiosa la inclusión del tema "Can't stop the feeling", escrito e interpretado por Justin Timberlake para la película Trolls (Walt Dohrn, Mike Mitchell, 2016), que fue elegida por la revista Times como la peor canción del año. Más lógica resulta la nominación de un tema de la película de animación Vaiana (Ron Clements, Don Hall, 2016), compuesta por Lin-Manuel Miranda, el responsable del gran éxito de Broadway Hamilton.

Pero la mayor sorpresa ha sido la canción "The empty chair", interpretada por Sting para el documental de HBO Jim: The James Foley story (Brian Oakes, 2016), "ese documental que nadie ha visto", según afirman maliciosamente algunos medios norteamericanos, que repasa el trabajo del periodista asesinado por el ISIS en 2014. Se trata de la tercera nominación para J. Ralph y la cuarta para Sting.

Entre las ausencias, la más destacada es la de Pharrell Williams por sus canciones para Figuras ocultas, que tienen una destacada importancia en el desarrollo de la historia, aunque consigue su primera nominación como productor de la película. Y nos decepciona especialmente no encontrar ni rastro de otro de los musicales destacados de este año, el maravilloso homenaje retro Sing Street (John Carney, 2016), que debiera haber tenido mayor reconocimiento, al menos para alguna de sus espléndidas canciones. 

La redención de Mel Gibson

Desde que consiguiera dos Oscar por Braveheart (Mel Gibson, 1995) hace 21 años, Mel Gibson no había vuelto a estar nominado. Y además, desde hace una década estaba condenado a cierto ostracismo, aunque él mismo afirma que siempre ha estado trabajando en diversos proyectos. Ciertas declaraciones y actitudes misóginas y racistas (incluida la filtración de una llamada telefónica a su exmujer con comentarios sexistas), pero sobre todo algunas salvajadas antisemitas como aquella que soltó mientras le arrestaban por conducir borracho: "Putos judíos. Los judíos son los responsables de todas las guerras del mundo", provocaron un destierro forzoso que ahora parece haber acabado (porque en Hollywood se puede ser misógino, racista, homófobo y hasta hijo de puta, pero a los judíos que no los toque nadie).

Y aunque los productores de Hasta el último hombre siempre han mostrado su apoyo al director, lo cierto es que evitaron convenientemente presentarse en "territorio enemigo" como el Festival de Nueva York y el Festival de Toronto, y tuvo su puesta de largo en "campo neutral", el Festival de Venecia, donde recibió 10 minutos de aplausos. La distribuidora ha diseñado una inteligente campaña de "redención" que ha llevado a Mel Gibson a todos los medios de comunicación que reclamaban su presencia, sin evitar hablar de aquellas declaraciones pasadas, lo que le ha catapultado hasta conseguir las 6 nominaciones.

Palabras más allá de la muerte

Las circunstancias han llevado al dramaturgo August Wilson, autor de la obra teatral escrita en 1983 en la que se basa la película Fences (Denzel Washington, 2016), a estar nominado al Oscar 12 años después de su muerte. August Wilson siempre quiso llevar a la pantalla su obra de teatro, y de hecho escribió el guión en los años 90, pero ningún productor quiso cumplir una de las principales condiciones del autor, que el director fuera negro. Así que hasta que Denzel Washington no se puso detrás de la cámara (tras su exitoso paso por Broadway, donde Fences fue interpretado también por Washington y Davis, que lograron los premios Tony), la obra no se convirtió en película. Y la nominación póstuma le ha llegado 12 años después.

Aunque tiene posibilidades, el Oscar por el Guión Adaptado debería ser para Barry Jenkins, que construyó una historia original solo inspirada en lo que no era más que un boceto de obra teatral escrito por Tarell Alvin McCraney (que comparte nominación). Muchos hubieran querido que Barry Jenkins estuviera nominado en la categoría de Guión Original, pero quizás la decisión de presentarse en Guión Adaptado le puede beneficiar, porque en la anterior las predicciones le dan el Oscar a La ciudad de las estrellas.

El guión de Damien Chazelle es, con diferencia, lo menos interesante de su película y su nominación no es merecida. Pero será difícil que otra película le arrebate el Oscar en la categoría de Guión Original, a pesar de tener como contrincantes a trabajos destacados como los de Comanchería (de Taylor Sheridan , no de los guionistas más notables del momento, autor del guión de Sicario (Denis Villeneuve, 2015)) o Manchester frente al mar, del veterano Kenneth Lonergan, que consigue con ésta su cuarta nominación.

Animación desanimada

El aumento en la producción de títulos de animación estrenados este año ha jugado una mala pasada a Pixar, que no ha logrado que la esperada secuela de Buscando a Nemo (Andrew Stanton, Lee Unkrich, 2003) haya conseguido ni siquiera la nominación a Mejor Película de Animación. Pero la competencia entre varios títulos de la misma productora ha dividido los votos y al final la que ha salido perdiendo ha sido la película más propiamente Pixar, Buscando a Dory, en favor de la nominación de dos títulos con un perfil más Disney: Vaiana (Ron Clements, Don Hall, 2016) y Zootrópolis (Bryan Howard, Rich Moore, 2016). 

Sin embargo, la película destacada en estas nominaciones es Kubo y las dos cuerdas mágicas (Travis Knight, 2016), un excelente ejercicio de fusión entre stop-motion y animación tradicional que demuestra una vez más que el estudio Laika ha tomado el relevo del mejor Pixar en la creación de películas de animación novedosas y más adultas. Kubo y las dos cuerdas mágicas consigue además una nominación en la categoría de Mejores Efectos Visuales, algo que solo había conseguido hasta la fecha Pesadilla antes de Navidad (Henry Selick, 1993), aunque aquella no logró ser nominada en el apartado de animación. 

#OscarsSoWhite vs. #OscarsSoMale

El año pasado la rabieta de Jada Pinkett-Smith por no ver a su marido, Will Smith, nominado al Oscar provocó una campaña de boicot hacia unos premios que no daban cabida a los profesionales de raza negra en las nominaciones. La campaña tuvo escaso seguimiento en cuanto a los invitados a la ceremonia, incluido el presentador Chris Rock, que lanzó algunos dardos críticos contra la esposa de Will Smith. Pero sí provocó un debate dentro de la propia Academia de Hollywood, que viene tratando desde hace 10 años de ampliar el perfil de sus miembros para que deje de ser visto como predominantemente blanco, octogenario y heterosexual, con la invitación a nuevos miembros más jóvenes y de amplia diversidad, a que formen parte de ella y participen en las votaciones. 

