Los premios BAFTA TV '24 se entregaron ayer en una ceremonia celebrada en el Royal Festival Hall de Londres, a orillas del Támesis, que por segundo año fue presentada por Romesh Ranganathan y Rob Beckett, quienes se llevaron uno de los dos premios a los que estaban nominados, el de Mejor Programa de Entretenimiento por Rob & Romesh Vs (Sky Max, 2019-). La semana anterior se habían entregado los BAFTA TV Craft Awards, que reconocen las categorías técnicas y artísticas. La ceremonia se celebró con ritmo, de nuevo retransmitida con retardo por BBC y BritBox International, pero fue una noche de final de ciclo, con varias series clásicas en sus últimas temporadas, y con algunos números musicales extraños, como una coreografía basada en la serie Peaky blinders (Netflix, 2013-2022) que nadie entendió. También fue una noche de sorpresas desde el primer galardón, el de Mejor Actriz de reparto para Jasmine Jobson por Top boy (Netflix, 2011-2023), que logró asimismo el premio como Mejor Drama. Algunas de las favoritas se fueron con escasos resultados: The Crown (Netflix, 2016-2023) sin premios, Succession (HBO Max, 2018-2023) con un galardón a Matthew MacFadyen (Actor de reparto) y Happy Valley (Movistar+, 2011-2023) con un premio para Sarah Lancashire (Actriz protagonista). Mejor suerte tuvo la miniserie El quinto mandamiento (Filmin, 2023), que logró dos BAFTA como Mejor Serie Limitada y Mejor Actor protagonista (Timothy Spall). Sorprendieron también los galardones para Such brave girls (Filmin, 2023-) como Mejor Serie de Comedia y Juice (BBC Three, 2023-) como Mejor Actor de Comedia (Mawaan Rizwan), ambas recientemente confirmadas por BBC para una segunda temporada.
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© Stuart Wilson/BAFTA Timothy Spall, Mejor Actor Protagonista |
Otra de las grandes sorpresas de la ceremonia fue el premio a Mejor Serie Internacional para el biopic Bernard Tapie (Netflix, 2023), que en los países anglosajones se estrenó con el título de Class Act: "Hola a todos, soy francés", comenzó diciendo el actor Laurent Lafitte, igual de sorprendido porque había vencido a competidoras como The bear (Disney+, 2022-), Bronca (Netflix, 2023-), Succession (HBO Max, 2018-2023) y The last of us (HBO Max, 2023-). Aunque fue un gran éxito en Francia, permaneciendo diez semanas en el Top 10 de Netflix, Bernard Tapie tuvo mucha menor repercusión en el resto del mundo, y ya resultó llamativa su nominación a los BAFTA. Tras dos nominaciones en años anteriores por Famalam (BBC Two, 2018-2020), Gbemisola Ikumelo finalmente consiguió su BAFTA como Mejor Actriz de Comedia por Black Ops (BBC One, 2023-), mientras que la gala del Festival de Eurovisión, no la del sábado pasado, sino la que presentó en Londres Hannah Waddingham en 2023, consiguió el premio a Mejor Evento en directo. Entre los reconocimientos a programas de telerrealidad, el BAFTA al Mejor Reality fue para la adaptación El juego del calamar: El desafío (Netflix, 2023). Como curiosidad, los BAFTA entregan un premio al Mejor Momento Memorable, el único votado por los espectadores: este año competían, entre otros, el giro de guión de la última temporada de Succession, la historia de Bill y Frank en The Last of us y la revelación de Ncuti Gatwa como nuevo Doctor Who, pero finalmente ganó la repercusión en las redes sociales de la escena final de Happy Valley.
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© Stuart Wilson/BAFTA Such brave girls, Mejor Serie de Comedia |
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El Festival Series Nostrum presentó la semana pasada su programación para la cuarta temporada que se celebrará entre el 31 de mayo y el 9 de junio, con cambio de sede a partir de este año, desde la localidad de Altea, donde se ha venido celebrando en los últimos años, hasta la ciudad de Elche, lo que muestra su crecimiento y la necesidad de mejorar su repercusión, tanto entre el público asistente como entre los medios de comunicación. El festival se estructura en base a proyecciones de series clásicas y actuales, así como encuentros entre profesionales del medio audiovisual y cuatro premios honoríficos. Este año, los homenajes se repartirán entre nombres destacados y series relevantes: el Premio Trayectoria "Chicho Ibáñez-Serrador" se concederá al director Jaime Chávarri (1943, Madrid), que en televisión ha dirigido series como Los pintores del Prado (RTVE Play, 1974), Los libros (RTVE, 1974-1977), Tatuaje (RTVE, 1985) o La mujer duende, episodio de la serie antológica La mujer de tu vida (RTVE, 1994), aunque su trayectoria es más conocida en el mundo del cine con películas como A un Dios desconocido (1977), Dedicatoria (1980), seleccionada en el Festival de Cannes, Bearn o la sala de las muñecas (1983), Las cosas del querer (1989) o El año del diluvio (2004). El Premio Legado recaerá en la serie Amar es para siempre (Antena 3, 2013-2024), el Premio Conciencia se concederá a la serie de José Corbacho Un nuevo amanecer (atresplayer, 2024) y el Premio Repercusión será para la miniserie Nos vemos en otra vida (Disney+, 2024). Esta cuarta edición de Series Nostrum contará con sus habituales secciones de proyecciones, mesas redondas con creadores y guionistas, proyecciones de series documentales en la sección Docuseries Nostrum, y las nuevas secciones Hablando de Series y Del libro a la pantalla. El foco central del festival, que tendrá lugar principalmente en el edificio La Valona, en el campus de la Universidad Miguel Hernández, así como en algunos espacios del Ayuntamiento de Elche, está puesto en los guionistas, con un día completo dedicado a este gremio, que contará con la colaboración de DAMA, en cuya sede se presentaron las actividades del Festival Series Nostrum.
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La Academia de Cine y Televisión de Canadá entrega el 31 de mayo los Canadian Screen Awards 2024, en una ceremonia presentada por el comediante Mae Martin, creador de la recomendable serie Feel good (Netflix, 2020-2021). En cine destacan las 17 nominaciones para Blackberry (Matt Johnson, 2023), que en algunos países ha sido estrenada por AMC+ como miniserie; las doce nominaciones para Vampire humaniste cherche suicidaire consentant (Ariane Louis-Seize, 2023) y las once para Piscina infinita (Brandon Cronenberg, 2023). Las tres son las únicas nominadas en la categoría de Mejor Película. En televisión, parte como favorito el duro drama sobre las niñas indígenas robadas Little bird (Crave, 2023), que consiguió el premio a Mejor Serie y el Premio del Jurado Joven en la pasada edición de Serielizados '23, y que ha logrado 19 nominaciones (duplica en categorías como interpretación, dirección y montaje). Le acompañan como nominadas en Mejor Drama: Essex County (Filmin, 2023) con seis nominaciones; la cuarta temporada de Plan B (Séries+, 2017-), sobre una empresa que ofrece la posibilidad de corregir errores del pasado; la quinta y última temporada de la serie antológica de terror Slasher (Shudder, 2016-2023); y la cuarta y última temporada del drama médico Transplant (Movistar+, 2020-2023). En la categoría de Mejor Comedia, las nominadas son la serie juvenil Bria Mack gets life (Crave, 2023); la sitcom sobre trabajadores de una biblioteca pública Shelved (CTV, 2023-); la tercera temporada de la comedia familiar interpretada por Malcolm McDowell Son of a critch (CBC Gem, 2022-), que en España se puede ver a través de MGM+; la séptima y última temporada de Madres trabajadoras (Netflix, 2017-2023); y la duodécima y última temporada de Letterkenny (Hulu, 2016-2023), de la que ha salido un spin-off. También hay un apartado Digital Media que incluye categorías para web series, entre las que destacan How to fail as a popstar (CBC Gem, 2023), que comentamos más adelante, con 5 nominaciones, así como la versión inmersiva VR (Realidad Virtual) del largometraje documental Eternal Spring (Jason Loftus, 2022), estrenado en Filmin en su formato convencional.
