28 julio, 2009

Warner: ¡Ay, pena, penita, pena!

Zonadvd.com publica este mes una interesante entrevista con el Vicepresidente de Warner Home Video para España e Italia. Las conclusiones son nefastas. El "vicepresi" nos da mucha pena.

Sin duda, Warner Home Video es una de las distribuidoras de DVD y blu-ray más controvertidas del panorama actual en nuestro país. Aunque su apuesta por el formato 1080p y por ese artificio inútil que son las copias digitales es clara, y en general sus ediciones suelen tener la calidad que, por otro lado, es exigible a una multinacional de Hollywood, la pertinaz negativa a subtitular materiales extra y audiocomentarios por cuestiones de costes o las continuas decisiones de dejar en el olvido a clásicos que sí conocen espléndidas ediciones en Zona 1, la han puesto en el punto de mira de muchos aficionados que no entendemos esta política de distribución.

La entrevista es clarificadora en cuanto a las intenciones de Warner Home Video: seguir igual. Pero resulta sobre todo divertida y sorprendente la retahíla de respuestas inauditas que da en ella el francés afincado en España Oliver Wolff. Estos son algunos ejemplos:

- "Me encantaría traer grandes clásicos que adoro (...), pero no son rentables."

- "...Subtitulamos los extras porque hay mucha gente que los ve, pero la verdad es que los audiocomentarios es un valor añadido que no dejamos de poner pero que realmente luego ve muy poca gente. Y si realmente eres un gran aficionado hasta ese nivel, seguramente entenderás el inglés al menos para llegar a seguir lo que te interesa."

- "Yo soy un fan de las ediciones para coleccionistas, (pero no sacaremos ediciones de coleccionistas en blu-ray)."

Debe ser difícil trabajar en una distribuidora en la que la mitad de las cosas que te gustan no las puedes sacar. Pero personalmente cuando algún jefazo te dice "me encanta esta idea, pero no puedo llevarla a cabo", me entran ganas de partirle la cara. ¡Pues si te gusta tanto sácala adelante con tus cojones!

Lo que surge de estas declaraciones son preguntas que seguramente nadie contestará: ¿para qué se graban audiocomentarios si luego, según ellos, no los ve nadie? ¿Por qué sí se subtitulan los audiocomentarios de El curioso caso de Benjamin Button, por ejemplo? ¿No creen que el escaso mercado de algunos clásicos se debe en parte a las penosas ediciones que se suelen lanzar? ¿De verdad piensa que todos los aficionados al cine saben inglés?

Yo personalmente acabaré comprándome las restantes temporadas de
The wire en el mercado de Zona 1, dada la política de Warner Home Video España. Al fin y al cabo, las ediciones en España, dejando a un lado el pésimo doblaje, no difieren en nada (las de Zona 1 también están subtituladas en español) de aquellas.

En todo caso, aunque Warner Home Video es libre de llevar la política de ediciones que quiera, al menos debemos exigirles que den la información completa. Y que, por ejemplo, cuando lancen la edición especial de Lo que el viento se llevó en invierno indiquen claramente en la carátula qué contenidos están subtitulados y cuáles no tienen subtítulos.

Leer la entrevista completa (Zonadvd.com)


15 julio, 2009

"Lake of fire": La sombra de la duda

El verano es una buena época para recuperar títulos perdidos. Entre ellos, recomendamos especialmente Lake of fire, de Tony Kaye, una visión completa y compleja en torno al tema del aborto que en España permanece inédita.

Tony Kaye es uno de esos directores de los que nos gustaría ver más cosas. A pesar de haber conseguido realizar una de las visiones más brutales sobre el fanatismo con American History X (1998), no se ha prodigado excesivamente en los cines con nuevos proyectos. Quizás el hecho de que tuviera un fuerte enfrentamiento judicial con la productora New Line e incluso con el Director's Guild of America, el sindicato de directores en Hollywood, acusado en numerosas ocasiones de actuar como un lobby para realizadores afines más que como un auténtico recurso sindical para la profesión, ha sido fundamental para entender por qué Tony Kaye no ha logrado mantener una filmografía constante.

En todo caso, al menos pudo dedicar suficiente tiempo para elaborar un contundente acercamiento al debate en torno al aborto en Estados Unidos, principalmente a través de las acciones protagonizadas por las asociaciones Pro-Vida y las asociaciones Pro-libre elección, enfrentadas de forma contundente durante años. Algo así a lo que ha sido (está siendo) el debate en España tras el reciente anuncio de la modificación en la Ley del Aborto.

Lo curioso, en todo caso, es que en nuestro país no exista un debate real sobre el tema, o que películas que pueden aportar una visión en torno a la complejidad de esta elección hayan quedado fuera de nuestras pantallas.

Lake of fire es un documental de dos horas y media en el que el director no tiene el menor problema en plantear las dudas que pueden asaltarnos a quienes mantenemos una postura no radicalizada sobre cualquier debate de calado ético o moral. Y realmente define con precisión la contaminación que las ideologías políticas y/o religiosas pueden tener en la verdadera discusión en torno al aborto.

Al margen de ser un documental modélico en cuanto a construcción narrativa, Lake of fire (el "lago de fuego" con el que define uno de los entrevistados el infierno en el que se quemarán las miles de personas que luchan por la libertad de decisión de las mujeres) es una película que plantea una terrorífica realidad. Estados Unidos está poblada de fundamentalistas que resultan tan o más peligrosos que los fundamentalistas que vemos todos los días autoinmolación en los países árabes. La trama principal del documental se centra, de hecho, en el relato de la serie de asesinatos y atentados cometidos por miembros de asociaciones Pro-Vida en los años noventa y principios del 2000.

Y muestra de forma explícita la práctica de un aborto. Pero no parece que el director quiera resultar polémico o exhibicionista, sino que forma parte de la postura imparcial que adopta en todo momento y que al fin y al cabo pasa por mostrarnos la realidad de una dramática intervención que vacía a la mujer no sólo físicamente sino sobre todo emocionalmente.

Y es en esta postura de duda constante en la que Lake of fire consigue ofrecer uno de los planteamientos más profundos que hemos visto sobre un debate que está bloqueado por el fanatismo y la violencia.