Lo que demuestra la importante presencia de artistas y profesionales de raza negra en las nominaciones de este año es que, cuando hay una producción destacada de títulos que reflejan la diversidad afroamericana, los Oscar tienen cabida para ellos. Películas como Fences, Moonlight, Figuras ocultas o Loving no solo contienen temáticas en torno a la lucha por el reconocimiento de la diversidad (racial o sexual), sino que están realizadas por profesionales afroamericanos asentados en la industria. Siete actores y actrices de color son finalistas entre las 20 nominaciones de interpretación, y tres de los cinco documentales finalistas tratan la temática racial: Enmienda XIII, I am not your Negro y O.J.: Made in America, todos ellos dirigidos por afroamericanos, al igual que Life, animated.

Así que este año, solventado el tema racial (relativamente, porque a los profesionales de raza negra poco les importa la escasa presencia latina en las nominaciones, solo representada por Lin-Manuel Miranda), las miradas están puestas en la ausencia prácticamente total de mujeres cineastas. Y aunque es cierto que solo la directora de Enmienda XIII, Ava DuVernay, representa a las mujeres realizadoras, parece un ejercicio de rizar el rizo cuando realmente no ha habido títulos destacados dirigidos por mujeres en 2016. 

El cine extranjero salpica las nominaciones

No ha habido tampoco grandes sorpresas entre las películas nominadas a Mejor Film de Habla no Inglesa, exceptuando la ausencia de la canadiense Solo el fin del mundo (Xavier Dolan, 2016) o la noruega The King's choice (Erik Poppe, 2016), que en las últimas semanas sonaba con fuerza para las nominaciones. La presencia escandinava, sin embargo, es notable, con la nominación de la danesa Land of mine (Bajo la arena) (Martin Zandvliet, 2016) y la sueca Un hombre llamado Ove (Hannes Holm, 2016), que además consigue otra nominación a Mejor Maquillaje.

Como ya comentamos en nuestro post dedicado a la shortlist de Películas Extranjeras, el Comité de Dirección se reserva la inclusión de tres de los nueve títulos seleccionados. Las tres películas no elegidas por los miembros de la Academia, pero sí por el Comité de Dirección este año han sido la alemana Toni Erdmann (Maren Ade, 2016), la australiana Tanna (Martin Butler, Bentley Dean, 2015), una bella historia de amor a lo "Romeo y Julieta" en una tribu aborígen, y la iraní El viajante (Asghar Farhadi, 2016), que ya logró el Oscar por Nader y Simin, una separación (Asghar Farhadi, 2011), por la que también estuvo nominado a Mejor Guión Original. 

El año pasado, la ganadora del Oscar, El hijo de Saúl (László Nemes, 2015), también fue incluida por el Comité de Dirección entre sus tres propuestas. Y este año el humor bizarro de Toni Erdmann tiene todas las papeletas para llevarse el Oscar. Por lo que nuevamente se pone en duda el sistema de votación de las películas nominadas en la categoría de Mejor Film de Habla no Inglesa, excesivamente influenciadas por los gustos del Comité de Dirección por encima de las votaciones de los miembros de la Academia, sean o no acertadas.  


Lo que sí destaca en esta edición es la presencia de películas extranjeras a lo largo de varias de las categorías: ahí está la nominación de Isabelle Huppert a Mejor Actriz por la francesa Elle (Paul Verhoeven, 2016); la de Yorgos Lanthimos y Efthimis Filippou a Mejor Guión Original por la griega Langosta (Yorgos Lanthimos, 2015); la de la suiza La vida de Calabacín (Claude Barras, 2016) y la holandesa-japonesa La tortuga roja (Michael Dudok De Wit, 2016) a Mejor Película de Animación; la de la italiana Fuego en el mar (Gianfranco Rosi, 2016) a Mejor Documental; la de Eva von Bahr y Love Larson a Mejor Maquillaje por la sueca Un hombre llamado Ove (Hannes Holm, 2016), que ya consiguieron una nominación en la misma categoría el año pasado por El abuelo que saltó por a ventana y se largó (Felix Herngren, 2013); y por supuesto la presencia del español Juanjo Giménez con su cortometraje Timecode.

Se trata, por tanto, de una edición de los Oscar que apuesta por la diversidad, en lo que ha sido calificado por algunos medios de comunicación norteamericanos como los "Oscar de Obama", frente a la política proteccionista que ya comienza a desarrollar el nuevo presidente, Donald Trump. 





Enmienda XIII se puede ver en Netflix España
O.J.: Made in America se puede ver en Movistar+
Timecode se puede ver en Movistar+ y Filmin

Lion se estrena hoy en España

Manchester frente al mar se estrena el 3 de febrero
Moonlight se estrena el 10 de febrero
Jackie se estrena el 17 de febrero
Fences y La vida de Calabacín se estrenan el 24 de febrero
El viajante y Un hombre llamado Ove se estrenan el 24 de marzo
Land of mine (Bajo la arena) se estrena el 5 de mayo



26 enero, 2017

Nominaciones Premios Cesar 2017

Esta semana ha coincidido la presentación de los nominados a los Oscar con el anuncio de las nominaciones a los Premios César que concede la Academia de Cine de Francia. Como son franceses, el anuncio se ha hecho durante un desayuno en el prestigioso restaurante Fauquet situado en los Campos Eliseos, a cargo del presidente de la Academia, el productor Alain Terzian, responsable de éxitos como la saga Los visitantes (Jean-Marie Poiré, 1993) o El secreto de Anthony Zimmer (Jérôme Salle, 2005). 

La polémica ha rodeado a los premios de este año después de que la Academia decidiera ofrecer el nombramiento de Presidente de los Cesar al director Roman Polanski, que todavía está siendo reclamado por Estados Unidos por el cargo de violación que se le imputó en 1977.  Diversas asociaciones contra la violencia de género estuvieron en contra de esta decisión, hasta que finalmente Roman Polanski declinó la invitación. 

En el lado menos controvertido se encuentra la enhorabuena a la actriz Isabelle Huppert por su nominación al Oscar, precisamente por su trabajo en Elle (Paul Verhoeven, 2016), la película que eligió la Academia de Cine de Francia como su representante para la categoría de Mejor Film de Habla no Inglesa y la que ha acaparado mayor número de nominaciones, con once, seguida por Frantz (François Ozon, 2016), con diez, mientras que Ma Loute (La bahía) (Bruno Dumont, 2016) ha conseguido nueve nominaciones y Mal de pierres (Nicole Garcia, 2016) ha logrado ocho. También es notable la presencia del drama adolescente Divinas (Honda Benyamina, 2016), que ha logrado siete nominaciones y ser finalista como Mejor Película y como Película Promesa. 

También destacamos las tres nominaciones de La vida de Calabacín (Claude Barras, 2016) a la Mejor Banda Sonora, Mejor Guión Adaptado y Mejor Película de Animación, en la que, como en los Oscar, compite con La tortuga roja (Michael Dudok de Wit, 2016). Y las seis nominaciones para Solo el fin del mundo (Xavier Dolan, 2016), que es finalista como Mejor Película Extranjera y como Mejor Director, pero no como Mejor Película, tras el descalabro en las nominaciones a los Oscar, en la que no consiguió ser incluida entre las nominadas. 