A continuación, repasamos diez series inéditas en España que han destacado en el panorama internacional en los últimos meses. Los siguientes comentarios se basan en el visionado de las temporadas completas de las series comentadas y pueden contener información relevante sobre sus argumentos.
The responder (Temp. 2) ★★★★★ BBC One, 5 de mayo-2 de junio
Reino Unido, 2024 - 5x55'
Escrita por Tony Schumacher
Dirigida por Jeanette Nordahl, Mounia Akl, Charlotte Regan
Se la ha considerado demasiado oscura, pero esta serie creada por el ex-policía Tony Schumacher (1967, Reino Unido) demuestra con su segunda temporada ser uno de los mejores dramas policiales estrenados en los últimos años en la BBC. En este sentido, quizás sea injusto pero resulta inevitable comparar este rotundo ejercicio de tensión con la más decepcionante segunda temporada de
Blue lights (Moistar+, 2023-), que ha necesitado renovar personajes y caer en los convencionalismos después de una extraordinaria primera temporada (ignorada de forma incomprensible en las nominaciones de los BAFTA). Si la anterior entrega tenía una conclusión satisfactoria para sus protagonistas, el guionista retoma a los personajes principales para desarrollarlos con mayor profundidad, empezando por Chris Carson (Martin Freeman), que continúa varios meses después envuelto en ese círculo vicioso en el que siempre necesita realizar encargos fuera de la ley que parecen perseguirle. Tal es su perfil de policía sobornable que nunca es capaz de separarse de la dependencia de oficiales corruptas como Deb Barnes (Amaka Okafor) o la nueva traficante de drogas Jodie Sweeney (Faye McGeever), que se ha hecho con el negocio después del desenlace en la temporada anterior de su marido Carl (Ian Hart), uno de los mejores amigos de Chris. Y además, sus relaciones poco recomendables se amplían con Franny (Adam Nagaitis), quien también tiene algunos encargos para el agente. Martin Freeman aporta las ojeras y la expresión cansada de un policía que está harto de ser un peón, y que intenta recuperar la relación con su esposa Kate (MyAnna Buring), quien está a punto de aceptar un trabajo en Londres y alejar a su hija de él. Pero su solicitud de ser trasladado a una patrulla de día es respondida con claridad por su jefe: "
No quiero que te aferres a esa idea. No vas a conseguir este trabajo de día. Eso no va a pasar. Todo el mundo piensa que eres un gilipollas". De hecho, su compañera de patrulla, Rachel (Adelayo Adedayo) le tiene grabado en el móvil como "
Chris dickhead".
El regreso de los personajes nunca se siente forzado, incluso el de Casey (Emily Fairn), con una especial capacidad para atraer los problemas, y su novio con altibajos Marco (Josh Finan), que esta temporada tiene una subtrama conmovedora de redención. Lo que hace bien The responder (BBC, 2022-) es envolver a sus protagonistas de una cierta fatalidad, un tono de desesperación que provoca que tomen las decisiones menos apropiadas, incluso por parte del personaje de Rachel, una joven agente de policía que todavía se está recuperando psicológicamente de la relación que vimos en la primera temporada, lo que tendrá consecuencias impredecibles. Pero dentro de esta oscuridad que rodea a la serie, hay momentos de esperanza para los protagonistas, incluso cuando Chris consigue retomar el contacto con su padre abusivo Tom Carson, interpretado por el excelente actor Bernard Hill, fallecido a principios de mayo. Efectivamente, puede que todo sea demasiado deprimente, pero The responder gira en torno a eso precisamente, a las consecuencias de las decisiones que se toman y a las burbujas de desesperación que se pueden construir por parte de personajes que se aferran a lo que sea para tratar de sobrevivir. Lo que hace a esta segunda temporada tan sólida es que la mayor parte de las cosas que ocurren tienen su origen en acontecimientos que sucedieron en la primera, y que ahora muestran sus consecuencias, ampliando el desarrollo de los protagonistas. Si se puede considerar poco realista en algunas ocasiones, aunque muestre el trabajo de las patrullas nocturnas a través de intervenciones concretas que ofrecen también una visión algo desesperanzada de la sociedad, también aporta cierto sentido del humor, como cuando en el Episodio 2 Chris tiene que tomar una decisión radical en medio de una intervención porque llega tarde a una entrega que debe recoger en el puerto.
La tensión es constante a lo largo de la temporada, siempre acechando a Chris a través de citas a las que llega tarde, encargos que no salen como esperaba, o móviles que no paran de sonar, y en este sentido cada episodio es tan agotador como satisfactorio. En el Episodio 4, lo único que quiere el protagonista es encontrar un momento para poder cerrar los ojos, y en este sentido la serie transmite con bastante claridad el efecto psicológico devastador de las patrullas nocturnas, aunque sea forzando la maquinaria para construir un drama que nunca deja de ser nervioso, a lo que contribuye muy bien por cierto la angustiosa banda sonora de Matthew Herbert. The responder se consolida en su segunda temporada gracias a una escritura sobresaliente, que aunque a veces puede estirar demasiado el efecto trágico que sufren los protagonistas, se construye precisamente sobre la base de una tragedia clásica, manteniendo siempre un nivel de autenticidad del que muchas series policíacas carecen.
Canal+, 18 de marzo-15 de abril
Francia, 2024 - 6x55'
Escrita por Éric Benzekri
Dirigida por Ziad Doueri
En la pasada edición de Crossover Festival, el productor Ramón Campos, responsable de Bambú Producciones y
El caso Asunta (Netflix, 2024) afirmaba que en España
no era posible hacer series políticas porque las televisiones y plataformas no estaban interesadas, y porque todas estaban marcadas por un claro posicionamiento ideológico. Él mismo tiene un proyecto sobre el nacimiento de Podemos basado en el libro de Sergio Pascual
Un cadáver en el Congreso (2022, Ed. Altamarea Ediciones) para el que no consigue financiación. Pero es una excusa un tanto extraña porque en países como Francia o Gran Bretaña, donde también los medios de comunicación están definidos ideológicamente, se realizan incursiones muy interesantes.
Baron Noir (Canal+, 2016-) es una de las mejores producciones en torno al mundo de la política que se han hecho en Europa, y su co-creador, Éric Benzekri (1973, Francia) es el responsable de esta fascinante reflexión sobre la sociedad que estamos construyendo, que toma referencias del libro
El mundo de ayer (1942, Editorial Alma), un relato autobiográfico escrito en el exilio por Stefan Zweig (1881, Viena-1942, Brasil), poco antes de suicidarse, en el que describía la caída del Imperio Austro-húngaro y el nacimiento del antisemitismo. El propio título de la serie se extrae de una cita del libro que se incluye en la serie: "
Poco a poco se hizo imposible intercambiar una palabra razonable. Los amigos se habían convertido en patriotas fanáticos. Solo quedaba replegarse sobre si mismo. Y permanecer callado hasta que pase la fiebre". En
La fièvre (Canal+, 2024), se establece un paralelismo con la actualidad respecto a esa descripción de la desaparición de un mundo civilizado debido a la constante confrontación, impulsada por los movimientos extremistas, tanto de izquierdas como de derechas. La historia comienza cuando estalla un escándalo alrededor de un conflicto durante una ceremonia de entrega de premios. La estrella del ficticio equipo Racing Paris, Fodé Thiam (Alassane Diong), da un puñetazo a su entrenador Pascal Terret (Pascal Vannson) llamándole "
sole toubab" (blanco de mierda). Las connotaciones de la expresión "toubab", que utilizaban los africanos para referirse a los europeos blancos, tiene en la actualidad un carácter peyorativo. Más que el propio acto de violencia, la utilización de esta expresión es la excusa para que la extrema derecha considere a Fodé como racista, y la extrema izquierda denuncie el racismo sistemático hacia las personas de raza negra que existe en el fútbol, creando un conflicto social a escala nacional.