En el apartado musical no ha habido grandes sorpresas, a excepción de la inclusión de la música de Sophie Hunger para La vida de Calabacín. Otra mujer compositora (los César son los premios que dan mayor visibilidad a las mujeres profesionales), Anne Dudley, ve reconocido su espléndido trabajo para la película Elle, y es la favorita para ganar el César. Pero se enfrenta a otros músicos ya habituales en los premios franceses: el veterano Gabriel Yared, que consigue su séptima nominación, habiendo ganado anteriormente por El amante (Jean-Jacques Annaud, 1992); Philippe Rombi, que consigue su tercera nominación; y el trompetista Ibrahim Maalouf, que es nominado por segunda vez. 

Los Premios César se concederán el 24 de febrero, dos días antes que los Oscar, así que Isabelle Huppert, clara favorita para llevarse el César y nominada al Oscar, tendrá una semana especialmente intensa. 


Mejor Película

Divinas producida por Marc-Benoit Créancier, dirigida por Houda Benyamina
Elle producida por Saïd Ben Saïd, Michel Merkt, dirigida por Paul Verhoeven
Frantz producida por Eric Altmayer, Nicolas Altmayer, dirigida por François Ozon
Las inocentes producida por Eric Altmayer, Nicolas Altmayer, dirigida por Anne Fontaine
La bahía producida por Jean Bréhat, Rachid Bouchareb, Muriel Merlin, dirigida por Bruno Dumont
Mal de pierres (Mal de piedras) producida por Alain Attal, dirigida por Nicole Garcia
Victoria producida por Emmanuel Chaumet, dirigida por Justine Triet

Mejor Dirección

Houda Benyamina por Divinas
Paul Verhoeven por Elle
François Ozon por Frantz
Anne Fontaine por Las inocentes
Xavier Dolan por Solo el fin del mundo
Bruno Dumont por La bahía
Nicole Garcia por Mal de pierres (Mal de piedras)

Mejor Primera Película

Cigarettes et chocolat chau dirigida por Sophie Reine, producida por Isabelle Grellat, Eric Altmayer, Nicolas Altmayer
La bailarina dirigida por Stéphanie Di Giusto, producida por Alain Attal
Diamant noir dirigida por Arthur Harari, producida por David Thion, Philippe Martin
Divinas dirigida por Houda Benyamina, producida por Marc-Benoit Créancier
Rosalie Blum dirigida por Julien Rappeneau, producida por Michael Gentile, Charles Gillibert

Mejor Actriz

Judith Chemla por Una vida
Marion Cotillard por Mal de pierres (Mal de piedras)
Virginie Efïra por Victoria
Marina Fois por Irréprochable
Isabelle Huppert por Elle
Sidse Babett Knudsen por La doctora de Brest
Soko por La bailarina

Mejor Actriz Secundaria

Nathalie Baye por Solo el fin del mundo
Valeria Bruni Tedeschi por La bahía
Anne Consigny por Elle
Déborah Lukumuena por Divinas
Mélanie Thierry por La bailarina

Mejor Actriz Promesa

Oulaya Amamra por Divinas
Paula Beer por Frantz
Lily-Rose Depp por La bailarina
Noémie Merlant por Le ciel attendra
Raph por La bahía

Mejor Actor

Françoise Cluzet por Un doctor en la campiña
Pierre Deladonchamps por El hijo de Jean
Nicolas Duvauchelle por Je ne suis pas un salaud
Fabrice Luchini por La bahía
Pierre Niney por Frantz
Omar Sy por Monsieur Chocolat
Gaspar Ulliel por Solo el fin del mundo

Mejor Actor Secundario

Gabriel Arcand por El hijo de Jean
Vincent Cassel por Solo el fin del mundo
Vincent Lacoste por Victoria
Laurent Lafitte por Elle
Melvil Poupaud por Victoria
James Thierrée por Monsieur Chocolat

Mejor Actor Promesa

Jonas Bloquet por Elle
Damien Bonnard por Rester vertical
Corentin Fila por Cuando tienes 17 años
Kacey Mottet Klein por Cuando tienes 17 años
Niels Schneider por Diamant noir

Mejor Guión Original

Romain Compingt, Houda Benyamina, Malik Rumeau por Divinas
Sólveig Anspach, Jean-Luc Gaget por L'effet aquatique
Sabrina B. Karine, Alice Vial, Pascal Bonitzer, Anne Fontaine por Las inocentes
Bruno Dumont por La bahía
Justine Triet por Victoria

Mejor Guión Adaptado

David Birke por Elle
Séverine Bosschem, Emmanuelle Bercot por La doctora de Brest
François Ozon por Frantz
Céline Sciamma por La vida de Calabacín
Nicole Garcia, Jacques Fieschi por Mal de pierres (Mal de piedras)
Katell Quillévéré, Gilles Taurand por Reparar a los vivos

Mejor Música Original

Gabriel Yared por Monsieur Chocolat
Ibrahim Maalouf por Dans les forêts de Sibérie
Anne Dudley por Elle
Philippe Rombi por Frantz
Sophie Hunger por La vida de Calabacín


Mejor Fotografía

Stéphane Fontaine por Elle
Pascal Marti por Frantz
Caroline Champetier por Las inocentes
Guillaume Deffontaines por La bahía
Christophe Beaucarne por Mal de pierres (Mal de piedras)

Mejor Montaje

Loic Lallemand, Vincent Tricon por Divinas
Job Tee Burg por Elle
Laure Gardette por Frantz
Xavier Dolan por Solo el fin del mundo
Simon Jacquet por Mal de pierres (Mal de piedras)

Mejores Decorados

Jérémie D. Lignol por Monsieur Chocolat
Carlos Conti por La bailarina
Michel Barthélémy por Frantz
Riton Dupire-Clément por La bahía
Katia Wyszkop por Planetarium

Mejor Vestuario

Anaïs Romand por La bailarina
Pascaline Chavanne por Frantz
Alexandra Charles por La bahía
Catherine Leterrier por Mal de pierres (Mal de piedras)
Madeline Fontaine por Una vida

Mejor Sonido

Brigitte Taillandier, Vincent Guillon, Stéphanie Thiébaut por Monsieur Chocolat
Jean-Paul Mugel, Alexis Place, Cyril Holtz, Damien Lazzerini por Elle
Martin Boissau, Benoît Gargonne, Jean-Paul Hurier por Frantz
Jean-Pierre Duret, Sylvain Malbrant, Jean-Pierre Laforce por Mal de pierres (Mal de piedras)
Marc Engels, Fred Demolder, Sylvain Réty, Jean-Paul Hurier por L'Odyssée