A la derecha se encuentra Marie Kinsky (Ana Girardot), una influencer con miles de seguidores que a través de sus redes sociales impulsa el conflicto, y ve en esta polémica el caldo de cultivo para provocar la confrontación que tan buenos resultados da al populismo de la extrema derecha. A la izquierda, Kenza Chelbi (Lou-Adriana Bouzouane) es una profesora universitaria que organiza manifestaciones en las que se denuncian los racismos constantes en la policía francesa, y que quiere atraer a Fodé para que se convierta en una imagen de su lucha. Ella favorece un artículo en la prensa en la que se considera que la posición de centrocampista "box-to-box" (designados para cubrir todo el terreno de juego), que se suele asignar a los jugadores negros en el fútbol, supone "una animalización de los cuerpos negros". En medio, Sam Berger (Nina Meurisse) es una analista que trabaja para una empresa de gestión de crisis para el Racing Paris, que tiene la misión de apagar los fuegos que van surgiendo a raíz del escándalo, y que se extienden a través de las redes sociales. Ella se toma como un reto personal tranquilizar los ánimos de una sociedad cada vez más dividida cuyas consecuencias llegan hasta el Primer Ministro de Francia. En el episodio Box to Box (T1E1), comenta que "hay una epidemia en nuestra sociedad. Todos tienen miedo de todos". Y se da cuenta, antes que otros, que las ramificaciones de esta crisis mediática son mucho más profundas que un simple conflicto futbolístico, parecido a "lo que ocurre en el pánico colectivo en un estadio. Un sálvese quien pueda incontrolable". Es inevitable ver La fièvre como una extensión de Baron Noir, porque hay elementos en común y una sorprendente relación directa, con una escritura perfecta que aporta tensión, y una dirección de Ziad Doueiri, también habitual en aquella, que mantienen un ritmo frenético que nunca se detiene.
Esta historia político-apocalíptica propone reflexiones sobre la sociedad radicalizada, y aborda conceptos como "la ventana de Overton", una teoría del analista estadounidense Joseph Overton que define la viabilidad de una idea política dependiendo del grado de aceptación que ésta tenga dentro de la sociedad, de manera que lo que resultaba insólito se puede convertir en una forma de política generalizada. En la serie, Marie Kinsky utiliza esta estrategia lanzando una idea inadmisible: defender la posesión de armas para todos. Es una propuesta radical que abre un debate que a su vez amplía el marco de la ventana de aceptación a otras ideas más moderadas pero que antes eran igualmente inadmisibles. Hay temas interesantes sobre si es posible que un club de fútbol funcione como una cooperativa, o cómo se pueden controlar las burbujas de las redes sociales de un personaje influyente. En el episodio Kill Bill (T1E7) se consigue un 20% de cuentas falsas infiltradas en la burbuja de una líder feminista. El escritor Éric Benzekri siempre ha tenido como referencias series norteamericanas como El ala Oeste de la Casa Blanca (HBO Max, 1999-2006), con la técnica de "hablar caminando" propuesta por Aaron Sorkin, y Los Soprano (HBO Max, 1999-2007), en cuanto a la estructura de los episodios. La fièvre establece un duelo personal a partir del episodio Le monde d'hier (T1E3) entre Marie Kinsky y Sam Berger, que se mantiene a distancia durante el resto de la temporada. La primera representa la política espectáculo de carácter populista, que tiene ramificaciones en Donald Trump en Estados Unidos, en el Movimiento 5 Estrellas en Italia y, por supuesto, en la extrema derecha de Marie Le Pen en Francia. Cuando un grupo de manifestantes se reúne frente a su lugar de trabajo, Marie Kinsky decide caminar entre ellos porque sabe que la imagen de ella sufriendo un escrache favorece su discurso de confrontación. Aunque a veces puede ser un personaje algo maniqueo en cuanto a su representación, contribuye a establecer el soporte de una arriesgada serie que no teme explorar hasta dónde puede llegar su propuesta en torno a la manipulación de la opinión pública y los conflictos sociales permanentes en las sociedades contemporáneas.
TVNZ, 29 de octubre-3 de diciembre
Nueva Zelanda, 2023 - 6x50'
Creada por Dianne Taylor, Robyn Malcolm
Dirigida por Peter Salmon
Séries Mania '24: Mejor Actriz - Panorama Internacional
Robyn Malcolm consiguió uno de los premios de interpretación en el pasado Festival Séries Mania, reconociendo el que quizás sea uno de los trabajos más complejos de este año. A la actriz neozelandesa la hemos visto brillar recientemente como protagonista en series como Far North (Three Now, 2023-) y en papeles secundarios en Sweet Tooth: El niño ciervo (Netflix, 2021-2024) y Encerrado con el diablo (Apple tv+, 2023). Pero Penny (Robyn Malcolm) es una especie de torbellino humano, una personalidad a veces algo desquiciada e impulsiva que la convierten en un testigo poco confiable de un supuesto abuso sexual hacia un amigo de su hija por parte de su marido Phil (Peter Mullan). Durante una fiesta de cumpleaños que se celebra en la casa familiar, Ollie (Ian Blackburn) ha bebido demasiado y Phil se ofrece a llevarle a una habitación para que descanse. Cuando Penny se asoma, vislumbra a su marido acariciando al adolescente desnudo, y el primer impulso la lleva a acusarle delante de todos de haber abusado de Ollie, algo que éste niega repetidamente. Si la primera opción del espectador puede ser prepararse para asistir a otro drama en el que el tema central es demostrar que Penny tiene razón, lo que hace After the party (TVNZ, 2023) es mucho más arriesgado y bastante más profundo, porque aborda las consecuencias desastrosas que ha provocado a su alrededor la defensa insistente de Penny de su acusación contra Phil, pero sobre todo de la perspectiva equivocada que tiene la protagonista sobre cómo ha afectado a su entorno. Ella cree, por ejemplo, que Ollie ha intentado suicidarse posteriormente debido a las consecuencias de este abuso, hasta que el joven le dice que lo que realmente le ha destrozado la vida es enfrentarse a la presión de ser una víctima que en realidad no es. Pero esta acusación no solo se sostiene en lo que vio durante la fiesta, sino en otras actitudes y detalles que recuerda.
Cinco años después, la vida en la costa de Wellington parece tranquila, después de que Phil regresara a Glasgow y haya estado ausente, condenado a marcharse aunque nunca haya habido una denuncia formal contra de él. Pero cuando vuelve, los fantasmas del pasado surgen de nuevo, sobre todo cuando es admitido como profesor en un instituto de la localidad, algo que Penny no está dispuesta a permitir. Ella también es profesora y desde el comienzo de la serie, el tema central se plantea en una escena en la que muestra a sus alumnos un video pornográfico encontrado en el móvil de uno de ellos, describiendo la influencia que este tipo de contenidos sexistas y falsos puede tener en sus vidas: "Sé que esto es embarazoso para muchos de vosotros, pero es importante, porque el sexo es maravilloso, y no debéis dejar que esta mierda os lo arruine". El regreso de Phil y la conexión con su hija Grace (Tara Canton), que nunca ha creído a Penny, despierta las tensiones familiares de una situación que siempre está en el ámbito de la ambigüedad entre el convencimiento de ella y la negación de él. Pero la serie explora otros aspectos que sitúan a Penny en una constante ebullición emocional, y plantea dudas sobre su certidumbre. De forma inteligente, se muestra la escena que ha provocado el drama desde el punto de vista de Penny, planteando la disyuntiva sobre si realmente es justificable una acusación tan clara. Pero lo importante es la manera en que ella debe enfrentarse a las consecuencias, como la única persona que realmente está convencida de que tiene razón. Por supuesto, su descenso emocional en relación con el resto de su familia puede hacer pensar en un desenlace previsible. Pero el espléndido guión sabe cómo evitar los lugares comunes hasta llevarnos a la pregunta fundamental: "¿Y si ha sido una equivocación?". Si Phil ha sido desterrado durante cinco años siendo inocente, si la vida de Ollie se ha convertido en un infierno por nada, si Grace ha visto cómo se rompe su familia sin ninguna razón.
Hay otras subtramas que ayudan a perfilar la personalidad de Penny, con la que nos identificamos al principio pero sobre la que vamos progresivamente perdiendo la confianza, conforme toma decisiones impulsivas sin pensar en cómo afectan a los demás, como cuando Grace le pide que no recoja a su hija de la escuela, pero ella se empeña en hacerlo. Ese carácter obstinado la lleva también a cometer un acto de vandalismo contra un barco pesquero que está esquilmando el plancton que mantiene el equilibrio de la fauna marina en la zona (en las reuniones de los vecinos. ella exige acciones más contundentes que escribir una carta de protesta al gobierno). Y entre las muchas actividades que realiza en su frenética agenda cotidiana, ejerce como modelo desnuda en una clase de pintura, una manera inteligente de mostrar la forma en la que Penny se enfrenta a la vida, sin filtros, de una forma tan expresiva y transparente que a veces encaja mal dentro de una sociedad no acostumbrada a una sinceridad tan espontánea. After the party sabe mantener el drama de una manera que la convierte casi en un ejercicio de suspense, como cuando muestra la reacción de Grace contra su madre cuando ella se niega a que su nieta se siente en las piernas de Phil, o la manera en que acosa a Ollie para que éste respalde su versión. Creada por Dianne Taylor y la actriz Robyn Malcolm, con la participación en los guiones de Sam Shore y Emily Perkins, la dirección de Peter Salmon es precisa en cómo deja que la historia fluya sin artificios. Porque los personajes son tan complejos que requieren un compromiso absoluto por parte del espectador con las zonas grises de la historia. Y eso resulta cada vez más difícil de encontrar en el panorama actual.
France 2, 8-15 de enero
Francia, 2023 - 4x55'
Escrita por Vincent Garenq
Dirigida por Vincent Garenq
Si hay algo que en Francia saben hacer bien son las series de ficción basadas en hechos reales, una especie de true crime pero mucho más elegante. Uno de los mayores éxitos de este año ha sido esta adaptación que se presenta como libremente inspirada en el libro Agnès Le Roux: enquête sur la disparition d'une jeune femme riche (1983), escrito por el periodista Roger-Louis Bianchini, cuyo subtítulo define claramente los entresijos de la historia: "La guerra de los casinos, un abogado muy silencioso, la ensalada Niçoise, los banqueros romanos, la mafia y la guerra entre bandas". Porque, efectivamente, es un relato tan intrincado que una de las grandes virtudes de la miniserie es conseguir contarlo en solo cuatro episodios. La historia comienza con Renée Leroux (Michéle Laroque en un registro sorprendente dado que es una habitual actriz de comedia), dueña del lujoso Casino Palacio del Mediterráneo en la ciudad de Niza, cuyo imperio se ve amenazado por la llegada de Jean-Dominique Fratoni (Christophe Favre), un empresario con contactos en la mafia italiana que está decidido a controlar el negocio del juego en la Costa Azul, aunque para ello tenga que utilizar métodos poco ortodoxos y claramente ilegales. Agnès Leroux (Marie Zabukovec) que quiere desentenderse de los negocios familiares, aceptando cualquier oferta para establecer una tienda de arte africano, comienza a tener una relación más que profesional con Maurice Agnelet (Yannick Choirat), un abogado que trabaja para su madre, pero con la que termina teniendo un conflicto laboral, adoptando desde entonces una actitud de enfrentamiento con la familia. El suceso principal se desarrolla en torno a la desaparición de Agnès en medio de los conflictos por la posesión del casino, pero quizás también motivada por su inestabilidada emocional. Conocido en Francia como "l'affaire Leroux", es un caso que se inició en 1977 y se ha mantenido abierto hasta 2014, año en el que tuvo un cierre judicial. Y ha inspirado no solo numerosas publicaciones y documentales, como la reciente miniserie Tant qu'ils ne retrouvent pas le corps (Arte France, 2023), sino también películas de ficción como Riviera francesa (André Téchiné, 2014), con Catherine Deneuve interpretando a Renée Leroux.
Lo que diferencia a esta miniserie es que se centra en la madre y los esfuerzos que encabezó para encontrar el paradero de su hija, viva o muerta, incluso iniciando una investigación paralela que le condujo a conclusiones más precisas que las que había conseguido la policía. El director Vincent Garenq, responsable de otras adaptaciones de casos reales como Présumé coupable (2011), L'enquête (2014) y En el nombre de mi hija (2016), adopta algunas libertades respecto a la realidad que han despertado cierta controversia en Francia, principalmente por el hecho de convertir al personaje de Maurice Agnelet en un abogado que comienza a trabajar con la familia, cuando en la historia real era un amigo de la infancia del padre de Agnès, lo que explica su estrecha relación con la joven de 29 años. Pero, al margen de esta circunstancia, el director consigue una extraordinaria recreación de los ambientes lujosos de la Costa Azul en los años setenta, con la dificultad de que se trata de una historia que se desarrolla a lo largo de cuatro décadas, y tiene una especial capacidad de síntesis para extraer los elementos más relevantes de un caso que en Francia es muy conocido, pero que incluso para espectadores que conozcan menos detalles de la historia resulta fácil de seguir. A partir del segundo episodio, la trama se centra en la desesperación de Renée Leroux y la frialdad con la que actúa Maurice Agnelet, a quien ella considera culpable de la desaparición de su hija. Y es un duelo exquisito y emocionante, que mantiene el suspense en los intentos de la policía por tratar de demostrar la culpabilidad del abogado.
La sobriedad que desprende
Tout pour Agnès (France 2, 2023), que en Francia también estrenó Paramount+, juega favor de la necesidad de contar la historia sin ser sensacionalista, y ofrece una reflexión terrible sobre las consecuencias devastadoras que tiene en las familias, tanto la madre de Agnès como los hijos de Agnelet, un proceso judicial que se mantuvo abierto durante tanto tiempo. Mientras que en los primeros episodios la serie se centra en el enfrentamiento personal, los últimos episodios abren la perspectiva para enfocarse en Guillaume Agnelet y cómo el peso de la permanente acusación contra su padre acaba consumiendo emocionalmente a su propia convivencia familiar con su esposa y sus hijos. Y que en cierto modo también se refleja en el peso de la herencia familiar que Agnès Leroux siente en los primeros episodios, que provoca la necesidad de romper con los lazos familiares.
Tout pour Agnès se ha convertido en otra propuesta de éxito basada en un crimen real para France 2, después de la excelente acogida que tuvo el año pasado
El caso del Sambre (Movistar+, 2023).
BritBox, 5 de marzo
Reino Unido-Sudáfrica, 2024 - 11x45'
Creada por Amy Jephta
Dirigida por Tracey Larcombe, Brett Michael Innes, Rene Van Rooyen
Séries Mania '24: Panorama Internacional
Ya destacamos en nuestras crónicas del festival Séries Mania a esta producción sudafricana como una de las más interesantes que se estrenaron en la sección Panorama Internacional. Catch me a killer (Showmax, 2023) está planteada en parte como un procedimental, pero en realidad no se enfoca tanto en las investigaciones sino en la manera en que la protagonista se ve afectada progresivamente por su implicación personal en los casos. La historia se basa en el libro Catch me a killer (2023), escrito por Micki Pistorius (1961, Sudáfrica), psicóloga forense considerada la primera que utilizó el estudio psicológico para establecer un perfil de los asesinos en serie que ayudara a las investigaciones policiales. Su primer caso fue el de Norman Afzal Simons, apodado Station Strangler (el estrangulador de la estación), quien supuestamente violó y asesinó a una veintena de niños entre 1986 y 1994, aunque solo se demostró en el tribunal su vinculación con un asesinato, siendo condenado a 28 años de cárcel (en 2023 salió en libertad condicional). Este caso, que ocupa los dos primeros episodios presentados en el festival, se acerca más a un procedimental en el que Micki Pistorius (Charlotte Hope) participa en las investigaciones, con cierta incredulidad por parte del jefe de policía Cornelius Venter (Gavin Werner), estableciendo un perfil psicológico que demostró que podría tratarse de un profesor. La serie se estrenó en la plataforma Showmax en Sudáfrica a principios de febrero y a partir de marzo se puede ver en BritBox, la plataforma de BBC en algunos países anglosajones y escandinavos. Compuesta por once episodios, algunas veces dedicando dos al mismo caso, como en The Phoenix Strangler (T1E8-9), el interés principal está en cómo la serie va derivando hacia un estudio psicológico de la protagonista, cada vez más obsesionada con perfilar lo antes posible a los criminales adentrándose en su mente, hasta el punto que comienza a referirse a ellos en primera persona. Como indica la promoción, "para coger a un asesino tienes que introducirte en su cabeza", pero en el caso de Micki Pistorius esta identificación personal tiene consecuencias para su propia salud mental y la de su entorno.