Mejor Película de Animación

La jeune fille sans mains dirigida por Sébastien Laudenbach, producida por Jean-Christophe Soulageon
La vida de Calabacín dirigida por Claude Barras, producida por Armelle Glorennec, Eric Jacquot, Marc Bonny
La tortuga roja dirigida por Michael Dudok De Wit, producida por Vincent Maraval, Pascal Caucheteux

Mejor Documental

Dernières nouvelles du Cosmos dirigido por Julie Bertuccelli, producido por Yaël Fogiel, Laetitia Gonzalez
Fuego en el mar dirigido por Gianfranco Rosi, producido por Serge Lalou, Camille Laemlé
¡Gracias patrón! dirigido por François Ruffin, producido por Édouard Mauriat, Anne-Cécile Berthomeau, Johanna Silva
Swagger dirigido por Olivier Babinet, producido por Marine Dorfmann, Alexandre Perrier
Las películas de mi vida dirigido por Bertrand Tavernier, producido por Frédéric Bourboulon

Mejor Cortometraje

Après Suzanne dirigido por Félix Moati, producido por Benjamin Elalouf, Léah Weil, Elsa Rodde
Au bruit des clochettes dirigido por Chabname Zariab, producido por Judith Lou Lévy
Chasse Royale dirigido por Lise Akoka, Romane Gueret, producido por Marine Alaric
Maman(s) dirigido por Maïmouna Doucouré, producido por Zangro
Vers la tendresse dirigido por Alice Diop, producido por Christophe Barral, Toufik Ayadi

Mejor Cortometraje de Animación

Café Froid dirigido por François Leroy, Stéphanie Lansaque, producido por Marc Jousset, Perrine Capron
Celui qui a deux âmes dirigido por Fabrice Luang-Vija, producido por Sophie Fallot
Journal animé dirigido por Donato Sansone, producido por Nicolas Schmerkin
Peripheria dirigido por David Coquard-Dassault, producido por Nicolas Schmerkin

Mejor Película Extranjera

Doña Clara dirigida por Kleber Mendonça Filho
Los exámenes dirigida por Cristian Mungiu
La chica desconocida dirigida por Jean-Pierre Dardenne, Luc Dardenne
Solo el fin del mundo dirigida por Xavier Dolan
Manchester frente al mar dirigida por Kenneth Lonergan
Yo, Daniel Blake dirigida por Ken Loach
Toni Erdmann dirigida por Maren Ade


Divinas se puede ver en Netflix
Manchester frente al mar se estrena el 3 de febrero
La chica desconocida se estrena el 3 de marzo
Doña Clara se estrena el 10 de marzo
El hijo de Jean y Las películas de mi vida se estrenan el 7 de abril
Rosalie Blum se estrena el 12 de abril
La bahía se estrena el 21 de abril
Una vida se estrena el 12 de mayo

20 enero, 2017

40 discos que deberías haber escuchado en 2016 (y 2ª parte)

Como hacemos los primeros días de cada año, traemos en esta segunda entrega las otras 20 propuestas de aquellos discos publicados durante 2016 que creemos que deberíais escuchar. Se trata de una lista personal con algunos de esos momentos que nos han emocionado y trasladado a esos otros mundos a los que nos invita la música. Por eso no queremos llamarlo "los mejores discos de 2016", sino presentarlos como una lista de recomendaciones que, de hecho, no se detiene aquí, sino que os invita a seguir explorando otros trabajos de estos artistas o, simplemente, otros géneros musicales alejados de las plataformas comerciales. De esta forma, el orden de nuestra lista se basa en la fecha de publicación, porque no se trata de hacer un ranking, sino de compartir experiencias.  

Angel Olsen - My woman
Jagjaguwar     2 / septiembre / 2016

Desde sus primeros discos, la cantante norteamericana Angel Olsen ha demostrado su capacidad de adaptación a cualquier estilo. Desde los sonidos más folk de Half way Home (2012) hasta las complejidades de Burn your fire (2014). Pero es su último álbum donde demuestra una evolución que la lleva por terrenos más elaborados, y en los que, aunque no faltan las referencias a uno de sus ídolos, la incomparable Dolly Parton, nos encontramos a una cantante cuya voz consigue sonar desolada, pero también divertida y hasta intensa en determinados temas. Podríamos decir que no parece que estemos escuchando el mismo disco si no adentramos en las guitarras contundentes de "Not gonna kill you", o si nos imbuimos de la desolación que marca el extenso "Woman". Angel Olsen ha conseguido, en este salto de calidad aún más arriesgado que el de su segundo disco, una madurez vocal sorprendente, que se adapta sin aparente esfuerzo a canciones más intrascendentes como "Shut up kiss me", pero que también se va desgarrando lentamente en pasajes más personales como ese "Sister" que dedica a una hermana que nunca tuvo, y que desemboca en un "I want to live life, I want to die right" (quiero vivir la vida, quiero morir correctamente) que suena a reinvindicación de la vida en su plenitud. 



The Tierney Sutton Band - The Sting variations
BFM Jazz     9 / septiembre / 2016

Para los que no les conocieran, la banda sonora de la película Sully (Clint Eastwood, 2016) ha sido una buena tarjeta de presentación de una de las formaciones más interesantes del easy jazz en la actualidad. La cantante Tierney Sutton y su banda, encabezada por el pianista Christian Jacob, vienen ofreciendo desde hace años un ramillete de discos exquisitos que nos envuelven con esas sonoridades aparentemente sencillas pero realmente alambicadas, hasta desembocar en ese ofrecimiento que les hizo Clint Eastwood para participar en la banda sonora de su película. Unas composiciones que son más disfrutables como música autónoma que en el propio film, y que reproduce con elegancia la melodía principal creada por el propio director, llevándola a terrenos jazzísticos de sonoridad elegante. La edición de esta primera incursión en el cine coincide con la publicación de uno de sus discos más refinados, en el que recuperan una selección de canciones de Sting para reconvertirlas en píldoras de jazz suave que destilan perspicacia. Y resulta difícil elegir aquellos temas que más nos gustan, porque cada uno tiene destellos de talento, como ese "Driven to tears" con el que se abre el álbum, que propone también un homenaje a Miles Davis, o el medley "Fragile/The gentle rain", que transita suavemente de un tema a otro. Y por supuesto esa hermosa versión de uno de los iconos de The Police y Sting, "Every breath you take (lullaby)", que aquí adopta, en su condición de "canción de cuna", una delicadeza sublime. 