La escritora sudafricana Amy Jephta se ha encargado de escribir cuatro de los episodios, entre ellos los dos primeros, mientras que un equipo de guionistas británicos formado por Oliver Frampton, Sarah Hooper y Jessica Ruston han ido perfilando una temporada que en algunos episodios como Donnybrook (T1E5), centrado en el asesino y violador Christopher Mhlengwa Zikode que en 1995 fue sentenciado a cadena perpetua, se acerca más a series como Mindhunter (Netflix, 2017-2019), porque se sostiene en el interrogatorio al convicto. De hecho, parte de la responsabilidad de Micki Pistorius se produce después de que han sido arrestados, y es necesario conseguir una confesión para poder acusarles de la mayor parte de sus crímenes. En Stewart Wilken (T1E7), dedicado a un asesino que fue condenado a siete cadenas perpetuas en 1997 por violaciones y asesinatos (también practicó la necrofilia), la protagonista mantiene en una entrevista con un periódico local que los asesinos en serie "no son monstruos, sino seres humanos, almas torturadas, lo que los hace más peligrosos. Si piensas en ellos como monstruos resulta más difícil atraparles". La actriz británica Charlotte Hope, que interpretó a Catalina de Aragón en La princesa de España (MGM+, 2018), da vida con profundidad a una protagonista que siente cada vez más la necesidad de capturar a los asesinos antes de que sigan actuando, una obsesión que la hace más vulnerable en The saloon killer (T1E10-11), en el que investiga los asesinatos cometidos por Velaphi Ndlangamandla, condenado en 1998 a 137 años de prisión por matar con un rifle a varios grupos de personas. Se calcula que en los años noventa Sudáfrica tenía el segundo mayor índice de asesinos en serie en el mundo, lo que refuerza la idea de que el perfil psicológico se convierte en una herramienta fundamental. La serie aporta una puesta en escena sólida a través de una fotografía que muestra un color apagado, envolviendo las diferentes ciudades por las que pasa la protagonista en una textura similar, una atmósfera que tiene algo de claustrofóbica. Pero al elegir no limitarse a ser un procedimental propone una mirada más reflexiva sobre la naturaleza del mal a través de asesinos que pueden pasar totalmente desapercibidos dentro de la sociedad, y que están asimismo atrapados en sus propios traumas internos. Stewart Wilken (Albert Pretorius), llega a preguntar a la psicóloga: "¿Por qué han tardado en atraparme? Estaba cansado de matar, pero no podía parar hasta que no me cogieran".
We were the lucky ones ★★★★☆ Hulu, 28 de marzo-2 de mayo
Estados Unidos, 2024 - 8x55'
Creada por Erica Lipez
Dirigida por Thomas Kail, Amit Gupta, Neasa Hardiman
En las últimas semanas se han producido dos estrenos que adaptan populares novelas relacionadas con el Holocausto, pero con resultados muy diferentes. El tatuador de Auschwitz (Movistar+, 2024) es una coproducción entre Australia, Gran Bretaña y Estados Unidos basada en la novela de Heather Morris (1953, Nueva Zelanda) El tatuador de Auschwitz (2018, Ed. Espasa), que a su vez narraba las experiencias reales de la relación romántica entre los prisioneros eslovacos Lali Sokolov y Gita Furman dentro del campo de concentración, pero cuya veracidad ha sido puesta en duda (uno de sus hijos denunció graves imprecisiones en el libro, como el nombre incorrecto de su padre (escrito Lale), algo que la serie corrige). En un informe Fact-checking del Centro de Investigación Conmemorativo de Auschwitz se concluía que "este libro no puede recomendarse como un título valioso para personas que quieran explorar y comprender la historia de KL Auschwitz." (Wanda Witek-Malicka, Auschwitz Memorial Research Center, 11/2018), aunque se verificaba la existencia real de Lali y Gita. En todo caso, la serie anunciada como una gran producción con música de Hans Zimmer, acaba cayendo en todos los tópicos de la representación nazi, con un oficial desquiciado del que se desliza una homosexualidad reprimida, y una poco creíble inmunidad del protagonista, aderezada con escenas de violencia que a veces resultan sonrojantes, con alemanes riendo malvadamente mientras golpean a niños. El guión introduce a Heather Morris (Melanie Lynskey) y cómo le afectan emocionalmente sus conversaciones con Lali Sokolov (Harvey Keitel), pero indicando continuamente que se trata de un anciano que tiene pesadillas y alucinaciones, una forma poco sutil de desvincularse de las críticas a la veracidad de la historia. Con menos aparato mediático también se ha estrenado We were the lucky ones (Hulu, 2024), que se basa en la novela de Georgia Hunter (1978, Massachussets) Fuimos los afortunados (2017, Ed. Umbriel). Pero en esta ocasión es una aproximación mucho más interesante que aborda mayores complejidades en torno al relato de la represión contra los judíos, basado en la experiencia de la familia de la escritora. Creada por Erica Lipez, productora de The Morning Show (Apple tv+, 2019-) y Julia (HBO Max, 2022-2023), esta miniserie se centra en la familia judía polaca Kurc, que vive de una forma acomodada en la ciudad de Radom (Polonia), reuniéndose para la celebración de la Pascua en 1937, alrededor de los progenitores Sol (Lior Ashkenazi) y Nechuma (Robin Weigert), propietarios de una próspera tienda de telas. Los cinco hermanos tienen también una vida resuelta: el mayor, Genek (Henry Lloyd-Hughes) acaba de comenzar una relación con Herta Seifert (Moran Rosenblatt), mientras que Jakob (Amit Rahav) es fotógrafo y Mila (Hadas Yaron) se enfrenta con incertidumbre a la maternidad. Aunque la historia se centra más en los hermanos menores, el músico Addy (Logan Lerman) y la joven Halina (Joey King), que trabaja en la tienda de sus padres. Lo que propone We were the lucky ones es una saga familiar que se rompe cuando las primeras noticias sobre la represión llegan a esta pequeña ciudad, y cada vez resulta más difícil salir de Polonia para buscar refugio en otros lugares. De manera que la familia queda dividida entre diferentes países (cada episodio tiene el nombre de una ciudad), con un primer intento de Haina de huir hasta Leópolis (Ucrania), mientras Addy consigue llegar a Francia e iniciar un largo trayecto en el exilio.
Muy pronto, la familia Kurc se convierte en una visualización de la diáspora judía, representando diferentes experiencias provocadas por la represión nazi, y We were the lucky ones se conforma como un relato clásico muy emotivo sobre la ruptura y la opresión, pero evitando algunos lugares comunes y el habitual retrato esquizoide de los alemanes. Por el contrario, los diferentes miembros de la familia viven una experiencia desigual, como la libertad siempre teñida de preocupación e incertidumbre por parte de Addy, que pasa por Casablanca hasta llegar a Río de Janeiro (curiosamente, muchos judíos fueron recibidos por países como Argentina y Brasil, los mismos que terminarían acogiendo a los nazis huidos tras la guerra). Mientras que Jakob, Generk, Mila y Halina se enfrentan de una manera más directa a la imposición del antisemitismo, a veces ayudando a los grupos de la resistencia. La serie construye bien este crecimiento progresivo de las coacciones y la represión, con momentos de tensión constante que enfrentan a los protagonistas a situaciones muy dolorosas. En el episodio Casablanca (T1E4), el camión en el que intenta huir Mila es interceptado por soldados alemanes y sus ocupantes son obligados a cavar sus propias tumbas. Conociendo su destino inevitable, la madre es capaz de cualquier cosa para que su hija Felicia se salve, en uno de los momento más sobrecogedores de la serie. Porque We were the lucky ones no es una historia fácil de ver, a pesar de que renuncia inteligentemente a la explicitud de la violencia. Más bien, transmite una idea mucho más aterradora, y es que la sombra del nazismo es una amenaza que parece perseguir a la familia, no importa donde traten de escapar. Es una idea poderosa que refleja asimismo una complicidad callada por parte de otros países que restringen los visados para quienes intentan salir de Europa.
Los caminos emocionales que deben recorrer los protagonistas a lo largo de estos ocho episodios suponen también una transformación. Halina pasa de ser una joven despreocupada que quería renunciar al matrimonio al que aspiraban muchas mujeres judías como su hermana Mila, hasta que encuentra el amor a través de la resistencia y del orgullo. Mientras que Genek cambia desde una actitud de de playboy hasta una personalidad mucho más realista intentando sobrevivir al invierno en un gulag siberiano. Los directores Thomas Kail, responsable de la adaptación del musical
Hamilton (Disney+, 2020), Amit Gupta, conocido por
La materia oscura (HBO Max, 2019-2022) y Neasa Hardiman, directora de
The Power (Prime Video, 2023), mantienen bien el equilibrio entre tensión y emoción, logrando una narración que recuerda a las películas clásicas, con una hermosa banda sonora de Rachel Portman que aporta esa delicadeza humana que transmite la historia. El nivel de producción es notable, creíble y lo suficientemente ambicioso como para construir una aproximación épica pero al mismo tiempo muy íntima. La serie se rodó en Rumanía, mientras que los escenarios de Brasil fueron rodados en la provincia de Málaga y algunas escenas en la costa de Cádiz.
We were the lucky ones termina con un poderoso episodio,
Rio (T1E8), que a pesar de su duración de una hora y cuarto, es uno de los más emocionantes de la serie, el retrato de una familia que acaba como empezó, reencontrándose en la Pascua de 1945, pero en un estado completamente diferente al del comienzo, incapaz de participar en las celebraciones por la derrota de Alemania, ensombrecida la esperanza de un futuro con la pérdida de los que quedaron atrás. Cuando regresan a Radom solo para comprobar que su casa está ahora ocupada por otra familia que la ha alquilado "legalmente", es inevitable pensar en los territorios ocupados de Palestina y cómo la Historia ha convertido a los reprimidos en represores.
Alibi, 24 de abril
Reino Unido, 2024 - 8x42'
Creada por Toby Whithouse
Dirigida por Daniel O'Hara, Lisa Clarke
Desde que comienza este drama policial tiene la tonalidad de la veterana serie criminal Los asesinatos de Midsomer (Prime Video, 1997-), que alcanzó el año pasado su temporada veinticuatro, pero en la presencia de una agente de policía llegada desde la capital a una pequeña población que está acostumbrada a resolver los problemas por sí misma, puede recordar también a la película Arma fatal (Edgar Wright, 2007), en la que Simon Pegg era un superpolicía de Londres enviado a un pequeño pueblo de la campiña inglesa. Pero en la última creación de Toby Whithouse (1970, Reino Unido), responsable de la inclasificable Quiero ser humano (BBC, 2008), los acontecimientos que se suceden son mucho menos previsibles de lo que parece. La detective Grace Narayan (Anjli Mohindra) es enviada a la pequeña isla galesa de St. Jory como una especie de castigo por su denuncia de corrupción policial que trajo consecuencias inesperadas. En la pequeña comunidad de St. Jory todos se conocen pero también guardan secretos que se mantienen amparados por las creencias que siguen los preceptos de la denominada The True Way, una antigua secta que utilizaba las supuestas propiedades de un antiguo pozo para establecer una justicia basada en cultos paganos. Los habitantes de la isla están acostumbrados a resolver sus problemas bajo el liderazgo de Lady Heather Nancarrow (Adjoa Andoh), y el antiguo jefe de policía Gruffudd Prosser (Mark Lewis Jones), ahora retirado, asumía su papel de simple observador. Pero Grace tiene una ética profesional que la enfrenta a las costumbres del pueblo, especialmente cuando comienza a investigar junto a su ayudante Owen Parry (James Bamford) la desaparición de un adolescente que lleva un año sin dar señales de vida y cuya investigación por parte del antiguo jefe de policía es puesta en duda por la nueva agente.
Interpretada con seguridad por la actriz Anjli Mohindra, a la que hemos visto en
The Lazarus Project (AMC, 2022-2023), Grace tiene algunos traumas personales por resolver mientras reabre el caso de la desaparición de Cai, algo que agradece su padre Ian Prideaux (Marc Warren) el médico del pueblo, cuyo alcoholismo provoca una personalidad cada vez más inestable, enfrentándose a las creencias del resto de la comunidad. Pero esta investigación se ve interrumpida por algunos acontecimientos inesperados: desde un extraño asesinato hasta una tormenta que obliga a todos los habitantes del pueblo a cobijarse en el edificio del ayuntamiento, con el sacerdote Douglas Carrisford (Sam Swainsbury) ejerciendo como aglutinador de los temores de la comunidad. Grace sufre constantemente el menosprecio de Gruffudd Prosser, especialmente cuando descubre que la desaparición puede tener alguna relación con extraños rituales que se llevan a cabo alrededor del pozo de la antigua mina.
The Red King se adentra cada vez más en los terrenos del paganismo, cuando comienzan las celebraciones en torno al Rey Rojo en las que todos los habitantes del pueblo ocultan sus rostros bajo máscaras que conectan con las costumbres célticas de disfrazarse para evitar ser confundidos con los espíritus nocivos. Lo que conecta a la serie con películas de culto como
El hombre de mimbre (The wicker man) (Robin Hardy, 1973), en la que un policía recién llegado a una pequeña isla escocesa se enfrentaba a los ritos paganos de la comunidad, y también con aquel experimento transmitido en directo durante veinticuatro horas que se titulaba
El tercer día (HBO Max, 2020), protagonizado por Jude Law, que tenía evidentes referencias a la película de los años setenta.
La serie también se beneficia de un reparto que incluye nombres como Mark Lewis Jones, al que hemos visto en
Mi reno de peluche (Netflix, 2023) y próximamente en
The way (Filmin, 2024), el debut como director del actor Michael Sheen, y a Adjoa Andoh, una reconocida actriz de teatro que se ha hecho más popular por su participación en
Los Bridgerton (Netflix, 2020-). Su experiencia se pone de manifiesto en un contundente monólogo de seis minutos en el episodio final en el que ofrece una explicación convincente sobre por qué St. Jory necesita seguir las tradiciones paganas: "
Hubo un tiempo en el que la justicia tradicional funcionaba. Echo de menos esa época". La serie se adentra en el terreno del misterio para ir derivando hacia cuestionamientos filosóficos sobre el sentido de justicia, pero también reflexiones sobre cómo el aislamiento provoca distorsiones de la realidad, envueltas en doctrinas paganas que de alguna manera malinterpretan el sentido de imparcialidad. En un momento de la serie, se celebra una especie de juicio por votación popular que decidirá la supervivencia o la muerte del condenado, convirtiendo la historia en un ejercicio de terror que representa cómo las creencias moldean las relaciones humanas.