Jóhann Johánnsson - Orphée
Deutsche Grammophon     13 / septiembre / 2016

Otro compositor que últimamente se ha venido introduciendo en el mundo del cine es el islandés Jóhann Jóhannsson, que nos ha ofrecido en 2016 una de las mejores bandas sonoras del año para la película La llegada (Denis Villeneuve, 2016), descalificada por la Academia de Hollywood para el Oscar por unos reglamentos cuya interpretación es más que discutible. Y al igual que en el caso de The Tierney Sutton Band, su trabajo en el cine ha coincidido con el lanzamiento de su último álbum autónomo, todo un acontecimiento ya que es el primero que publica en los últimos seis años, debido a su dedicación casi exclusiva a las bandas sonoras. Es difícil abstraerse de la personalidad que Jóhann Jóhannsson ha puesto en sus colaboraciones con el cine a la hora de escuchar este álbum. Y, de hecho, la base principal en torno a la que se vehiculan sus composiciones también parte de un elemento artístico, en este caso caso, literario. La composición coral con la que concluye el disco, ese esplendoroso "Orphic Hymn", que interpreta la formación Theatre of Voices, utiliza textos del poema Las metamorfosis (8 d.C.) de Ovidio, en el que se describe la historia de amor trágica entre Orfeo y Eurídice. Y de ahí parten las principales ideas de un álbum en el que se nota la libertad creativa que ha tenido Jóhann Jóhannsson. Él mismo afirma haber compuesto los diferentes pasajes a lo largo de varios años, sin fechas límite ni presiones externas, lo cual se plasma en la heterodoxia de su propuesta, y en la compleja lista de formaciones que han colaborado, desde orquestales (Air Lyndhurst Sting Orchestra) hasta cuartetos (The Dirac Quartet) o la violonchelista islandesa Hildur Guđnadóttir en el hipnótico "A deal with chaos". Orfeo también está presente en algunas referencias a la película Orphée (Jean Cocteau, 1950) que sobrevuela temas como "A song for Europa" o "The radiant City". Y en general esa idea de metamorfosis nos ofrece una visión compleja de la música que tiene un compositor que nos sorprende con cada nuevo disco. 



Nick Cave and The Bad Seeds - Skeleton Tree
Bad Seed Ltd.     14 / septiembre / 2016

En nuestra lista de discos recomendados publicados durante 2016 hemos hablado de grabaciones que giran en torno a la muerte, como los últimos lanzamientos de David Bowie o Leonard Cohen; canciones hechas con la presencia incierta del final de la vida. En las historias que cuenta Nick Cave, muchas veces, también esta presente la muerte. Pero en su último disco, el excelente Skeleton Tree, es más palpable. Mientras se grababa, en julio de 2015, uno de los hijos de Nick Cave murió con 15 años cuando cayó accidentalmente por un acantilado. La presencia del joven Arthur sobrevuela todo el álbum, aunque ninguna de las canciones están estrictamente dedicadas a él. Pero, si las grabaciones de Nick Cave and The Bad Seeds suelen tener ese aire de melancolía, de tristeza, de narración en blanco y negro, aquí se hace más palpable la desazón. Desde el tema con el que se abre el disco, el hiriente "Jesus alone", Skeleton Tree se presenta como un proceso de luto que va derivando lentamente hacia esa cierta esperanza que transmite el tema que da título al disco, que es también su más lógica conclusión. Junto al álbum, se ha estrenado el documental One more time with feeling (Andrew Dominik, 2016), que dibuja con acierto el doloroso proceso de gestación de uno de los álbumes más complejos y podríamos decir que personales de la discografía de Nick Cave.



Bon Iver - 22, A million
Jagjaguwar     20 / septiembre / 2016

Sin duda, el grupo que forman los componentes de Bon Iver es una de las colaboraciones más creativas de los últimos años. Encabezados por Justin Vernon, y tras varios años de silencio después del éxito de su anterior álbum, Bon Iver (2011), regresan a la escena musical con una de las propuestas más sorprendentes del año pasado, repleta de sonoridades impactantes, de creaciones insólitas y de letras que describen un mundo interior profundo y envolvente. Casi podríamos decir que este tercer disco consigue reivindicar a la banda como una auténtica joya de la música, y esta grabación como una de las mejores cosas que han pasado en el mundo de la música reciente. En la primera audición, cada uno de los temas que nos proponen es sorprendente, desde los propios títulos de cada tema, que juegan con las letras y los símbolos para confundirnos aún más. Encontramos percusiones casi tribales en "10dEAThbREasT ⚄ ⚄" hasta esos silencios electrónicos en "715 - CRƩƩKS", que nos absorben en su pausado camino. El grupo, cuyo nombre surgió de un episodio de Doctor en Alaska (CBS, 1990-1995), no ha estado realmente en silencio en estos años, con colaboraciones en discos de Francis and the Lights o James Blake, especialmente durante 2016. No cabe duda que Bon Iver tiene un sonido característico, que viene marcando también una forma especial de construir sus composiciones, experimentando con las sonoridades gracias a algunos instrumentos creados por Justin Vernon y sus ingenieros. Hasta encontrarnos en "8 (circle)" con esa perfección que nos describe su título, esa transformación de canciones de estilo folk en propuestas experimentales que sobrepasan su condición de mero pasaje musical. Y ahí es donde radica la grandeza de Bon Iver. 


Mikky Blanco - Mikky
Dogfood-IK7     23 / septiembre / 2016

Aunque se trata de un álbum de debut, en realidad Mikky Blanco ya nos venía ofreciendo desde 2012 pinceladas de su faceta como artista polifacético. Aquí encontramos todos los elementos que la han convertido en una de las artistas más sorprendentes de los últimos años: su militancia gay, su desbordante capacidad musical o su radical forma de retorcer el rap y reconvertirlo en un arma contra los convencionalismos. Mikky Blanco se nos revela en cuerpo y alma, con colaboraciones como la de Woodkid en el sinfónico y reivindicativo "Highshool never ends", primer single del álbum, cuyo videoclip dirige Dev Hynes, más conocido como Blood Orange. Y adopta ese activismo transgénero que le ha venido caracterizando para transformarlo en un alarde de virtudes que componen un hetedoroxo álbum. Pero es cuando nos muestra sus temores personales cuando va más allá de la mera performance musical, como en ese "You don't know me" en el que describe su opinión sobre la repercusión mediática que tuvo el anuncio de su condición de seropositivo a finales de 2015. 



The Yearning - Evening Souvenirs
Elefant Records     30 / septiembre / 2016

The Yearning es una formación británica que sin embargo distribuye el sello madrileño Elefant Records, al que hay que alabarle el gusto a la hora de descubrirnos a grupos como éste. Compuesta por Joe Moore, que interpreta todos los instrumentos, y por la cantante Maddie Dobbie, han creado con Evening souvenirs una de las más delicadas grabaciones que se han publicado últimamente. The Yearning vienen ofreciéndonos desde sus anteriores discos esos sonidos que nos recuerdan a la música de los años sesenta, más cercanos al pop británico en Dreambots and lemonade (2014), y más afrancesada en este último, como ya muestra ese toque Nouvelle vague del videoclip que acompañaba al primer single, el magnífico "When I Lost you". Desde los temas instrumentales con los que se abre cada disco, hermosos pasajes que nos recuerdan a la suavidad elegante de Yann Tiersen, sabemos que estamos ante un ramillete de canciones que hablan del amor y del desamor envueltos en suaves arreglos de cuerdas y de pianos quebradizos que sostienen la suave cadencia vocal de Maddie Dobbie, acompañada en ocasiones, como en ese precioso y melancólico "The moment your heart would say goodbye", uno de los mejores temas del álbum. El propio Joe Moore se atreve a co-interpretar vocalmente una de las canciones, ese "Nightingale" que nos recuerda a los sonidos de Burt Bacharach y de tantas composiciones que marcaron la música y el cine de los años sesenta.