BBC One, 31 de marzo-28 de abril
Reino Unido, 2024 - 6x58'
Creada por Steven Knight
Dirigida por Paul Whittington
El muy prolífico Steven Knight (1959, Reino Unido) viene estrenando entre dos y tres series cada temporada, lo que quizás explica la irregularidad de sus propuestas. Desde series clásicas como Peaky blinders (Netflix, 2013-2022), hasta auténticos desastres como las adaptaciones de Charles Dickens Cuento de Navidad (Disney+, 2019) y Grandes esperanzas (Disney+, 2023), o La luz que no puedes ver (Netflix, 2023), pasando por notables producciones como Los hombres del S.A.S. (HBO Max, 2022-). Y todavía le queda tiempo para escribir guiones de largometrajes como María (Pablo Larraín, 2024), un biopic sobre la artista Maria Callas, que continúa su colaboración con el director chileno desde
Spencer (Pablo Larraín, 2021). Pendiente el estreno de la miniserie
Ferrari (Apple tv+, 2024) y la segunda temporada de
Los hombres del S.A.S., actualmente se pueden ver dos series creadas por Steven Knight: el decepcionante thriller
The veil (FX, 2024) y la interesante aproximación a la escena musical de finales de los setenta
This town (BBC, 2024). Describir exactamente una historia que parece estar basada en la juventud de Steven Knight, puede ser complicado porque es el retrato de una época muy compleja, abordando desde la eclosión de la segunda ola de la música ska procedente de los sonidos que surgieron desde Jamaica, que se desarrolló entre 1979 y 1983, hasta el conflicto norirlandés y la presión del IRA en determinados sectores de la población. El protagonista principal es Dante (Levi Brown), un joven universitario de Birmingham que no puede conseguir la atención de la chica que le gusta, Fiona (Freya Parks), y que escribe canciones pero es incapaz de crear música, algo para lo que tiene un especial talento su amiga Jeannie Keefe (Eve Austin). Mientras tanto, su primo Bardon (Ben Rose) vive en Coventry involucrado en algunas actividades ilegales junto a su opresivo padre Eamonn Quinn (Peter McDonald), estrechamente ligado a un grupo local del IRA. Su abuela Marie (Geraldine James) intenta evitar que Bardon se vea involucrado en acciones violentas, acudiendo al sacerdote de la comunidad, pero la respuesta es una visita amenazante de Mrs. Porter (Séainín Brennan), la responsable del grupo terrorista.
La serie comienza durante una noche de 1981, con disturbios entre jóvenes radicales y la policía en Birmingham que conectan con los enfrentamientos de los norirlandeses con el ejército inglés esa misma noche en Belfast. El hermano de Dante, Gregory (Jordan Bolger), tiene el carácter duro y arrogante que él nunca ha tenido, con un pasado criminal que le ha llevado a encontrar su única salida en el ejército. Pero un ataque de pacifismo, que le lleva a recitar poesía y repartir flores, le coloca al borde de la expulsión. En medio de las turbulencias sociales, el racismo, los conflictos laborales y la opresión del terrorismo, la música y la poesía se convierten en la única forma de contrarrestar estos desafíos. Mientras el padre de Dante y Gregory, Deuce Williams (Nicholas Pinnock), participa desde el episodio 5 en las protestas que protagonizaron en 1981 los trabajadores de la planta de automóviles Rover, de Birmingham, contra la pérdida de empleos que provocará su cierre, los jóvenes intentan formar una banda de ska que les permita salir de ese entorno. This town tiene la capacidad de reflejar la inestabilidad de todo un país en un espacio concreto, estableciendo 1979 como el comienzo de la grave crisis económica que afrontó Gran Bretaña durante los años ochenta. Y quizás la serie intenta aglutinar demasiados de estos conflictos, también introduciendo al gángster Robbie Carmen (David Dawson), que obliga a un hombre a introducirse en la boca los dedos cortados de un traidor, como si estuviéramos viendo Peaky blinders. Un funeral reúne a la familia dispersada, especialmente a los primos Dante y Bardon, y trae de vuelta a la madre de este último, Estella, una mujer alcoholizada que ofrece una excelente interpretación de Michelle Dockery, muy alejada de Downton Abbey (RTVE Play, 2010-2015) y Buena conducta (Movistar+, 2016-2017) en la que formaba pareja con Juan Diego Botto.
This town es una propuesta ambiciosa que a veces puede perder el foco entre tantos hilos narrativos, pero que tiene una escritura inteligente y bien estructurada, un trabajo tan elaborado como complejo, y que se siente creíble y profundamente personal, aunque en la banda sonora encontremos menos música ska y más canciones populares de la época. El grupo The Specials, uno de los representantes del 2-tone, el ska-rock que surgió en la segunda ola de popularidad de este género, publicó como single en 1981 la canción "Ghost town", en la que cantaban: "This town is coming like a ghost town" (Esta ciudad se está convirtiendo en una ciudad fantasma), y que se convirtió en un himno de la degradación de la sociedad británica en los ochenta, de donde proviene el título de esta serie. Aunque puede ser decepcionante para quienes esperen un retrato más profundo de la escena musical de la época, especialmente en relación con Fuck the Factory, la banda que forman los protagonistas de la serie que solo se consolida al final, This town funciona como un espectáculo ambicioso que introduce una pincelada de esperanza y cierta alegría juvenil en medio de los conflictos políticos, económicos y sociales que rodean a sus personajes.
BBC Three, 16-30 de abril
Reino Unido, 2024 - 6x25'
Creada por Matilda Curtis, Ashley Storrie
Dirigida por Niamh McKeown
Entre las comedias británicas que se han estrenado estos meses ninguna como ésta ha encontrado el equilibrio adecuado entre el sentido del humor y la relevancia de sus mensajes. La irregular
Big mouth (Channel 4, 2024), de Camilla Whitehill, aborda la relación entre dos amigas, interpretadas por las conocidas Nicola Coughlan y Lydia West, pero carece del desarrollo adecuado de los mecanismos humorísticos, con secuencias alargadas y poco efectivas. También representa en el personaje principal un trastorno bipolar que, si bien consigue evitar los lugares comunes al principio, en los últimos episodios acaba cayendo en los tópicos (como es bipolar, Maggie tiene visiones de personas que no existen). La serie se estrenó en Estados Unidos a través de Tubi, canal FAST (Streaming gratuito con publicidad) de Fox Corporation. La más gamberra
Things you should have done (BBC, 2024) intenta trasladar las payasadas de su creadora Lucia Keskin (más conocida como Chi) desde las redes sociales, principalmente YouTube y Tik Tok, hasta un formato de serie, pero ni encuentra el tono, ni resulta muy adecuada dentro de un desarrollo narrativo que necesita más consistencia. Ella misma protagoniza esta historia sobre una joven que debe aprender a hacerlo todo después de que sus padres fallezcan en un accidente, pero en realidad no importa, porque Chi acaba viviendo con sus tíos, así que la premisa se pierde rápidamente, y la serie no consigue armar una estructura suficientemente sólida, ni los sketches son especialmente divertidos dentro de una producción bastante amateur.
Dinosaur (BBC/Hulu, 2024) es una producción de Two Brothers Pictures, que fundaron Harry y Jack Williams, los productores de
Fleabag (Prime Video, 2016-2019) y creadores de series como
El turista (HBO Max, 2022-2024) y
Boat story (SkyShowtime, 2023). Basada en una idea de Matilda Curtis, que ha escrito los guiones, y creada junto a Ashley Storrie, una de las protagonistas, la serie se centra en dos hermanas que se enfrentan a un momento decisivo en su relación cuando Evie (Kat Rooney) le dice a Nina (Ashley Storrie) que va a casarse con un joven al que ha conocido por las redes sociales, lo que se convierte en un desafío para ésta última.
Nina trabaja como paleontóloga en el Museo Kelvingrove de Glasgow, y se muestra preocupada por el anuncio inesperado del compromiso de su hermana con Ranesh (Danny Ashok), al que ha conocido hace solo seis semanas: "Has tenido llagas en la boca que te han durado más de seis semanas", le dice. Así que cuando Evie le sugiere que ha invitado a Ranesh a su habitual cena de los martes de comida a domicilio, la expresión de asco de Nina es muy notable. De hecho, el espectro autista del personaje se muestra sobre todo a través de su dependencia de las rutinas, lo que la hace especialmente eficiente en el trabajo de catalogación de excrementos fosilizados de dinosaurios. La familia de ambas está formada por sus padres rebosantes de optimismo Diane y Ade MacArthur, interpretados por Greg Hemphill y Sally Howitt, una reconocida actriz escocesa que lleva veinte años interpretando un papel principal en la telenovela River City (BBC Scotland, 2002-). Y su hermano mayor Bob (David Carlyle) quien, frente a la alegría de Evie, siempre ha priorizado encajar en una cierta normalidad, aunque tiene una especial atracción por las mujeres inestables. Su actual relación le provoca incomodidad, pero tiene más miedo a estar solo, lo que le hace uno de los personajes más interesantes de la serie. Dinosaur habla precisamente sobre cómo encajar dentro de la sociedad, pero no solo por la neurodiversidad: cuando la familia MacArthur se prepara para conocer al padre de Ranesh en el Episodio 2, quieren impresionarle tanto que no se comportan de forma natural, lo que acabará en un desastre, aunque Sachin (Rajeev Kohli) tiene asimismo sus dosis de rarezas. Nina también conoce a Lee (Lorn MacDonald), un joven que trabaja en la cafetería ambulante The van around the corner, situada cerca del museo, pero su primera cita en el Episodio 3, agobiada por la presión de probarse un vestido como dama de honor de la boda, también será problemática. La serie utiliza resortes muy clásicos en la construcción de la comedia, pero funcionan bien porque los personajes están definidos con claridad.
Surgida como un piloto en 2021, que Matilda Curtis escribió, protagonizado por Ashley Storrie, quien después se incorporó como guionista, Dinosaur también tiene un tono especial que le proporciona el carácter escocés y el escenario de Glasgow, aunque en el Episodio 4 Evie se empeña en hacer su despedida de soltera pasando un fin de semana en la isla de Rothesay, que sigue siendo un pueblo pesquero aburrido como lo era en su infancia. Ashley Storrie es hija de una de las grandes actrices de comedia de Escocia, Janey Godley, quien acaba de estrenar el documental Janey (John Archer, 2024), en el que a través de su última gira como monologuista, hace un repaso a los altibajos de su carrera y habla con su hija sobre el diagnóstico de cáncer que recibió recientemente. Mientras que Kat Rooney también tiene padres conocidos: el productor Simon Curtis y la actriz Elizabeth McGovern. La relación entre ambas es el motor de una historia en la que el autismo está presente pero nunca como definición simplista del personaje principal, al mismo tiempo que consigue mostrar diferentes versiones de la neurodiversidad que cada vez está más presente en la televisión, con series como Atypical (Netflix, 2017-2021) o As we see it (Nuestra mirada) (Prime Video, 2022). Nina también se da cuenta a lo largo de su arco de personaje que los esfuerzos por intentar suavizar "su rareza", como lo llama ella, quizás no son necesarios, y la mirada hacia Ranesh cambia progresivamente: "Eres como eres y está bien. No pasa nada porque te guste comer kebabs. Quiero decir, es malo para tu tracto intestinal, pero está bien". Lo que hace a Dinosaur una propuesta que funciona en su mezcla de humor y sentimientos personales es la capacidad para construir unos personajes que están lo suficientemente bien definidos como para que la narración se desarrolle con facilidad.
How to fail as a popstar ★★★★☆ CBC Gem, 13 de octubre
Canadá, 2023 - 8x10'
Creada por Vivek Shraya
Dirigida por Vanessa Matsui, Vivek Shraya
Canneseries '24: Competición Formatos Cortos
Canadian Screen Awards '24: 5 nominaciones
El éxito que ha acompañado a la artista transgénero Vivek Shraya (1981, Canadá) quizás puede hacer pensar que el título de su primera serie es poco apropiado. Autora del exitoso ensayo Temo a los hombres (2018, Ed. Luz Negra), escribió también la obra de teatro How to fail as a popstar (Canadian Stage, 2020), dirigida por Brendan Healy, en la que contaba su fracaso al intentar convertirse en la "Madonna morena", y que posteriormente publicaría como un libro y finalmente como esta web serie. Vivek Shraya en realidad no ha fracasado en el mundo de la música, porque de hecho obtuvo junto a otros compositores el Canadian Screen Award 2023 a la Mejor Banda Sonora por la serie Más o menos (Movistar+, 2021-2024). Pero How to fail as a popstar (CBC Gem, 2023), que también compite este año en los premios de cine y televisión canadiense dentro de las categorías de web series, es una autoficción que aborda el fracaso de querer convertirse en una estrella de la música, desde que el adolescente Vivek (Chris D'Silva) es alabado por su voz después de cantar bhajan (canciones religiosas hindúes), aunque él lo que quiere realmente es cantar sobre un escenario como una diva de la música. Sus primeros fracasos se producen en el concurso anual de cantantes que se celebra en su instituto, en el que se presenta varios años sin conseguir un triunfo. Y cuando en The judge (T1E3), el joven Vivek (Adrian Pavone) pide consejo para saber qué debe hacer para conseguir el reconocimiento, uno de los miembros del jurado le contesta: "¿Has pensado en llevar pantalones de cuero?", a la manera de Freddie Mercury. Es uno de los consejos extraños que recibirá a lo largo de su carrera como artista, como cuando en el episodio The producer (T1E3) un productor musical le sugiere que introduzca sonoridades orientales en sus canciones. Precisamente uno de los aspectos interesantes de la historia es cómo redefine la representación tradicional que se hace en películas y series canadienses de los personajes racializados con orígenes asiáticos, a los que siempre se asignan sus entornos culturales. Incluso la madre del protagonista, Chandrika (Ayesha Mansur Gonsalves), no es la esposa sumisa habitual, sino que se muestra como una mujer tenaz que acepta la búsqueda de identidad personal de su hijo, aunque también establece límites muy claros, como cuando Vivek le pide 20.000 dólares para iniciar un proyecto musical: "¿Te crees que soy Oprah Winfrey?" le contesta ella.
Desde su localidad natal, Edmonton, Vivek sin embargo tiene la oportunidad de iniciar una incipiente carrera que le llevará hasta Toronto, en The call (T1E4), y posteriormente hasta París en The record deal (T1E7), aunque siempre adentrándose en los entresijos menos fastuosos del mundo de la música. Cuando le proponen una actuación en un club parisino, finalmente es una participación en una fiesta corporativa que se celebra en la habitación de un hotel. Las grandes alegrías que se producen cuando recibe la llamada de un productor o de una manager, casi siempre acaban en decepciones que demuestran cómo el talento está rodeado de falsedades e imposiciones que al final acaban desvirtuando la propia identidad del artista. Y para Vivek el trayecto hacia el reconocimiento de su música es también un camino hacia la búsqueda de una identidad personal, una transición que también es de género, asumiendo su fracaso en lo artístico, pero alcanzando el triunfo en lo personal cuando se transforma en la mujer que siempre ha querido ser, aunque no se trate de la estrella del pop con la que soñaba. En el último episodio, The failure (T1E8) la protagonista, ahora interpretada por ella misma, asume su posible fracaso en el mundo de la música pero también se completa como persona, a sus cuarenta años y una exitosa carrera como escritora y muchas otras facetas artísticas, aunque permanece esa decepción de no haber logrado el objetivo que un día fue el sueño de su vida. Aunque principalmente ha sido dirigida por Vanessa Matsui, también directora de episodios de Letterkenny (Hulu, 2016-2023), Vivek Shraya también ha dirigido algún capítulo y ha compuesto todas las canciones de la serie.
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Películas mencionadas:
A un Dios desconocido, Dedicatoria, Bearn o la sala de las muñecas y Las cosas del querer se pueden ver en FlixOlé.
El año del diluvio se puede ver en Acontra+.
Piscina infinita se puede ver en Movistar+.
El hombre de mimbre se puede ver en Filmin y Movistar+.
Spencer se puede ver en Prime Video.
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