Jenny Hval - Blood bitch
Sacred Bones     4 / octubre / 2016

El sexto album de la cantautora noruega Jenny Hval nos introduce, desde la propia portada y su título, en un universo vampírico, que marca ya el concepto de un disco en el que la sangre (la menstrual, la sagrada, la terrorífica...) tiene una presencia impactante. En algunos momentos, el disco de Jenny Hval suena a aquellas electrónicas incursiones musicales de Goblin que marcaron el sonido característico del giallo italiano de los años setenta, como en ese asfixiante "In the red", en el que la respiración angustiosa se apodera de una aparente huida del terror. También hay referencias en el álbum a los personajes principales de la película Persona (Ingmar Bergman, 1966) y al documentalista británico Adam Curtis, especialmente en ese hipnótico "Untamed region" que incluye diálogos de sus películas. Y en sus pasajes más románticos, como "Conceptual romance", la sexualidad también está muy presente, especialmente en las referencias a la novela de Chris Kraus I love Dick (1997), que habla de una mujer enamorada de un hombre llamado Dick (polla en inglés). Nada es complaciente en este disco, que la propia Jenny Hval define como un "diario poético sobre la trascendencia y la transitoriedad modernas", y llega al máximo exponente experimental en el orgánico "The plague", una suerte de proceso creativo de sonidos y voces que resulta intrigante y angustioso.


Solange - A seat at the table
Saint-Columbia     5 / octubre / 2016

En el caso de otros autores de raza negra que hemos comentado aquí hemos hablado de su preocupación por la reivindicación de la libertad a través de sus discos (la incomprensión del odio está presente en Mykki Blanco, en Blood Orange, en Donald Glover aka Childish Gambino...). De nuevo encontramos esta preocupación en el último disco de Solange, la hermana de Beyoncé, que realiza un intenso reclamo de la condición de mujer negra en una sociedad que rezuma todavía machismo y racismo, a pesar de las libertades conseguidas. "Rise", el tema que abre el disco, es una especie de himno que hace referencia a los asesinatos a manos de la policía de personas de raza negra en Baltimore y Ferguson. A lo largo de una carrera que cubre ya más de diez años, Solange ha ido flirteando con diversos estilos hasta desembocar en este soul psicodélico, poderoso y contundente. "Don't touch my hair" es un maravilloso ejercicio de funk electrónico que reivindica a la mujer afroamericana frente a las micro agresiones que sufre cada día, como mujer y como persona de raza negra. A lo largo del álbum diferentes interludios nos van introduciendo en esos mensajes de contenido político y personal que Solange plantea, y que desembocan en contundentes pasajes como "Where we do go" o "F.U.B.U." (For Us, By Us), otra afirmación de la raza negra, con la colaboración de The Dreamer y BJ The Chicago Kid. Sin duda alguna, Solange ha encontrado un lenguaje propio en este tercer disco, lleno de propuestas fascinantes.

Norah Jones - Day breaks
Blue Note     11 / octubre / 2016

La cantante nacida en Texas ha sido habitualmente incluida entre las voces más destacadas del easy jazz, pero en los últimos discos su trayectoria ha dado un cierto giro hacia el pop, con canciones de alguna forma más comerciales. ¿Se trata de una cierta tendencia acomodaticia? Probablemente es más una evolución en una carrera que se ha venido consolidando paso a paso y que la han convertido en una de las voces más destacadas del panorama musical. En Day breaks (2016), Norah Jones nos ofrece una mezcla de ambos estilos, recuperando canciones de Duke Ellington como "Fleurette africaine", que de hecho es casi totalmente instrumental, con el maravilloso saxo de Wayne Shorter como principal protagonista, pero también versionando temas de Neil Young como "Don't be denied". Y en esa mezcla, en la que por supuesto el jazz juega un papel predominante, es en la que encontramos esa capacidad vocal de una artista que parece cómoda en cualquier estilo, y que acaba resultando (como ya ha demostrado en otras ocasiones) un auténtico camaleón que nos hipnotiza en cada género musical. Especialmente envolventes son sus incursiones en esas canciones que popularizó Frank Sinatra como las melódicas "It's a wonderful time for love" o ese vals melancólico que es "And then there was you". Sin duda estamos ante uno de esos discos que marca la carrera de una artista, casi como una especie de declaración de principios que nos recuerda que Norah Jones es algo más que una cantante de jazz. Lo es, sin duda. 


NxWorries - Yes Lawd!
Stones Throw     18 / octubre / 2016

Ya hemos hablado del último disco de Anderson .Paak en nuestra anterior post dedicado a las mejores grabaciones de 2016, ese Malibú que lanzó a principios de año. Los meses siguientes el rapero californiano tuvo tiempo de montar, junto al productor Knxwledge, otro excelente proyecto, ahora con el nombre de NxWorries. En realidad, el disco incluye canciones que se han grabado entre principios de 2015 y marzo de 2016, y nos muestra a un Anderson .Paak algo más combatiente, con letras incluso más contundentes, pero casi siempre hablando de uno de sus temas favoritos: sus relaciones con mujeres. Y en esa tesitura encontramos una de las canciones más líricas del álbum, la hermosa balada "What more can I say", que encaja a la perfección con el tema siguiente, "Kutless", casi como si éste fuera una continuación lógica. Es ahí donde encontramos la mano de Knxwledge, productor que ha venido trabajando desde hace más de una década, que en ocasiones conecta con los sonidos característicos del Rythm and Blues de los años ochenta, como en ese fantástico "Scared money", que suena a Kool and the Gang. Anderson .Paak es un artista que crece con el tiempo, y que en este nuevo proyecto que no sabemos si tendría continuidad, bajo el nombre de NxWorries, demuestra una vez más que tiene muchas cosas que contar y que lo hace con letras frescas y cada vez más elaboradas.

Agnes Obel - Citizen of glass
Pias 21 / octubre / 2016

Tras debutar con el hermoso Philharmonics (2010) y publicar después esa obra maestra que es Aventine (2013), la cantante y compositora danesa Agnes Obel nos presentaba en 2016 otro de esos álbumes que se disfrutan más con cada nueva audición. Este Citizen of glass es, en cierto modo, una continuación de su segundo álbum en cuanto a la introducción de instrumentos de cuerda en muchos de sus temas, aunque en este caso en un formato más de formación de cámara. Se introducen también composiciones instrumentales, como el espléndido "Red virgin soil", y el uso de instrumentos casi arqueológicos, como el teclado electrónico llamado Trautonium, utilizado en los años 20, que da esa sonoridad especial a algunas de las composiciones. Canciones como "It's happening again", que se ha lanzado con un videoclip pixelado creado por  Alex Brüel, nos muestran esa sofisticación característica de la música de Agnes Obel, maravillosamente vuelta en cierto halo de misterio en ocasiones, y en esa cadencia melódica característica de los cantantes de los países nórdicos. Angels Obel comienza en febrero una gira que le llevará por numerosas ciudades de los Estados Unidos, y después lo hará por Europa, aunque por el momento no tiene fechas en España.



Nico Muhly and Teitur - Confessions

Nonesuch Records     21 / octubre / 2016

Sin duda alguna, Nico Muhly es uno de los músicos más inquietos del panorama actual. A su faceta como autor de música clásica contemporánea se unen sus composiciones para el cine en bandas sonoras como El lector (Stephen Daldry, 2008) o Amores asesinos (John Krokidas, 2013), pero también sus trabajos fuera del ámbito clásico, como este Confessions (2016) que nos propone un acercamiento a sonidos cercanos al pop, pero con orquesta de cámara. La propia génesis del proyecto es singular: gestada en 2009 mientras Nico Muhly se encontraba en la Muziekgebouw Eindhoven de Holanda, las letras de las canciones surgen de comentarios anónimos de Youtube que ha ido recopilando a lo largo de los años, y que han tomado forma musical en arreglos de Nico Muhly para una orquesta barroca, la Holland Baroque. La grabación se efectuó en las Islas Feroe, situadas a la misma distancia entre Noruega e Islandia, y de la que es originario el cantante Teitur Lassen, intérprete de cada uno de los temas. El resultado es tan brillante como suelen ser la mayor parte de los trabajos de Nico Muhly, con espléndidos hallazgos como ese "If you wait a little longer" que desarrolla una simple frase que finalmente cobra todo su sentido: "If you wait a little longer than you normally would, the most amazing thing may appear" ("si esperas algo más de lo habitual, lo más maravilloso hará su aparición"). Estamos sin duda ante uno de los discos más singulares de los que han aparecido en 2016, que devuelve al primer plano a un músico cuya capacidad de sorpresa no se detiene, y que incluso ha tenido tiempo para hacer una breve aparición en la espléndida serie Mozart in the jungle (Amazon, 2014-).


Leonard Cohen - You want it darker
Columbia-Sony     24 / octubre / 2016

Si la muerte de David Bowie fue una sorpresa para muchos, la de Leonard Cohen parecía anunciada, y su último disco se presentaba ya desde el principio como un canto de cisne, y como una especie de declaración de intenciones frente a la muerte que ya sobrevenía (Leonard Cohen murió a menos de un mes del lanzamiento de su disco). Mucho se ha hablado del tema que da título al álbum, "You want it darker", que contiene esa resignada frase "I'm ready, my Lord" ("Estoy listo, Señor") porque, más que una representación trágica de la muerte, se trata de una canción que espera con paciencia lo que ha de venir. Más melancólica es la composición central al disco, "Treaty", que se presenta como una batalla perdida, una zozobra dolorosa de quien ya no tiene fuerzas para seguir luchando ("I'm angry and I'm tiren all the time"). Y es una de las representaciones más trágicas que se han escrito jamás en torno a la muerte. En otros momentos encontramos referencias a amores perdidos, que imaginamos con el perfil de aquella Suzanne que él convirtió en mito, como en "I didn't have your love", pero regresa la constante referencia a un adiós que se dibuja en todo el disco. Una vez más está presente en ese viaje que describe en "Traveling light", o en "Leaving the table", donde ratifica: "Dejo la mesa, abandono el juego". 

Ólafur Arnalds - Island songs
Mercury Classics     28 / 10 / 2016

El último proyecto del islandés Ólafur Arnalds es una historia de reencuentros y de descubrimientos personales. El que es, sin duda, uno de los mejores representantes de la música neoclásica actual, con incursiones fantásticas en la televisión como la serie británica Broadchurch (ITV, 2013-), viajó a las distintas islas que componen su país natal para imbuirse del espíritu de sus orígenes, y ha construido uno de los más hermosos homenajes a las raíces que hemos escuchado en mucho tiempo. Podríamos decir que estamos casi ante un EP, porque el disco no sobrepasa los treinta minutos de duración, pero cada tema, cada píldora que desarrolla ese piano lánguido habitual en su autor, es de una belleza intensa. Y además está repleto de colaboraciones que lo engrandecen más: como esa voz profunda del poeta islandés Einar Georg Einarsson mientras recita en "Arbakkinn"; la organista Dagný Arnalds, habitual colaboradora, en el melancólico "Önundarfjöđur"; o la cantante de la banda Of Monsters and Men en la bellísima canción "Garđur". Cada uno de los siete temas está dedicado a una isla, aquella en la que se grabó cada composición, no solo en audio sino también en maravillosos videoclips dirigidos por Baldvin Z. Por eso este lanzamiento de Ólafur Arnalds se disfruta especialmente en imagen y sonido, en esa especie de videoblog que se puede encontrar en su página oficial. Hablábamos de que se trata de un disco de reencuentros. Y también lo es el regreso a Akureyri, la isla natal del músico Atli Örvarsson, autor de excelentes bandas sonoras como Único disparo (David M. Rosenthal, 2013), Rams (El Valle de los carneros) (Grímur Hákonarson, 2015) o The edge of seventeen (Kelly Fremon Craig, 2016). Y lo hace para formar parte de una de las grandes joyas del disco, ese emotivo "Öldurót" que nos pone los vellos de punta. 




Balkan Beat Box - Shout it out
Bertus     11 / noviembre / 2016

Aunque la música y el estilo desenfadado de la banda israelí que nació de los suburbios de Nueva York pueden parecer superficiales o simple carne de discotecas, lo cierto es que es ese espíritu de apertura al mundo el que nos ofrece la principal característica y el mensaje primordial de este grupo que es capaz de hacer levantar a los muertos con sus optimismo. Balkan Beat Box es uno de los representantes destacados de lo que se puede denominar sin temor a equivocarse "world music", que nos transporta, desde las tradiciones más locales hasta los ritmos más urbanos, a mundos casi de fantasía, y cuya música nos envuelve como si no hubiera un mañana. Quizás en su último álbum no encontramos las ideas y los hallazgos del espléndido Nu med (2007) con el que hicieron su aparición de forma estrepitosa en el mundo de la música, pero estos israelíes consiguen crear un ambiente de fiesta continua que nos atrapa y nos envuelve. Esa voz con tonalidad de reggae que tiene el vocalista Tomer Yosef es especialmente notable en temas como "Chin chin" o ese maravilloso homenaje que hacen a Nueva York en "This town", la ciudad en la que nació este grupo que recomendamos especialmente ver en sus disparatados conciertos. 

Recondite - Corvus
Ghostly Intl.     11 / noviembre / 2016

El alemán Lorenz Brunner, conocido artísticamente como Recondite, publicaba en 2016 un EP que incluye cuatro piezas electrónicas y un remix que le confirman como uno de loas artistas de música electrónica más interesantes del momento. En su variedad de estilos, que van del Deep House Ambient al Acid Techno, Recondite construye perfectos engranajes que traspasan la mera condición de su arquitectura sonora para establecer una conexión con su audiencia (especialmente perceptible en los directos del DJ, que se van acoplando en base a la percepción que él recibe del estado de ánimo de su público). Brunner creó uno de sus discos más personales, Hinterland (2013), para el sello discográfico Ghostly International, y ahora vuelve a publicar este ramillete de temas que hay que reconocer que no ofrecen nada nuevo al estilo habitual del DJ, pero que consigue envolvernos en un ambiente musical que ofrece un sonido más serio y con aire más melancólico. "Capable" es uno de sus hallazgos, especialmente en la versión que cierra el EP, con un remix del brasileño Ricardo Donoso que resulta más mágico. Sin olvidar el tema que da título al disco, "Corvus", cuyo título hace referencia a los cuervos, y que Brunner define como inspirado en la música de Ryuichi Sakamoto y Aldo Novo para la película El renacido (Alejandro González Iñárritu, 2015). 


A Tribe called Quest - We got it from here... Thank your for your service
Epic     17 / noviembre / 2016

Hemos hablado de cantantes que nos han dejado en 2016 sus testamentos musicales, como David Bowie y Leonard Cohen. Pero también llegamos al final de la carrera de uno de los grupos pioneros en el hip hop, A Tribe calles Quest, que desde los años '90 han venido imprimiendo un estilo particular al género que ha influido en la mayor parte de los cantantes de rap de la actualidad. Su reunificación viene siendo un rumor desde hace 18 años, pero finalmente publicaron su sexto y último disco a raíz de su aparición en el Show de Jimmy Fallon el 13 de noviembre de 2015, y vivieron en directo las noticias sobre los ataques terroristas que se produjeron en París, especialmente en la sala Bataclan. El destino quiso que, en marzo de 2016, uno de sus principales componentes, Phife Dawg falleciera por complicaciones diabéticas, lo que al final ha convertido este doble disco en un homenaje a una época y a uno de sus principales valedores. En este We got it from here ...Thank you for your service, encontramos ese estilo de eco musical de la sociedad que ya podemos ver en cualquier disco de hip hop, y ese estilo de cohesión sonora que juega modulando diferentes fuentes para construir un complejo entramado musical. Y regresa Busta Rhymes, uno de sus principales colaboradores iniciales, así como una larga lista de invitados especiales, tan variopintos como Elton John o Kendrick Lamar. Estamos ante un tributo inmejorable a la historia del hip hop alternativo. 


Childish Gambino - Awaken, my love
Glassnote     6 / diciembre / 2016

Donald Glover es un artista portentoso, multidisciplinar, que lo mismo trabaja como actor en series como Community (2009-2015) y proyectos industriales como el próximo spin-off de Han Solo en la saga de Star Wars, que adopta su faceta de creador, productor, guionista y protagonista de una de las series revelación de esta temporada, la comedia Atlanta (FX, 2016-). Esta serie gira en torno al mundo del rap en los suburbios, rodeado de violencia y de droga, pero con una mirada humorística que la hace atractiva. Al mismo tiempo, Donald Glover adopta el nombre artístico de Childish Gambino, especialmente en su exitoso álbum Because the internet (Childish Gambino, 2014) y ahora en este espléndido Awaken, my love. Aquí, en otro alarde de inquietud musical, abandona las tonalidades raperas que tenía el anterior disco y adopta un sonido más funk, lleno de grandiosos pasajes melódicos como ese "Me and your mama" en el que se trasforma en una versión de Prince (otro de los genios que se han ido en 2016). Hay que decir que, siendo un artista tan polifacético y con tantos proyectos en marcha, ha conseguido un nivel de producción notable, lleno de aciertos en la instrumentación y en la ambivalencia de sus propuestas, que a veces caminan por una senda y acaban desviándose hacia terrenos más pantanosos que salva con destreza. Es absorbente, casi hipnótico, el comienzo entre guitarra eléctrica y coros con el que comienza el tema "Zombies", o ese magnífico tema instrumental, "The Night me and your mama met", al final del disco. 


Kjartan Sveinsson - Der klang der Offenbarung des Göttlichen
Bel-Air Glamour Records     8 / diciembre / 2016

Kjartan Sveinsson ha sido miembro de la banda islandesa Sigur Rós, para la que ha co-escrito algunos de sus éxitos, además de tocar la guitarra y los teclados, hasta el año 2008, aunque en el álbum de la banda titulado Voltari (2013) también colaboró. Su carrera en solitario ha sido diversa, especialmente dedicada a la música sinfónica y las composiciones para cine y montajes artísticos. En el primero, ha trabajado sobre todo con el director islandés Rúnar Rúnarsson para sus dos largometrajes, Eidjfall (2011) y el espléndido drama sobre la adolescencia Sparrows (Gorriones) (2015). En el terreno artístico, su música se ha unido sobre todo al artista Ragnar Kjartasson, que precisamente es el autor del libreto de la ópera que nos ocupa, que podríamos traducir como El sonido de la revelación Divina. Esta ópera en cuatro actos se estrenó en Berlín en 2014, pero hasta dos años después no se ha editado en disco. Aunque en realidad no se trata de una ópera en sí, ya que no cuenta con participación de actores solistas ni una línea argumental, sino que cada una de las cuatro piezas se interpretaba con un decorado diferente creado por Ragnar Kjartasson que funcionan casi como obras de arte independientes. Comienza con un primer acto, "Teil I", de gran dramatismo, con una progresión en las cuerdas que desemboca en una catarsis que parece querer alzarse hasta el infinito, para continuar con los otros tres actos en los que las voces corales hacen acto de presencia y que, en cierto, va desarrollándose hacia una cierta mirada de esperanza, con un cuarto acto, "Teil IV", que parece el más prístino de todos, con esa voz solista del comienzo que da paso a una especie de iluminación celestial en los coros. Der Klang es una obra de tonalidad triste, de trasfondo religioso y de gran belleza formal que en algunos aspectos tiene coincidencias con el Orphée de Jóhann Jóhansson que hemos comentado anteriormente. Y que, junto a otros trabajos suyos para el cine, corroboran la vitalidad creativa de Kjartan Sveinsson.